Bahía Blanca | Martes, 14 de mayo

Bahía Blanca | Martes, 14 de mayo

Bahía Blanca | Martes, 14 de mayo

Willie Scott está en la ciudad: "Mi sueño es venir a dirigir a Bahía"

El recordado base, que dejó su sello en Estudiantes, participa de un campus y el viernes dirá presente en "El partido de las glorias".

Willie, con el Casanova de fondo. Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

Twitter: @rodriguezefe

Instagram: ferodriguez_

 

Willie habla con los chicos, les indica, los corrige, disfruta con ellos, en esa misma cancha que le genera tantos recuerdos.

Pasaron 37 años desde que conoció el Casanova y llevaba 18 sin volver.

“Cuando entré al club hoy (por ayer) me puso muy feliz, porque hacía mucho tiempo que no venía. Esta cancha es especial para mí”, resalta.

Scott, el base inolvidable de Estudiantes, que tuvo un fugaz paso por Olimpo y Rivadavia de Necochea, está en la ciudad participando del campus Navallo-Agulló, organizado en conjunto con Estudiantes, y será parte del “Partido de las glorias”, el viernes, a las 21. Las entradas pueden adquirirse en TicketBahía.

“Tengo muchos amigos y familia (Scarcella) acá; esto no es nuevo para mí”, asegura.

Willie no pasa desapercibido. Sigue siendo Willie. Con unos kilos más que aquél base picante, la barba candado canosa y los dientes que resaltan con su característica sonrisa, es la estrella de la jornada. Casi como cuando llegó por primera vez, siendo un desconocido aunque, en ese entonces, sembrando algunas dudas.

“Cuando vine la primera vez tenía 25 años y era mi primer contrato para jugar profesional, entonces estaba feliz. Aunque los primeros días en Bahía fueron complicados”, recordó.

Y amplió: “La gente me miraba como un base chiquitito, pensaban que no íbamos a poder ganar y yo por dentro me reía, porque sabía lo que podía dar. Fueron solo los primeros dos partidos, porque después me conocieron. Además, siento mucho amor por Huevo (Oscar Sánchez), porque él quería un grande y un base. Y me dijo, Willie ‘sos el jugador perfecto para mi equipo’. Y no había ningún otro técnico que pensara eso”.

El debut oficial de Willie con la camiseta de Estudiantes fue el 28 de abril de 1985.

Scott ataca entre Bollecich y Wendebourg.

Esa noche, en el Norberto Tomás (donde el albo hizo de local), le ganaron a Asociación Española, por 94 a 84 y Scott sumó 11 asistencias, más 7 pérdidas (20 del equipo) y 6 recuperos.

 La síntesis:

 Estudiantes (94): Willie Scott (20), Wilfredo Ruiz (39), Miguel D. Buzzo (10), Sergio Pettorosso (14), Claudio Severini (11), fi; Roberto Juanpataoro. DT: Oscar Sánchez.

 Española (84): Pedro Bustos (10), Pablo Wendebourg (18), Néstor Suppi (16), Rodolfo Bollecich (14), Thomas Wimbusch (25), fi; Gerardo Secrestat (1) y Marcelo Arrigoni. DT: Antonio Brkjlacic.

Primer tiempo: Estudiantes 45, Española 44.

Arbitros: Ramón Freixedes y Yolando Giorgio.

***

—¿Qué recuerdo se te viene de Bahía?

—La gente en la cancha y afuera. Yo era un negro de Chicago, algo que genera problemas en muchos lugares del mundo, pero acá nunca me lo hicieron sentir.

—¿Vos tenías dudas adónde venías?

—Estaba un poco nervioso, no porque me pasara algo, sino porque era todo nuevo y acá no hay negros. Pero en poco tiempo me sentí como en familia. Cuando llegué a Bahía a quien vi primero en el hotel Muñiz fue a Fefo y me dijo: “Vení Willie”, me marcó el camino. Una gran persona.

—El otro día hablé con él y me contó que te decía: “Willie, pasámela y festejá”. ¿Era así?

—¡Sí, sí, sí! Ja, ja, ja...

—¿Era fácil jugar con Fefo?

—Para mí, sí. A otros bases se les podía hacer muy difícil, porque él tiraba todo, pero conmigo siempre se entendió muy bien. Le aclaré: “Yo puedo tirar también. No hay problemas que vos metas 30 puntos por partido, pero yo necesito meter 20, porque si no me quedo sin trabajo. No podés meter vos 50 y yo cero”. Y lo entendió. Por eso fue muy fácil.

—¿Era peleador?

—Je...

Navallo habla. Escuchan Willie y Scarcella.

Ahí intercedió en la charla su amigo Carlos Scarcella y le recordó: “¿Te acordás cuando fuimos en el Falcon hasta Junín, Patricia, vos, Gustavo, Marina y yo?".

“Ah, sí, sí, sí...”, respondió Willie.

Y volvió al relato Escarcha: “Contra River se armó un piñerío y este (indicando a Willie) se puso espalda con espalda con Fefo; voltearon no sé a cuántos, je”.

—Willie, ¿qué recuerdos tenés de esas épocas?

—Me encantaba jugar contra bases muy buenos como (Marcelo) Richotti, (Marcelo) Milanesio, (Miguel) Cortijo. Era mejor para mí. Yo siento mucho respeto por ellos y lo mismo sé que ellos por mí. Eso es lindo.

—La gente tiene muchas ganas de verte, junto con Fefo, Richotti, Esteban Pérez y tantos otros que marcaron una época. ¿Cómo estás?

—Yo creo que el partido del viernes es más para la gente. Tienen que saber que somos grandes ya. Tengo 62 años y no puedo jugar más, me duele mucho la rodilla. Puedo entrar, saludar “hola, ¿cómo están?, los quiero mucho” y nada más, je. Sí es muy importante no jugar fuerte, porque podés romperte.

—Al golf no tenés problemas.

—No, je. Juego.

—Bueno, viste Curry, acaba de ganar un torneo.

—¿Ah sí? ¡Mirá!

—¿Qué hacés en Estados Unidos?

—Confecciono vestimenta de golf y soy técnico de básquetbol para chicos. Mi hijo tiene 14 años y lo entreno todos los días.

—¿Te gusta ser entrenador?

—Me encanta. Mi sueño es venir a dirigir a Bahía.

—¿¡Ese es tu sueño!?

—Bueno, ¿quién te dice? ¿Algún día...?

—Y, puedo venir con mi hijo. Tiene 14 años y es muy bueno. En 10 años va a ser un gran jugador.

—Entonces, tal vez podamos ver otro Scott jugando en Argentina.

—¡Sí! ¿Por qué no? Me gusta. Es playmaker.

—¿Mejor que vos?

—Mejor que yo a los 14 años. A esa edad yo era rápido, pero muy chiquito. Él está más armado físicamente y tira bien. Tiene muchas cosas.

La posible presencia de Peyton quedará para otro momento. El viernes será tiempo de disfrutar nuevamente con la presencia de su papá, ese jugador como el que muchos, alguna vez, quisieron ser.

¡Bienvenido a Bahía, Willie!