Mensajes borrados, videollamada y un billete, clave para esclarecer el crimen
El vecino acusado y detenido tenía deudas varias y se le secuestraron dólares que eran de la víctima.
La primera sospecha que tenían los investigadores contra José María Suárez fue que habría dañado la tarjeta de memoria de la cámara en la casa de su vecina fallecida, cuando ofició de testigo del procedimiento.
Luego se estableció que el hombre -quien dio aviso al 911, en apariencia preocupado, porque no veían a Cristina Denda desde hacía dos días- tenía deudas bancarias y había recibido un aviso de corte de energía de parte de EDES.
Al ser secuestrados los teléfonos de él y su familia, durante el allanamiento de la semana pasada, se descubrió que se habían borrado las conversaciones suyas y de su mujer y su hijo con Denda, y en la papelera de su celular encontraron una foto de una publicación de compra y venta de oro.
Por otro lado, un amigo de la mujer fallecida confirmó, mediante declaración testimonial bajo juramento, que Cristina le había contado unos días antes del hecho, mediante una videollamada, que había comprado dólares y se los mostró en plena conversación a distancia.
Al realizar una captura de pantalla del teléfono del testigo, se pudo obtener el número de serie de un billete que coincidía, con uno de 10 dólares, secuestrado en lo de Suárez.
Durante ese allanamiento, a su vez, se incautaron un pantalón tipo babucha gris, un par de zapatilla Nike, una toalla de mano y una sábana con manchas hemáticas.
También un par de guantes de látex, un cuchillo carnicero de 20 centímetros de hoja de largo con mango plástico color amarillo y 1.210 dólares en efectivo, discriminados en 11 billetes de 100, 2 billetes de 50 y 1 billette de 10.