Bahía Blanca | Miércoles, 16 de julio

Bahía Blanca | Miércoles, 16 de julio

Bahía Blanca | Miércoles, 16 de julio

Pasión entre la naturaleza y el detalle

En Enzo Frattini no se sabe qué nació primero: si su pasión por los pinceles o por la naturaleza. Algo es seguro: ambas son su aliento vital. El pintor hiperrealista, que se enamoró hace algunos años de la Comarca Serrana, ubica en la exuberancia de la flora y fauna de su Santa Fe natal el origen del espíritu explorador que le proporciona materia prima para sus obras.

 En Enzo Frattini no se sabe qué nació primero: si su pasión por los pinceles o por la naturaleza. Algo es seguro: ambas son su aliento vital.


 El pintor hiperrealista, que se enamoró hace algunos años de la Comarca Serrana, ubica en la exuberancia de la flora y fauna de su Santa Fe natal el origen del espíritu explorador que le proporciona materia prima para sus obras.


 Investigó las características y hábitos de pájaros carpinteros, calandrias, golondrinas, loros, monjitas blancas y demás voladores y corredores de la región y los retrató con un perfeccionismo no apto para impacientes.


 En su afán de conocerlos mejor se internó --en los últimos cuarenta años-- en territorios rebosantes de naturaleza, donde atravesó experiencias extremas como la que lo llevó a ser víctima de la mordedura de una serpiente yarará, que casi le cuesta la vida.


 Dice haber pasado noches envuelto en lonas de nylon, en frondosos paisajes, a la espera de que los lechuzones aparecieran en el nido, entre otras anécdotas.


 De estas incursiones nació la mayoría de sus cuadros. Para crearlos se vale de la técnica que perfeccionó junto al artista argentino Axel Amuchástegui --referente nacional por excelencia del hiperrealismo.


 --¿Por qué eligió convertirse en animalista?


 --Esto viene del alma, de amar a la naturaleza, de defenderla, de pelear por ella. Es mi misión: preservar en papel o como sea, pintado o en libros, lo que queda de la naturaleza.


 --¿Cómo hace para pintar cuadros en que los animales parecen tan reales?


 --Perfeccioné mi técnica con el mejor animalista del mundo: Axel Amuchástegui. Era extraordinario. Hay mucha gente que pinta animales, pero él era espectacular.


 --¿Cómo lo conoció?


 --Por un amigo en común. Para mí era fundamental que viera mi obra. Me dijo: "Yo no enseño, pero hagamos una cosa, venite con dos o tres cuadros una vez por semana, tomamos un té y nos sentamos a discutirlos".


 --¿Fueron muchos encuentros?


 --No, no tanto. Un día me dijo: "Andá, ya está. Pero andáte al extranjero; no te quedes acá". Y yo no le hice caso.


 Frattini pinta sobre papel importado o tela. Muchos extranjeros cruzaron el continente con sus cuadros bajo el brazo y varios estancieros lo contratan a menudo para que retrate a sus animales de raza premiados en las exposiciones rurales.


 Apenas el primer rayo de sol entra por la ventana de su estudio, él comienza a crear y, tras un paréntesis para almorzar, sigue trabajando hasta el crepúsculo o hasta la madrugada, entre acrílicos, acuarelas y pigmentos.


 --¿Cuándo empezó a dibujar y a pintar?


 --¡Uh! ¡Nací con un pincel debajo del brazo! Yo soy autodidacta. Nací en Maciel, pero tenía un tío que vivía en la Escuela Superior de Bellas Artes, en Rosario, y pasaba mis vacaciones allá o iba de visita. Me fascinaba. De grande tomé un curso muy completo de perspectiva aunque pensaba estudiar Medicina.


 --¿Y qué lo hizo cambiar de idea?


 --El arte. Para mí; el arte, el arte, el arte. No había manera.


 --¿Cuántas obras realiza por año?


 --Ni idea. Yo pinto. Y muy rápido. Y es pintura detallista. Es técnica, una vez que la incorporaste, ni siquiera necesitás recurrir a una foto. Siempre les digo a los chicos que no copien, que estudien. Si lo tienen en la cabeza, fluye.

Alrededor del mundo en busca de inspiración






 Desde 1970, se desempeñó en la Capital Federal como ilustrador, director de arte editorial y publicitario y editor de publicaciones.


 También desarrolló comerciales televisivos en el rubro Ganadería y películas de animación 3D. Pese a su agitado ritmo capitalino, jamás abandonó la pintura de animales.


 --¿Cómo hacía con todo?


 --Llegaba el viernes a la tarde, agarraba mi auto y me iba a Santa Fe o a otro lado. Estaba acostumbrado al Delta del Paraná, donde a la noche hacía el fogón, miraba las estrellas, escuchaba a las lechuzas y a los pájaros nocturnos. Investigué aves y todo tipo de animales. Se me ocurría, por ejemplo, Misiones y allá iba, a investigar.


 --¿Ha viajado mucho?


 --De Argentina conozco casi todo, desde el norte hasta Ushuaia. También el sur de Chile, en Punta Arenas y sur de Brasil y Paraguay. Los sitios que más me alucinaron fueron Costa Rica, sur de Nicaragua y norte de Panamá.


 Pasó 11 años intercalando estadías entre Buenos Aires y la zona de la laguna Las Encadenadas, donde documentó exhaustivamente cada uno de sus avistamientos de animales. Luego, decidió construir su casa en Saldungaray.


 --Elegí este tiempo para limpiar mi cabeza de todo lo cibernético y electrónico y concentrarme en la naturaleza de nuevo y sentir este gustito.


 --¿Por qué Saldungaray?


 --Es lo más parecido adonde yo me crié en Santa Fe, a mis padres, a mis abuelos.


Cuestiones personales

* Enzo Frattini nació en 1949, en Maciel (Santa Fe), cerca de Puerto Gaboto, primera fundación de Sudamérica, donde estaba el fuerte Sancti Spíritu.
* De padre cazador, pescador y restaurador y su abuelo, maquetista de muebles y fotógrafo amateur.
* En Buenos Aires trabajó en el Estudio Cartográfico Argentino y recaló en Fotocom, empresa de la editorial Perfil, en los 70, donde creció como diseñador gráfico.
* También ilustró para la revista Weekend y fue jefe de Arte en diversas publicaciones.
* Comparte su vida con Graciela, su pareja desde hace 24 años y quien lo acompañó en gran parte de sus aventuras.
* Expuso en la Manzana de las Luces, en el Fondo Nacional de las Artes, en el Centro Cultural San Martín, en el Centro Cultural Recoleta y en la Reserva Ecológica Costanera Sur, entre otras salas. En el año 2000 publicó el libro Naturaleza Arte y Relato de la Comarca Turística de Sierra de la Ventana.
* En la actualidad, tiene un puesto en la feria de artesanos en Sierra de la Ventana.
* Una de las obras de su maestro, Axel Amuchástegui, un águila cabeza blanca americana, fue adquirida en una exposición en el extranjero para ser obsequiada a la Casa Blanca, en Washington y allí se encuentra desde la presidencia de Richard Nixon.