¿Podrá Gustavo Gallego ganarle la pulseada al Dakar?
El piloto bahiense afrontará su tercera edición consecutiva, con una clara misión: "La idea es llegar", contó.
Por Tomás Arribas / [email protected]
(Nota publicada en la edición impresa de hoy)
El destino lo sitúa nuevamente ante la posibilidad de concretar el anhelo mayúsculo de su carrera deportiva.
¿Será la tercera la vencida para Gustavo Gallego? Nuevamente, y por tercera vez consecutiva, el piloto bahiense de cuatriciclos tendrá el privilegio, desde el próximo 6 de enero, de ser partícipe de la competencia motor más exigente del mundo: el Rally Dakar 2019.
El objetivo de Gallego es claro: “La idea es llegar y cumplir ese objetivo. Si se da, ahí recién podremos hacer otro balance y pensar en otras cosas. Pero lo primero es sacarse la espina clavada de no haber podido llegar".
Tamaña aspiración representa cruzar la línea de llegada, considerando el desafío supremo que proponen cada uno de los terrenos de la competencia, esta vez con sede exclusiva en Perú (ver aparte).
Pero no todo se circunscribe al resultado. Al momento de comenzar a acelerar en Lima, punto de partida de la edición N°41 de la prueba, Gallego tendrá otra incógnita por develar: su estado físico.
“Tuve que afrontar un período de rehabilitación de varios meses, para asegurar el 100% de recuperación de la lesión. Eso llevó un poco más de tiempo de lo esperado, así que no hubo tiempo de competir durante el año”, aclaró Gallego.
“En la operación—agregó--,me colocaron una placa de titanio con tornillos. La idea era sacármela este año, pero como no me aseguraron una recuperación total para el Dakar, dadas las características de la herida y demás, decidieron dejármela y ver qué pasa. Si me molesta, el año que viene se sacará”.
Postal de la edición 2017, cuando aún Gallego daba batalla entre los 10 primeros. Lamentablemente, no pudo terminar.
—¿Cómo fue la rehabilitación y la preparación?
—Se entrenó mucho y muy intenso, tanto en lo físico como arriba del quad. Me exigí mucho en el gimnasio, haciendo diversas actividades físicas y la verdad que no tuve ningún problema. Lo que sí, la realidad es que no tuve el roce de carrera, eso también incide muchísimo; llego sin rodaje, por no haber competido durante todo el año.
—¿En qué momento te sentiste pleno nuevamente?
—Para agosto, más o menos, ya me sentía bien recuperado. Probablemente, desde antes ya estaba recuperado, pero no en la forma física que requiere esta competencia. Para andar al ritmo que uno estaba acostumbrado, necesitaba un poco más.
“Los campeonatos sufrieron variaciones y reducciones en la cantidad de fechas. Eso también nos afecto, así que que no tuve el roce de la carrera tan necesario para afrontar el Dakar como hubiese querido; llego sin rodaje por no haber competido durante todo el año", añadió.
—¿Se entrenó lo suficiente?
—Sí, entrenamos en terrenos parecidos a lo que será la carrera. Giramos en el sur, en Monte Hermoso, en Sierra de la Ventana y en el norte del país. La edición que viene será un escenario muy particular, ya que si bien será más corto, el terreno tiene casi 80% de arena.
"La arena me gusta mucho. Habrá bastante trabajo con la navegación, en lo que también se entrenó. Seguramente salga algo bueno".
Reestructuración "Hicimos varios cambios mecánicos"
El equipo "Gustavo Gallego Competición", encabezado mecánicamente por el uruguayo Agustín Bonilla y el preparador local José Castellano, no dejó detalle librado al azar.
Es que si bien fue una lesión física lo que le privó a Gallego completar el recorrido total en la pasada edición, previo al infortunio, se suscitaron algunos problemas mecánicos de grueso calibre que, en una carrera de semejante exigencia, se pagan caros.
En tal sentido, el grupo de trabajo que acompaña al campeón argentino 2017 de Cross Country, efectuó considerables cambios en la estructura que se alineará el 6 de enero en Lima.
"Disponemos de un nuevo cuatriciclo (Yamaha Raptor 700cc), al cual se le hicieron unos cuantos cambios en la estructura. También modificamos el sistema eléctrico y el motor", contó Gallego.
"También nos enfocamos en trabajar en la amortiguación, no porque sea defectuosa, sino porque el trazado exige una configuración distinta a la edición anterior. Además, desde ahora, el motorista será José Castellano. En tanto, los mecánicos siguen siendo los mismos que me acompañan desde hace dos años", agregó.
"A medida que la carrera avance, y de acuerdo a cómo nos encontremos, veremos a qué le apuntaremos. Pero no hay que perder de vista que la misión es llegar", recordó.
Renovación: Perú, anfitrión exclusivo
-Reducida. Por primera vez desde que desembarcó en latinoamérica, la prueba se desarrollará únicamente en un país. La competencia se iniciará el 6 de enero y culminará el 17 del mismo mes, en Lima (Perú).
-Descanso. La prueba, que contendrá 4 etapas menos que la edición pasada, tendrá un intérvalo el 12 de enero, el habitual día de descanso.