Justicia: elogios y críticas a la licencia por casos de género
La medida de la Suprema Corte abarca a empleadas del Poder Judicial bonaerense, incluido el de nuestra ciudad.
Si bien los miembros de la seccional local de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) ven con buenos ojos la implementación de la licencia específica para víctimas de violencia de género en el Poder Judicial, tienen reparos sobre algunos aspectos de la medida.
Claudia Barrio, encargada del área de Género de la AJB de Bahía, calificó como una “gran conquista” para el sindicato el acuerdo de la Suprema Corte, vigente desde el 28 de agosto.
La gremialista considera indispensable este beneficio para mujeres y otras personas de “diversidad y disidencias sexuales” damnificadas por la problemática en cuestión.
Sin embargo, se mostró disconforme porque -según ella- “no se tuvo en cuenta al gremio para la elaboración de la acordada”, teniendo en cuenta que “justamente la entidad representa a los afiliados garantes de este derecho”.
“Ya a fines de 2016 nuestro sindicato había presentado el proyecto de licencia laboral por violencia de género en la Corte y estuvo encajonado todos estos años”, destacó.
“Antes era riesgoso porque la víctima de violencia de género debía tomar licencia inespecífica, por psiquiatría u otras causales, pero ahora se logró que la licencia sea específica”, agregó.
La dirigente opinó que el objetivo es “visibilizar la problemática” y amparar a quien la padece no solo desde lo físico y lo mental sino también en lo que atañe a la carrera laboral.
Hasta ahora no se pidieron licencias por casos de violencia de género contra empleadas del Poder Judicial y en el caso departamental tampoco hay registros de trabajadoras afectadas por violencia de género licenciadas con anterioridad a esta decisión.
Alcances del acuerdo
El acuerdo 3.949 se funda en criterios de “no discriminación e igualdad” y promueve impulsar “implicaciones positivas” para que la víctima recupere su proyecto de vida laboral.
Se prevé una licencia con goce de haberes de hasta 30 días (continua o alternada) por año calendario, que podrá prorrogarse por hasta igual término según la gravedad del caso.
Barrio cuestionó también la forma de aplicación de la licencia por entender que los episodios de “violencia de género no se pueden generalizar”.
“Cada caso es específico y esta problemática es propia de la persona que la atraviesa, con características diferentes, y por eso no se puede englobar todo bajo un mismo criterio”.
Además expresó su desacuerdo por no haberse creado un área de Políticas de Género en la Corte provincial, que trabaje de manera multidisciplinaria.
“Ni Sanidad ni la Oficina de Resolución de Conflictos están especializadas en la materia”, opinó.
“La licencia entrará en vigencia a partir de la fecha en que se solicite, debiéndose presentar una certificación emitida por alguno de los organismos con competencia en la materia, o cualquier otro elemento probatorio que permita acreditar la situación planteada dentro de los 5 días hábiles posteriores”, establece la resolución.
La acordada contempla además que las personas afectadas puedan solicitar su “traslado por razones de seguridad” para preservar su “integridad personal o familiar”.
Acciones del gremio en esta lucha
El sindicato echó a dos gremialistas por casos de violencia de género.
Uno era secretario general de la departamental Azul y fue acusado de abuso sexual a una mujer discapacitada y el otro de Tres Arroyos, por violencia de género a una empleada del gremio.
Los dos están siendo juzgados, dijo Barrio.
La AJB también denunció al juez de Garantías de Tres Arroyos Rafael Oleaga, quien está siendo sometido a juicio político por violencia laboral.
También lo hizo con el juez de Familia de Azul Claudio García, actualmente suspendido por acoso sexual y violencia laboral contra una empleada.
La gremialista local, por otra parte, confirmó que en el ámbito bahiense no tienen casos “de violencia de género por fuera del Poder Judicial -es decir de índole familiar- y que esa situación haya perjudicado su desempeño laboral”.
La AJB local, según dijo Barrio, también viene reclamando por la desigualdad entre mujeres y hombres en los cargos jerárquicos judiciales.
“Tenemos mujeres defensoras y juezas, pero en otros niveles, como jueces de Corte, no hay representación femenina", finalizó la entrevistada.