A dos años de la ley, en Bahía el aborto "es una práctica habitual"

Redacción de La Nueva.

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   A dos años de la sanción de la Ley de Interrupción Legal (ILE) y Voluntaria (IVE) del Embarazo, en Bahía Blanca existen varias vías de acceso a la prestación, que se volvió “una práctica habitual en salud”.

   La médica Selva Lamtzev, quien trabaja en el sistema municipal de unidades sanitarias, dialogó con La Nueva. y brindó un panorama de cómo se garantiza el derecho al aborto en nuestra ciudad. 

   “Las mujeres consultan en las unidades sanitarias, Hospital Penna y Hospital Municipal y cuando solicitan una interrupción de embarazo, son direccionadas a donde corresponde de acuerdo con cada situación particular”, explicó. 

   Y continuó: “Si tienen menos de 13 semanas de gestación y no tienen ninguna enfermedad, por lo general se indica tratamiento en unidades sanitarias. Si tiene más de 13 semanas de embarazo o alguna enfermedad que le impide hacer el tratamiento de forma ambulatoria, se la deriva a cualquiera de los dos hospitales”. 

   Lamtzev explicó que durante todo el proceso intervienen profesionales de distintas áreas. Es fundamental un médico que indique el tratamiento. Luego, “si requiriera un abordaje en conjunto con psicología, trabajo social, enfermería u otra disciplina se evalúa caso por caso”.

   Además, es muy importante el rol de la persona que recibe la demanda, “generalmente personal administrativo”, ya que debe orientar a la paciente en el procedimiento.

   Tanto centros de salud como unidades sanitarias se suman al Hospital Municipal y Hospital Penna para atender casos de este tipo. Su trabajo, como mencionó Lamtzev, es a modo de red.

   El Municipio tiene a disposición un listado que enumera los sitios en donde se puede acceder al aborto en Bahía: 

   El Ministerio de Salud informó en los últimos días que desde su aprobación hasta septiembre de este año, en Argentina se realizaron un total de 132.754 abortos.

   Es sabido que la interrupción del embarazo es un tema que despierta distintos posicionamientos, tanto a favor como en contra. Por eso la Ley 27.610 establece que un profesional de la salud tiene derecho a ser objetor de conciencia. 

   En esos casos, de acuerdo con la Ley (Art.10), debe “derivar de buena fe a la paciente para que sea atendida por otro u otra profesional en forma temporánea y oportuna, sin dilaciones”.

   En el primer nivel de atención bahiense existen varios profesionales que se niegan a realizar abortos. Por eso, “si la paciente consulta en una unidad sanitaria dónde el médico o médica es objetora, se la deriva a una donde sí se hace”, afirmó Lamtzev.

   “Por dar un ejemplo, en mí área (medicina familiar o ginecología) somos 5 médicas y médicos habilitados y sólo uno es objetor –precisó–. Hay áreas donde hay sólo una médica que realiza IVE y otra donde no hay nadie, pero tomamos la demanda desde otras unidades sanitarias”, explicó.

   El sistema privado funciona de manera diferente. Cada obra social trabaja de manera particular y de forma heterogénea. “Deberían garantizarlo como lo hacemos en el sistema público pero no siempre lo hacen”, manifestó.