Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

El doble mérito de Gastón Diomedi, la convicción de "Pepe" Aranda y el debut de la pantalla

Liniers le gana la serie final a Bahía Basket por 2-0 (al mejor de 5). 

Gastón Diomedi se llenó de confianza a medida que Liniers consolidó su triunfo. En la foto, ataca a Gabriel Novaes, cercado también por Ezequiel Paz. Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

Por Ricardo Sbrana - rsbrana@lanueva.com

   Dos méritos para Gastón Diomedi en la noche soñada por Liniers (y por muchos que no pudieron ganar en el Dow Center en esta campaña 2021/22 del torneo de básquetbol de Primera): goleador con 26 puntos para dejar la final 2-0 y… Ser el jugador que llevó a los árbitros a estrenar el sistema IRS de revisión instantánea que debutó anoche (ver aparte).

   -Gastón, finalmente pudieron ganar en cancha de Bahía Basket, después de tantos comentarios y fantasmas creados alrededor de las dimensiones del estadio. Terminaron imponiendo el ritmo, como en el primero de la serie.

   -Antes de venir a jugar varias personas nos decían sobre las referencias de los aros, que era una cancha más grande… Pero un cosa graciosa fue que el profe midió la cancha de Liniers ayer, hoy midió la de acá y cree que es un paso más chica la de Liniers.

   Las medidas que no tuvieron discusión fueron las que arrojó la estadística del Chivo: 51% de efectividad en tiros de cancha (dobles y triples), 52 a 32 en rebotes, 20 a 12 en asistencias, 48 puntos en la zona pintada y triunfo final por 25 sin puntos basura.

Herman Banegas se lució en la pintura (en la escena ante Valentín Simondi): 20 puntos y 15 rebotes. Fue el más valioso en el ganador.

 

   “Al tema de las referencias (del Dow Center) lo supimos complementar con la defensa que hicimos. Estuvimos muy fuertes ahí. Después, en ataque por ahí la pelota entraba, por ahí no... Pero buscamos imponer nuestro juego y creo que la clave de hoy (por anoche) fue la defensa.

   -Alcanzaron un pico de 16 de ventaja a 30s para el final del tercero. ¿Los sorprendió esa brecha tan notoria, que inclusive se acentuó en el último cuarto (dos veces por 21, con pico de 24 a 1m40 con triple del propio Diomedi)?

   -La verdad que sí. No nos esperábamos este resultado final, para nada. Teníamos pensado un partido peleado, más que en el primero en Liniers. Por suerte sacamos una linda ventaja en el tercero, como dije, metiendo fuerte en defensa, que eso los hizo correr. Sabemos que no bajan mucho en los contraataques y lo aprovechamos.

Joaquín Sánchez -atacando a Mauro Miérez- aportó 19 puntos para el dueño de casa.

 

   -¿Es difícil no sentirse feliz a esta altura, quedando a un triunfo de lograr el bicampeonato?

   -Obviamente estamos felices de haber ganado este partido porque nos ponemos match point. Pero bueno, tenemos jugadores con experiencia en finales y sabemos que no tenemos que ir relajados el lunes a jugar en Liniers. Tenemos que jugarlo como este partido.

Aranda: “Nos queda una bala”

   “Habíamos planteado un partido y no lo pudimos realizar. El balance es negativo porque no hicimos las cosas que queríamos. Tuvimos malos porcentajes de tres (NdR: 29%), no corrimos como queríamos y sobre todo un déficit en la defensa que nos hizo perder el partido por esta diferencia”, explicó Facundo Aranda, mirando de reojo el tablero.

   El base mendocino reconoció que también hizo falta algo más, más allá de lo defensivo.

   “Nos faltó más manejar el juego. Como dije, no planteamos lo que nos caracteriza: correr, jugar con piernas más jóvenes. Y terminamos cayendo en el juego `seteado´ que plantearon y con los porcentajes de tiro que no fueron los que nosotros queríamos”, agregó.

Iván Catani entra, jugado, a la zona pintada del Chivo para el lanzamiento a una mano.

 

   Aranda no pierde la esperanza de festejar el campeonato con Bahía Basket, más allá que para ello el equipo necesite ganar tres juegos consecutivos.

   “Vamos a salir a ganar. Sabemos que nos queda una bala. No vamos a bajar los brazos, para nada. Y vamos a buscar el campeonato también. Como dijimos en la charla, nos queda una bala. Dejaremos todo en la cancha. Si nos toca ganar, vendremos otra vez a casa a ganar para buscar el quinto partido”, enfatizó.

Casi mil personas

   “¡Qué marco! Que la cuenten como quieran”, dijo Marcelo Pallotti, presidente de la Asociación Bahiense de Básquet, en un balance cortito y al pie de lo que fue el marco en el Dow Center. En una final que además cuenta con transmisión por streaming desde el canal de la ABB en YouTube, presentación olímpica de los equipos y, desde ayer, la posibilidad de consulta a la pantalla para los árbitros. Un lujo.

De un lado del Dow Center...

 

   La organización informó que asistieron 950 personas a un recinto que en principio no tuvo habilitada la segunda tribuna, detrás de la mesa de control. Pero muy cerca de la hora de inicio (20.45) se fue completando la franja disponible.

 

   Como siguió entrando gente, activaron el sistema mecánico para extender el otro bloque de plateas.

El debut del IRS

   A sólo 3m09s de iniciado el partido se le presentó a los árbitros la primera de las dos jugadas que marcaron el estreno del sistema de revisión instantánea de jugadas (IRS), en este caso para los árbitros Emanuel Sánchez, Sebastián Arcas y Mauro Reyes.

...Y del otro. La zona de plateas principales, a tope.

 

   La acción en cuestión fue una falta de Gastón Diomedi a Ezequiel Paz, cuando Liniers ganaba 23-19.

   “Fue buena la experiencia. En la primera hubo una falta en una situación de tiro de tres puntos. Que fue fina y por eso la revisamos, para ver si el jugador que recibió la infracción estaba en acto de lanzamiento o no”, explicó Emanuel Sánchez. Finalmente dieron los tres tiros libres correspondientes a Paz, quien hizo 3-3 (23-22).

   La otra situación se produjo a 34s de haber comenzado el último cuarto y la protagonizaron Agustín Dottori (dio un codazo) y Valentín Forestier (respondió con patada). Los vio Mauro Reyes y los sancionó.

Emanuel Sánchez (semioculto) y Sebastián Arcas verifican el monitos en una de las dos revisiones. 

 

   “El otro caso de consulta, una falta mutua, sirvió para el juego. Porque poníamos en desventaja a un equipo por una acción que era foul mutuo, no antideportiva. Por eso sirve el IRS, porque pueden surgir muchas situaciones que se verifican en favor del juego. Así de claro. Pueden suceder situaciones de final de período o de partido que se necesitan revisar para ver si estuvieron o no dentro de juego. Ayuda tanto a los jugadores como a los entrenadores”, agregó el árbitro. En esta acción Forestier se retiró definitivamente con 5 faltas.