Aeropuerto: cada vez más cerca del servicio de ómnibus hacia la ciudad
Se prevé que empiece a funcionar en este septiembre. Lo realizará la línea 520, que también llega a Cabildo. Aprobación desde la comuna.
Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.
Luego de varios años de gestiones, idas y venidas, finalmente se prevé que en septiembre próximo quede habilitado un servicio de ómnibus entre nuestra ciudad y la Aeroestación Civil Comandante Espora. Estará a cargo de la empresa que, con el número 520, cubre actualmente el recorrido a Cabildo.
“Adquirimos una unidad nueva que estamos pronto a recibir. Nos queda pintarla con los colores de la compañía y estimamos que, en un mes, estaremos en condiciones de comenzar con el servicio”, señaló —a este medio— el titular de esa firma, Dante Lange.
En términos similares se manifestó el secretario de Gestión Urbana, Tomás Marisco, al confirmar que desde el punto de vista administrativo se está en condiciones de habilitar la prestación, una vez que la empresa disponga de la unidad mencionada.
Hoy, un taxi o remis desde la plaza Rivadavia hasta la aeroestación (unos 13 kilómetros de recorrido) implica una tarifa de $ 4.000.
Si bien queda por confirmarlo, el uso estará adaptado para utilizar la tarjeta SUBE. Y quedan por definir los lugares desde donde partirá el coche, qué recorrido cumplirá por la planta urbana y determinar el valor del pasaje.
Se recuerda que, a partir del 1 de agosto, regirá un nuevo cuadro tarifario, en el cual el boleto urbano costará 192 pesos y el viaje entre nuestra ciudad y Cabildo (52,8 kilómetros) alcanzará los $ 364.
Además de dar respuesta a los usuarios del servicio aéreo, esta línea es muy esperada por el personal que se desempeña laboralmente en el aeropuerto que, hoy, deben concurrir en vehículos particulares, motos o bicicletas.
Incluso, muchas de las empresas que se desempeñan en el lugar suprimieron la prestación de transporte a sus empleados buscando reducir gastos.
Recurrir, hoy, a un taxi o remis desde la plaza Rivadavia hasta la aeroestación, que son unos 13 kilómetros de recorrido, supone una tarifa de 4.000 pesos.
El estacionamiento
A 15 años de que el actual concesionario de la Aeroestación Civil Comandante Espora —Aeropuerto Bahía Blanca SA (ABBSA)— desistiera de tomar la concesión de la playa de estacionamiento del lugar, la municipalidad ha dejado de lado la idea de convocar una nueva licitación, buscando interesar a privados para su explotación y, de esa manera, percibir un canon mensual.
En 2008, ABBSA renunció al compromiso asumido al momento de ser confirmado como concesionario de la terminal aérea por considerar que el pago de un canon mensual de 16.000 pesos, establecido por ordenanza municipal, significaba “un negocio deficitario”.
Desde entonces, la comuna no logró modificar esa situación, con lo cual la playa sigue siendo de uso gratuito; con condiciones generales regulares —sobre todo en la calidad del pavimento— e impide generar al municipio una recaudación que serviría para afrontar parte del pago mensual de $ 121.000 que hace a la Armada Argentina por el uso de las tierras.
El último intento por concesionar la playa data de 2018, cuando la comuna realizó una licitación que tuvo dos empresas interesadas. A pesar de tener ofertas razonables y que el pliego exigía la puesta en valor el espacio —reparación del pavimento, una cubierta sobre algunos de los boxes, una casilla de control— no se pudo concretar la adjudicación debido a una serie de observaciones, realizadas tanto desde el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuerto (ORSNA) como de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), entidades que deben dar el visto bueno para el uso del lugar.
Sobre el tema, Marisco señaló que, en particular el ANAC, exigió que se construyera una red de incendios en el lugar, obra cuyo costo estimado actual orilla los 130 millones de pesos.
“Es una obra que, si se la exigimos al privado, seguramente no va a encontrar rentable administrar la playa. Y tampoco la municipalidad puede hoy considerarla prioritaria”, señaló el funcionario.
Señaló, además, que si bien el estacionamiento no está en las condiciones óptimas, se ha mejorado su sistema de iluminación y se realizan tareas de bacheo y mantenimiento general.
La playa del aeropuerto tiene capacidad para 300 vehículos.
No deja de ser curioso que, desde esos organismos, se exija la materialización de esa red de incendio como condición para su concesión a un privado cuando el uso del área está en plena operatividad, con gran ocupación a lo largo de todo el día.
En 2018 se planteó su uso con una tarifaria horaria equivalente a dos litros de nafta premiun de YPF; es decir, poco más de 500 pesos la hora al valor actual. Por otra parte, establecía un valor equivalente a 6 litros de ese mismo combustible por cada estadía de 24 horas.
Una curiosidad que registra hoy en día el estacionamiento, de acuerdo a datos aportados por personal del aeropuerto, es que el sitio es utilizado por varias concesionarias de automóviles, que dejan sus autos en el lugar, sacando provecho de que no deben pagar, que hay vigilancia, iluminación y pavimento. Una concesionaria aérea.