El acusado por el crimen de Facundo Manzur deberá aguardar el juicio detenido
La Cámara Penal confirmó la prisión preventiva de Maximiliano Bordenave
Un joven acusado de asesinar a Facundo Manzur (18) de una puñalada a principios de año en Pedro Luro deberá permanecer detenido hasta el juicio, ya que la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal confirmó su prisión preventiva.
La Sala II del cuerpo, con el voto de los jueces Guillermo Petersen, Alfredo Hernán Mones Ruiz y Guillermo Emir Rodríguez, no hizo lugar a la presentación del abogado Maximiliano De Mira y ratificó lo resuelto por la jueza de Garantías Nº 4, Marisa Promé.
En su apelación, el defensor sostuvo que Maximiliano Bordenave actuó en legítima defensa, ya que habría sido atacado con un palo por la víctima.
El hecho se produjo el pasado 6 de enero, en el patio de una casa del barrio 11 de Septiembre.
Bordenave se encontraba junto al primo y el tío del chico asesinado, cuando éste último llegó al lugar (acompañado por un amigo) y se produjo una discusión entre ambos.
Los testigos indicaron que el imputado tenía el cuchillo en la cintura y le asestó la puñalada que provocó su muerte.
También sostuvieron que Manzur tomó un palo que había en el lugar para defenderse, lo que se contrapone con lo declarado por el procesado, quien dijo que fue agredido por el chico fallecido.
El procesado agregó que estaban tomando tereré y que el cuchillo estaba sobre la mesa, ya que lo utilizaban para picar hielo que había en una botella.
Manzur recibió una herida en la zona del corazón, la que provocó su deceso.
Respecto de la alegada legítima defensa, los camaristas sostuvieron que a partir de los elementos que se encuentran incorporados a la causa, "no se encontraría acreditada, al menos en este estadio, desde que no concurrirían en el caso las circunstancias legalmente previstas para que ello proceda de tal forma".
Señalaron que los testimonios de la causa "darían cuenta que entre la víctima y el acusado se habría generado un acometimiento recíproco, en el que ambos habrían participado voluntaria y activamente, por lo que no puede predicarse la concurrencia de un obrar justificado".
Explicaron que la legítima defensa es una reacción necesaria contra una agresión injusta, actual o inminente y no provocada suficientemente, lo que no ocurre cuando nos encontramos frente a un acometimiento recíproco".
Por todo ello, los jueces ratificaron la detención de Bordenave hasta el momento en que el caso se analice en un debate oral.