Gino Donofrio: “Mi primer recital fue escuchando a mis viejos”
El talentoso artista nació en Puerto Madryn pero ya es un bahiense más. Compone, interpreta y afina como los dioses. Llegó la hora de presentar temas propios.
Por Franco Pignol
Cuando la zamba se interpreta con el corazón es inexplicable describir la sensación que genera. Me animaría a decir que sin el sentimiento no es recomendable tocar zamba. Hay que sentir. Y si el contexto es el atardecer de un refugio de un camping en la cordillera, es muy difícil que ese recuerdo no se vuelva inolvidable.
El primer instrumento que tocó Gino Donofrio fue el bombo.
“En casa mamamos el folklore. Mi viejo y mi vieja cantaban. Cuando nos íbamos de viaje a la cordillera lo hacíamos en modo camping. Mi viejo sacaba la viola en el refugio y mi mamá se ponía a cantar. Todo el refugio estaba atento a ellos porque la descosían. A partir de ahí comencé a meterme en esto. Primero toqué el bombo, después me vinieron las ganas de cantar”, aclara.
—Me imagino a los tres haciendo un tema de Los Chalchaleros.
—¡Sí! Mis viejos son team zamba. La rompían cantando zambas. Mi viejo es guitarrero y cualquiera que se asomaba, sacaba otra guitarra y se ponía hermoso. Esos eran los recitales en vivo que viví en mi infancia. Mis viejos.
Gino Donofrio se presentará este miércoles en el Teatro Municipal, a las 21, con su proyecto en trío.
—Se nota que los admiras a tu papá y tu mamá.
—Es que tenían algo cuando cantaban juntos, a dúo. Era buenísimo.
Gino Donofrio nació en Puerto Madryn. Luego de unos años en Comodoro Rivadavia, finalmente llegaron con su familia a Bahía Blanca, hace ya unas dos décadas.
“Ya soy más bahiense que de otra ciudad”, dice Gino.
Su capacidad artística es tan amplia que en su recorrido ha formado bandas y grupos de distintos estilos. Fue el cantante y compositor del grupo de cumbia colombiana Lo Luiggi, es el frontman de la agrupación de boleros Juanito Miel, forma parte del staff de Las Serenatas de la Muni y cuando ya se caía de maduro su lanzamiento como solista apareció la pandemia.
“Venía pensando hace muchos años se solista, pero no tenía con qué. Así que aproveché la cuarentena, que fue un momento en el que tenía la necesidad de expresarme. Ahí salieron las canciones y acá estamos”, aclara.
—¿Cómo describirías este proyecto tan personal?
—Antes de empezar a componer mi pensamiento era que yo era buen intérprete. En mi familia y en mi carrera pasé por mil estilos de música. Es por eso que hoy a mi proyecto no lo encasillo en ningún estilo. Hasta ahora no encontré cómo describirlo. Es una combinación que traigo desde chico.
—Contame alguna anécdota con Lo Luiggi.
—Las experiencias más lindas sobre el escenario o abajo fueron casi todas con el grupo humano con el que estaba. Yo soy una persona muy apegada a quienes me acompañan. Me influye bastante. Por ejemplo, cuando tenés un pifie, le erras y el que está al lado tuyo te salva, te tira un salvavidas…
—El bajista, El Manteca (Sebastián Barrionuevo).
—¡Claro! Hay un recital que está grabado en donde estoy cantando, me olvido la letra y digo: ‘ayúdame Seba’ (risas). No había chance de remarla. Quedó registrado (risas). Esas anécdotas lindas se dan por conocerte tanto con quien estás tocando. Lo valoro un montón.
Este miércoles presenta sus canciones
Gino Donofrio se presentará mañana en el Teatro Municipal, a las 21, con su proyecto en trío. Las entradas se consiguen en la boletería del teatro.
En esta ocasión se presentará junto a Gustavo Fernández (batería y percusión) y Maxi Corinaldesi (bajo eléctrico y contrabajo). También habrá varios invitados, entre los que se encuentra un cuarteto de cuerdas y Guillermo García (saxo).