Joaquín de la Torre: "El próximo gobernador no puede ser un puntero del presidente"
El exministro de Gobierno de María Eugenia Vidal criticó la "mirada centralista" de Axel Kicillof y dijo que hay que reconstruir un espacio opositor al Frente de Todos.
La campaña política pensando en las elecciones legislativas que se realizarán este año ya está en marcha y Joaquín de la Torre dio los primeros pasos. A primera hora, el exministro de Gobierno de María Eugenia Vidal durante el periodo 2015-2019 visitó Bahía para mantener una serie de reuniones políticas y recorrer la ciudad.
En diálogo con La Nueva dijo que "el próximo gobernador de la Provincia de Buenos Aires no debe ser un puntero del presidente ni tener una mirada porteña sobre los problemas de los bonaerenses".
De la Torre fue además intendente de San Miguel y confesó ser un hombre del justicialismo. En la actualidad junto a Miguel Ángel Pichetto y Jesús Cariglino intentan rearmar un espacio opositor al Frente de Todos.
"Se necesita rehacer una fuerza y quiero hacerlo desde el peronismo", agregó. Sin embargo no se animó a predecir quién debe liderar ese espacio porque "depende de la gente, que es la que nos saca o pone en cargos".
Durante el mediodía tuvo reuniones con referentes del gremio que nuclea a trabajadores petroleros y luego contó que se reuniría con el intendente Héctor Gay y con quien calificó como "su amigo", el diputado Santiago Nardelli.
"Tengo vocación y ganas de escuchar a las fuerzas productivas y del trabajo para conocer las realidades. Antes de tomar decisiones y exponerse a una candidatura hay que escuchar, porque a la Argentina no le ha ido bien con la lógica de creer que conocemos lo que ocurre en un territorio tan amplio como el bonaerense", dijo.
"Hace unas horas me reuní con María Eugenia Vidal y ella me decía que antes de tomar decisiones o postularnos para algún cargo tengamos en claro para qué lo vamos a hacer y cómo le vamos a resolver los problemas a la gente", agregó.
"De todas formas tengo muy en claro que el próximo gobernador bonaerense no debe ser un puntero político del presidente ni tener una mirada centralista como la que tiene un porteño. Estoy convencido de que es algo que no tenemos que aceptar nunca más ", afirmó.
Por último aseguró que por la pandemia resulta injusto criticar la gestión de Kicillof --aunque cuestionó la cuarentena dura que se aplicó a muchos pueblos que no tenían casos de coronavirus--y opinó que anular las PASO en un año electoral le suena más a "ventajita" que a verdadera voluntad de cambio del sistema electoral.
"Cuando un político intenta sacar ventaja es porque no le da el cuero y no quiere exponerse para que la gente le diga que no", opinó.