Jaime Linares: "En Argentina no hay margen para el optimismo"
El exintendente de Bahía Blanca tocó varios temas de actualidad en su visita al programa "Allica y Prieta a las 12".
— ¿Jaime Linares es optimista o pesimista respecto de Argentina para los próximos años?
— No hay margen para el optimismo por una sencilla razón: hay cuatro o cinco puntos básicos que hay que tener, una idea, un marco referencial, en la educación, economía, energía... Hay algún antecedente posible, porque del '83 y hasta hace poco, los secretarios de Energía emitían comunicados en conjunto, peronistas y radicales. Pero yo hoy no veo vocación de esos encuentros ni liderazgos para hacer fuertes cambios con autoridad moral. En función de eso, mucho margen para el optimismo no tenemos.
La contundente frase del exintendente de Bahía Blanca coronó su visita al programa Allica y Prieta a las 12, que se emite de lunes a viernes al mediodía por La Nueva Play.
Entre otros temas, Linares habló de la dirigencia local, la seguridad, la desigualdad, su relación con Héctor Gay y el resurgimiento del radicalismo.
"La dirigencia local ha mantenido una característica de diálogo no tan común. Quiero rescatar que me tocaron dos crisis muy fuertes, una en el '89 y otra en 2001, siendo intendente, y las dos veces salimos con opositores a bancar la situación y buscar cosas conjuntas que nos permitan dar un mensaje", señaló.
"Me parece que esa característica no se ha perdido, pero sí se ha perdido el aspecto de conciliar temas en el Concejo. El rol del Concejo está diluido y es un ámbito importante", añadió.
En otro tramo, Linares aseguró que la inseguridad no varió mucho en los últimos 30 años.
"No veo una violencia tan grande en general. Se sobre dimensiona el tema de la seguridad con los costos y la inversión que hay para una escala de delitos que no ha cambiado mucho, en porcentajes, en los últimos 30 o 40 años", respondió.
"Sí hay casos preocupantes y sectorizados. No veo una violencia general, sino que son casos puntuales. Los municipios pueden colaborar y tratar algunos temas específicos como las adicciones, la contención, lo social, pero los intendentes no mandan porque no manejan ni los tribunales ni a la Policía, es un tema de la Provincia", añadió.
En tanto, sostuvo que "los momentos son incomparables, son épocas distintas", respecto a cuando gobernó en la ciudad.
Asimismo, destacó que hoy en día "hay mucha desigualdad" y ejemplificó contando que "hay gente que no llega ni al terreno y otros trabajan desde la casa para Estados Unidos; antes el Municipio era importante y hoy es imprescindible trabajando en el acceso a las tierras".
"Veo una ciudad con excepcionales condiciones a futuro en un mundo desigual —continuó—. La ciudad es un centro de medicina extraordinario, tiene un soporte cultural muy interesante; hay muchos intangibles que uno no valora. Hay que potenciar y articular bien la mano de obra calificada que tenemos".
Más adelante, Linares mencionó mantiene reuniones ocasionales con el actual intendente Gay.
"A veces conversamos con el intendente, pero no profundizamos en los temas porque me parece que si a uno no lo consultan no debe opinar. Pero tengo buena relación personal".
Por último, hizo referencia al resurgimiento del radicalismo.
"Empecé a militar en el radicalismo en el '71 y estuve hasta el 2005. Después me di cuenta de que había algunas actitudes dentro del partido que habían envejecido, había una demanda de cosas modernas. Al radicalismo las urgencias lo llevan a no poder tener un liderazgo consolidado que le permita a los intendente plasmar en una gestión en donde ellos sean protagonistas esenciales", completó.