Bahía Blanca | Jueves, 28 de agosto

Bahía Blanca | Jueves, 28 de agosto

Bahía Blanca | Jueves, 28 de agosto

Coletazos del temporal: Que se doble pero que no se quiebre

La figura fue colocada por el Comité Radical a principios de este año.

La imagen de Raúl Alfonsín (1927-2009) inaugurada en marzo de este año por el comité Radical local  --en coincidencia con el 14º aniversario de su fallecimiento-- en la intersección de avenida Cabrera y el camino de Circunvalación que lleva el nombre del ex presidente de la Nación, resultó también afectada por el temporal del último sábado.

La estructura de hierro, a pesar de tener mayor proporción de vacíos que de lleno, se dobló por su parte media, quedando levemente inclinada hacia adelante. A simple vista parece sencillo volverla a su posición original y, a lo sumo, reforzar algunos puntos debilitados.

La postura del monumento parece contradecir una de los pensamientos más conocidos de Leandro Alem (1842-1896), fundador de la Unión Cívica, aquel de "que se rompa pero que no se doble", en referencia a su idea de perder la vida antes que ceder a sus convicciones, algo que respetó a rajatablas al decidir suicidarse.

Leandro N. Alem

Alfonsín recurría mucho a esa frase, en particular para referirse a la hipocresía “de los oportunistas de turno”.

Pero también el hecho de que este monumento no se quebrara, permite compararlo con el junco, alegoría habitual pero en sentido contrario: la planta que se dobla pero que no se rompe, que resiste los embates del viento y vuelve a estar de pie. Un ejemplo de resiliencia, la capacidad de hacer frente a las adversidades y superarlas, transformando lo malo en algo positivo. En la línea de pensamiento del filósofo alemán Friedrich Nietzsche: "lo que no te mata te fortalece".

Cada frase con su grado de certeza, sirven para reflexionar sobre las consecuencias el tornado que arrasó la ciudad.

Teniendo en claro que la verdadera tragedia fue la sufrida por los fallecidos en el club Bahiense del Norte, el resto de los daños se enderezarán o se quebrarán, se repararán o se demolerán, pero volverán a existir. Como la figura de hierro de Alfonsín, que en poco tiempo dejará de apuntar al suelo para nuevamente levantar su mirada.