Bahía Blanca | Lunes, 08 de septiembre

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Empresas de software: algunas ideas para un sector que tiene mucho para darle a Bahía

Un especialista de la Universidad Nacional del Sur abogó entre otros puntos por fortalecer los vínculos con las universidades.

Apuntalar a la industria de software local necesita de políticas públicas que se concentren no sólo en cuestiones fiscales y crediticias, sino en aprovechar el poder de compra del Estado local y sus instituciones para incentivar el diseño de nuevos productos y de productos específicos, para luego pasar a venderlos a nivel nacional e internacional, de acuerdo con un especialista bahiense en desarrollo local.
Es que la industria generó más de 2.000 millones de dólares de exportaciones el año pasado, cifra que supera a las de lácteos, es la mitad de las de carne bovina y alrededor de un cuarto de lo que generan los automóviles, contando estos últimos con la facilidad de un acuerdo de comercio específico con el Brasil.
Para José Ignacio Diez, investigador del CONICET y docente de la UNS (foto, abajo), es indispensable que además, se resuelvan los “problemas de articulación y coordinación, que no permiten definir un rumbo claro para el segmento del software”.
“No existe a nivel local un plan estratégico que articule a estas organizaciones y a las empresas en pos de definir una orientación productiva de mediano y largo plazo. Existen muchos proyectos interesantes que permitirían que el sector crezca, pero en general carecen de avances significativos y en muchos casos compiten entre sí".
"Por ejemplo, la propuesta de distrito tecnológico en la Zona Franca Bahía Blanca Coronel Rosales y el proyecto de Parque Tecnológico en dependencias de la UNS”.  
“También se observa una política municipal errática, con creación y disolución de oficinas y agencias, que dificulta la interacción con el sector público, todas cuestiones que deberían corregirse si se pretende generar incentivos correctos para el desarrollo de la actividad en la ciudad”, manifestó.
Otro de los aspectos a mejorar tiene que ver con los débiles eslabones de colaboración que unen al sector con las universidades e institutos locales, algo que debería fortalecerse, dada el elevado uso de recurso humano calificado que se necesita.
“La cooperación no parece estar tan presente cuando se analizan los vínculos de las empresas con las entidades científicas y tecnológicas de la ciudad. Aquí no se observa que las mismas demanden asistencia tecnológica, aunque si pasantías de estudiantes avanzados provenientes de la UNS o de institutos terciarios”.
“En principio se cree que no hay demanda de asistencia tecnológica por parte de las empresas debido a que los productos que fabrican (o los servicios que prestan), no son demasiado complejos y los problemas que pueden surgir para su diseño, fabricación o prestación pueden subsanarse contactando a otros colegas del rubro. En este sentido, se observa una distancia temática grande entre las líneas de investigación de las universidades y el CONICET y lo que podrían ser los requerimientos de las compañías locales”, hizo notar.
En ese sentido, una de las recomendaciones pasa por reafirmar la figura del vinculador tecnológico, que actualmente está presente en las Casas de Altos Estudios de la ciudad, para que acerque la demanda de las empresas del sector a la oferta de las instituciones científicas.
“De esta manera, se podrían lograr mayores sinergias entre la producción, los servicios y las capacidades tecnológicas locales, al tiempo que se incentivaría una mayor imbricación de la producción de software y servicios tecnológicos con el resto de la actividad productiva local, para mejorar la capacidad competitiva de todo el sistema productivo bahiense, incentivando que las pymes de la ciudad incorporen tecnología ligada al software”, dijo Diez.

Radiografía
Diez, quien realizó dos estudios entre sobre la industria bahiense del software, indicó que el mayor porcentaje de las ventas se concentra en el mercado regional y local.
“Las empresas producen mayormente software a medida, específicamente lo que se conoce en la jerga como ERP y CRM (N de R: en la jerga, sistemas de gestión para empresas). Este software es excesivamente idisioncrático, se hace a medida de los requerimientos del cliente y requiere de un contacto fluido entre el proveedor y la empresa que contrata el servicio. Los principales factores para competir en el mercado del software a medida son la calidad del servicio, la reputación y el precio”, explicó.
Agregó que se trata de un tipo de software que se vende mayormente en el mercado local-regional, fundamentalmente a empresas industriales, como las del polo petroquímico o el parque industrial, comerciales y de servicios.
“Existen pocas empresas de la ciudad que exportan y las ventas al exterior suelen ser esporádicas, no existe un destino claro y definido para la exportación".
"Aquellas que exportan, le venden su producto a otras empresas del sector software”.
Generalmente, se "enganchan" transitoriamente en cadenas globales de valor, en los eslabones de menor valor agregado, realizando lo que se conoce en la jerga como “picado de código” o actividades de testeo de software, diseñado mayormente por otras empresas.
Explicó Diez que en aquellas firmas con inserción internacional, los principales factores que facilitan sus exportaciones son el buen manejo del idioma inglés, el uso horario que permite mantener relaciones con Estados Unidos, Europa u otros países de América Latina sin problemas, el tipo de cambio favorable y el buen nivel académico de nuestros profesionales.
Con respecto a la innovación de producto, las firmas bahienses suelen innovar haciendo e interectuando con sus clientes.
“Es decir, los cambios que se realizan en los productos fabricados suelen ser menores y acumulativos a lo largo del tiempo e implican procesos de aprendizaje empresarial. Habitualmente se trabaja sobre un paquete prefijado de producto y sobre esa base se realizan las modificaciones, de forma tal que el código fuente permanece inalterado. Se recicla permanentemente el código fuente, que es la esencia fundamental del producto”.
“Algo que es interesante del universo de empresas de software de la ciudad es que suelen cooperar bastante para el diseño de nuevos productos o la prestación de servicios, al menos esto parece ocurrir con más frecuencia que en otras localidades similares y que también cuentan con firmas de servicios informáticos”, dijo Diez, para finalizar.