A los 84 años, falleció el propietario de La Serenísima
El empresario Pascual Mastellone, propietario de La Serenísima, falleció ayer a los 84 años de edad, tras varias internaciones.
Mastellone nació el 7 de agosto de 1930, en 1952 asumió las riendas de la compañía creada por su padre y el año pasado pidió licencia por su delicado estado de salud.
El empresario llevó a la compañía láctea a ser una de las principales de América del Sur.
Mastellone guardaba un bajo perfil.
En 2010, cuando cumplió 80 años, lo festejó con una gran fiesta para 4.400 personas, en la que no hubo figuras de la política ni del espectáculo y ni siquiera del empresariado, pero sí obreros, administrativos, tamberos y transportistas.
"Prefiero celebrar con mi gente", manifestó el hombre que con tan sólo 21 años y tras el fallecimiento de su padre se había hecho cargo de una pequeña empresa que fabricaba tan sólo ricotta y mozzarella y la convirtió en un gigante de la industria láctea.
Durante este año y en medio de las turbulencias de la economía interna, La Serenísima logró refinanciar a 6 años sus vencimientos de deuda, que comenzaban el año que viene y fondearse a una tasa barata dentro del actual contexto.
Mastellone consiguió 200 millones de dólares, se convirtió en la segunda compañía en lograr una colocación internacional en el año, detrás de la nacionalizada YPF y logró salir airosa en el proceso de canje y recompra de acciones que lanzó a mediados de junio. (NA)