Reanudan el juicio al suspendido fiscal federal Alejandro Cantaro
El funcionario público está acusado de brindar protección a una banda narco que operó en esta ciudad y Punta Alta, y que al parecer integraba su sobrino Sebastián Gauna San Millán.
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Luego de finalizar la feria judicial de verano, hoy se reanudó el juicio que se le sigue al suspendido fiscal general federal Alejandro Salvador Cantaro, imputado de encubrir a una banda narco que al parecer integraba su sobrino político, Sebastián Gauna San Millán.
La de hoy es la cuarta audiencia de debate vía Zoom que dirige el Tribunal Oral en lo Criminal Federal bahiense, conformado por los jueces Ernesto Sebastián (TOCF local), Alejandro Adrián Silva y Simón Pedro Bracco (ambos de General Roca).
El fiscal general ante el TOCF, Gabriel González da Silva, acusa a Cantaro de haber brindado protección a la asociación ilícita que vendía drogas en esta ciudad y Punta Alta, en relación con la causa conocida como Drogas Sintéticas II.
El primer testigo en declarar fue Justo Andrés Sebastián, quien trabajó en el área de Delitos Complejos creada en el ámbito del Ministerio Público Fiscal de la Nación, bajo las órdenes del procesado.
Al ser consultado por González da Silva, el doctor Sebastián, quien no tiene parentesco con el magistrado que preside el Tribunal, afirmó que la oficina mencionada no intervino en la investigación del caso por comercialización de estupefacientes.
"En ese momento tomé conocimiento de la causa porque tuvo mucha repercusión mediática. El trato con Cantaro era formal porque era nuestro jefe, pero a la vez amistoso", declaró el actual secretario subrogante en la fiscalía federal Nº 1.
"Vi al sobrino (del enjuiciado) en el cumpleaños de Cantaro y sabía que estaba viviendo en la casa de Alejandro entre 2015 y 2016, más o menos", agregó.
Además aseguró que nunca vio "a Cantaro consumir estupefacientes" y se refirió al momento en que el hecho tomó estado público.
"(Cantaro) Nos dijo que se iba a tomar una licencia por estrés laboral. Sabíamos lo que pasaba porque era de conocimiento público, a raíz de la gran exposición mediática del caso, y al poco tiempo el área de Delitos Complejos se disolvió", finalizó Sebastián.
"Fueron días estresantes"
Diana Mónica Calahorrano, empleada administrativa habilitada de la fiscalía general ante la Cámara Federal de Apelaciones y quien trabajó con el causante, también recordó el día en que se anotició de lo sucedido.
"Fue impactante; el doctor (Cantaro) había viajado y al regresar nos avisaron que se había tomado licencia. Fue shockeante porque venía haciendo su trabajo con normalidad", indicó Calahorrano.
"Después vinieron a llevarse su computadora (para peritajes); fueron días estresantes", concluyó la abogada.
A su turno, la prefecta Magdalena Evelyn Bravo relató sobre el allanamiento en la vivienda de Facundo Texido, uno de los condenados en la causa principal por narcotráfico.
Sin embargo, la oficial principal de Prefectura Naval incurrió en "contradicciones" respecto de si se secuestró droga en el procedimiento y en cuanto a la conducta de Texido, a raíz del desarrollo de la requisa.
La declarante aseveró que el morador del domicilio no hizo ninguna manifestación al momento del registro, pero en el expediente consta que Texido habría expresado "cuando mi tío (al parecer así lo llamaba a Cantaro) se entere de esto, no le va a gustar nada".
"En ese allanamiento se buscaban rastros de droga, pero el resultado fue negativo", señaló Bravo.
No obstante, y como otra contradicción, en la causa obra que durante el allanamiento sí se incautó estupefaciente.
Después de un cuarto intermedio antes de mediodía, estaban previstos otros testimonios.
El debate oral continuará el próximo viernes 17.
Durante la jornada anterior se habían escuchado las declaraciones de funcionarios del Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal.