Bahía Blanca | Miércoles, 16 de julio

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"No me da miedo mirar la tabla de promedios"

"¿Sabés lo bien que nos viene la llegada de este jugador? Se adapta a cualquier posición del medio, está diez puntos físicamente, ya firmó el contrato y automáticamente quedó habilitado para jugar". Después de tanto buscar, parece que Héctor Rivoira encontró el refuerzo que necesitaba. Por eso, es muy factible que Maximiliano Gustavo Laso, la segunda incorporación de Olimpo para el torneo Clausura que está por empezar, sea parte del plantel que el próximo viernes visite la Bombonera para enfrentar a Boca.

 "¿Sabés lo bien que nos viene la llegada de este jugador? Se adapta a cualquier posición del medio, está diez puntos físicamente, ya firmó el contrato y automáticamente quedó habilitado para jugar".


 Después de tanto buscar, parece que Héctor Rivoira encontró el refuerzo que necesitaba. Por eso, es muy factible que Maximiliano Gustavo Laso, la segunda incorporación de Olimpo para el torneo Clausura que está por empezar, sea parte del plantel que el próximo viernes visite la Bombonera para enfrentar a Boca.


 Maxi, rubio, no muy alto, pero con una pinta envidiable de jugador habilidoso, llegó en la madrugada de ayer, descansó muy poco, entrenó, se reunió con el Chulo y, cuando dejó el estadio Roberto Carminatti --ya sobre el mediodía--, se sorprendió con el "mundo Olimpo".


 "¿Todos estos periodistas me están esperando a mi? Olimpo es un lindo club; muy grande, con buenas instalaciones. Además, la gente pregunta mucho por el equipo, y se nota que lo siguen", fue la primera impresión del volante capitalino, cargado con ropa de Olimpo y con un bolso enorme en uno de sus hombros.


 --¿Hacía tiempo que estabas en tratativas con Olimpo, o se dio todo en esta semana?


 --Me llamaron el fin de semana y cerramos trato el lunes que pasó. Lo primero que le exigí a Olimpo y a mi representante (Gabriel Converse) es que se hable en firme y que se haga todo rápido porque tenía muchas ganas de jugar y de sentirme identificado con un club.


 "La decisión final la tomé yo. Es un desafío, pero percibí que el ánimo es muy distinto al de un equipo comprometido con el promedio. Hay plantel y muy buen cuerpo técnico como para confiar en una campaña que nos permita zafar del descenso y de la Promoción".


 --¿Te querías ir de Banfield?


 --Un poco sí. No me iba a molestar quedarme, pero quería cambiar de aire porque en Banfield se habían empezado a dar situaciones que no eran claras.


 "Quiero jugar y tener continuidad. Olimpo mostró interés por mi, se preocuparon en llamarme y en reunirse con las personas que manejan mi pase, y todo eso me motivó a tomar la decisión de venir".


 --¿Estás listo para saltar a la cancha si Rivoira te necesita?


 --Estoy 10 puntos físicamente, para jugar los 90 minutos. Sólo me falta entrar en sintonía futbolística con mis compañeros.


 --¿Cómo te imaginás el partido ante Boca?


 --Me imagino el final: Olimpo festejando y la Bombonera enmudecida.


 --¡Qué imaginación!


 --Sería bueno jugar, meter un gol y traernos tres puntos de oro. ¿Estoy soñando mucho, no? Me ilusiono con poder estar en la lista que Rivoira haga para ese encuentro.


 --Apenas cumpliste con un entrenamiento, pero, ¿qué percibiste del grupo a simple vista?


 --Es muy unido. Me cambié en un vestuario feliz y no existen los pesimistas.


 "Además, están entusiasmados con un triunfo ante Boca. Y lo veo más que bien. Boca es el campeón, pero no el Cuco. Contra Santamarina, por la Copa Argentina, quedó demostrado que el fútbol está muy parejo y que no existen los equipos invencibles ni superpoderosos".

Sergio Daniel Peyssé/"La Nueva Provincia"