Soledad con La Nueva: “Ya no puedo ser aquella nena, porque no puedo parar el reloj”
"La Sole" confesó que mientras tenga ganas y juventud, seguirá explorando nuevas músicas sin perder la identidad.
Franco Pignol / [email protected]
Tiene 38 años y hace poco participó de una charla con instagramers. Su idea era entender un poco ese mundo, pero a su vez compartir música e historias.
“Hablamos sobre Atahualpa Yupanqui y sobre Larralde. Yo les decía que sentía que los chicos que hoy hacen trap, rap o hip hop y que intentan decir algo, de alguna manera se parecen a aquellos paisanos de otros tiempos que también querían decir cosas similares, pero con otro lenguaje”, detalló Soledad.
Muchos la embalsamaron revoleando el poncho mientras sonaban chacareras, pero ella, con paciencia, siempre fue haciendo pequeños cambios en su carrera hasta llegar a lo que es hoy. Eso, sin perder la escencia.
Mientras prepara la gira por Argentina, anuncia su fecha en Bahía Blanca (viernes 30 de agosto en el Teatro Don Bosco). Ya podés adquirir tu entrada cómodamente desde tu casa a través de Ticketbahia.com
“Será un show de cerca, con canciones clásicas y con canciones nuevas. Tengo ganas de estar más cerca de la gente y de proponerles temas nuevos. Quiero ver cuál es la reacción y si me aprueban una vez más. La idea es que el público participe del espectáculo. Nunca me olvido del cariño que siempre me dan los bahienses”, cuenta.
Otros códigos
—¿Cuál es la atmósfera que se va a respirar en lo nuevo de “La Sole”?
—Una vez que cerré la etapa del disco por los 20 años de carrera comencé con otra búsqueda. Como artista creo que todavía tengo mucho por recorrer y crecer. Mi gran desafío es seguir explorando sin perder la escenia, sin irme de Argentina y de la música que me caracteriza. Tengo una raíz folklórica que se aggiorna a estos tiempos. Hoy se habla de otra manera y hay otros códigos.
—¿A qué te referís puntualmente?
—Creo que hay cuestiones que son las mismas que hace muchos años atrás pero se hablan de otra manera, tienen otros nombres. Yo quisiera ser la conexión entre aquello y esto. No sé si lo voy a lograr, pero esa es la idea. Estoy intentándolo. Para eso necesito plantearme estrategias.
Hoy tengo 38 años y creo que la maduración fue y es necesaria. Si yo me hubiese quedado con lo que hacía en 1996 la verdad que estaría en problemas. Hay gente que es mucho más nostálgica y sigue eligiendo a esa nena".
—¿Cómo te fue en las giras que hiciste por Europa y por Estados Unidos? Ver la publicidad de Soledad en Irlanda o en Inglaterra es por demás curioso.
—(ja ja ja), sí puede ser. Por suerte nos fue re bien. En Madrid hicimos una función para más de 1.000 personas en un teatro de Gran Vía. Para mi fue una revelación porque es un trabajo que venimos haciendo desde hace años, de tanto ir, apostar y correr el riesgo. Todas las carreras artísticas son así, uno propone y luego tiene que salir para acercarlo a la gente. En cuanto al público creo que es muy parecido porque los sentimientos y las sensaciones son las mismas. A veces el idioma o las formas de decir las cosas pueden variar, pero hay manera de conectarse igual.
Con Carlos Vives hicimos juntos el tema `La gringa`. Me sigo sorprendiendo con tipos como él. Cuando voy a grabar a Bogotá es el primero que llega al estudio, viene en bicicleta y me espera con el mate".
—En Estados Unidos realizaste muchísimas presentaciones.
—Sí, estuvo muy bueno. Fue un mes entero en el que hicimos 15 ciudades en 20 días y dos teatros.
—Me imagino que aprovechás el público latino que hay en esos países.
—Sí por supuesto. La mayoría son latinos que viven en esas ciudades y quieren estar cerca de su tierra al menos por un ratito. Después está el púbico latinoamericano que tiene la necesidad de acercarse a ritmos y músicas más afines. Mi idea es llegarle a todos, de a poquito y con mucha paciencia.
—Es muy interesante ver el desarrollo de tu carrera desde que irrumpiste en Cosquín revoleando el poncho hasta ahora. Siempre que viniste a Bahía fuimos notando madurez artística y cambios pequeños pero constantes, lo que después de 20 años genera una Sole distinta.
—Hoy tengo 38 años y creo que la maduración fue y es necesaria. Si yo me hubiese quedado con lo que hacía en 1996 la verdad que estaría en problemas. Al menos es lo que yo pienso. Hay gente que es mucho más nostálgica y sigue eligiendo a esa nena. Pero ya no puedo ser aquella nena, porque no puedo parar el reloj.
—Está bueno que lo aclares. Para mucha gente no está bueno, para otras es un mérito.
—Para mi es un mérito, con todas las dificultades que pudo haber tenido. Cuando una carrera comienza a tan corta edad y como un gran fenómeno, lo más difícil que tenés es sostenerte. Esa es la gran dificultad. Te diría que es más complicado eso que haber llegado a ser conocida. Hay cosas que uno puede manejar y otras que no. El trabajo y seguir intentándolo son oportunidades que se da uno mismo, no dependen de otros factores.
—¿Cómo está el folklore hoy y qué lugar ocupa en tus proyectos?
—El folklore tiene una fuente inagotable de canciones y no se va a morir, va a estar siempre ahí. Yo me voy a encargar de mantenerla siempre vivo porque me encanta eso. Sé que siempre puedo volver a esa fuente, a cualquier edad. En cambio la energía y la capacidad de aprender y de absorver no sé si se da con igual intensidad toda la vida.
Cantó con “La India” y grabó con Carlos Vives
Entre todas las anécdotas que cosechó durante la gira por Europa y luego por Estados Unidos, la cantante recordó una especial en Madrid. "Tuve el orgullo de que me vaya a ver India Martínez y Rosalén, dos artistas españolas que admiro mucho. La India se animó a cantar conmigo una canción y fue muy lindo ese mimo", aclaró Soledad Pastorutti.
"Eso tuvo hermosas consecuencias porque ahora en septiembre vuelvo a España como invitada de Vanesa Martín, a un espectáculo maravilloso de mujeres", dijo Pastorutti.
"Con Carlos Vives hicimos juntos el tema `La gringa`. Me sigo sorprendiendo con tipos como él. Cuando voy a grabar a Bogotá es el primero que llega al estudio, viene en bicicleta y me espera con el mate. Le pone una energía y unas ganas increíbles. Después de todo lo que logró, sigue con más pilas que nunca. Es un ejemplo lindo a imitar", contó la santafecina Soledad Pastorutti.