HEPATITIS "C"
¿Qué debemos saber?
Podemos abrazar, besar o compartir un mate con otra persona, sin que esto signifique que nos pueda transmitir la enfermedad. Sí, en cambio, deberían tomarse otros recaudos para evitar que nos afecte. Respuestas simples a preguntas básicas, por parte de la hepatóloga Lucrecia Rezzónico, que nos permitirán estar mucho más ilustrados.
1
¿Qué es la hepatitis?
"Hepatitis" significa inflamación del hígado.
El hígado es un órgano vital que procesa los nutrientes, filtra la sangre y combate infecciones. Cuando está inflamado o dañado, su función puede verse afectada.
En la mayoría de los casos, la hepatitis es provocada por un virus.
En Argentina, los tipos más comunes de hepatitis viral son hepatitis A, hepatitis B y hepatitis C.
El consumo excesivo de alcohol, las toxinas, algunos medicamentos y determinadas afecciones médicas también pueden causar hepatitis.
2
¿Qué es la hepatitis C?
La hepatitis C es una enfermedad del hígado que resulta de la infección por el virus de la hepatitis C.
Cuando una persona se infecta, puede desarrollar una infección "aguda", que puede variar en gravedad de una enfermedad muy leve, con pocos o ningún síntoma, a una afección grave que requiere hospitalización.
La hepatitis C aguda es una enfermedad de corto plazo, que ocurre dentro de los primeros seis meses después de que la persona se expone al virus de la hepatitis C.
Por razones que se desconocen, entre el 15 y el 25 por ciento de las personas "eliminan" el virus sin tratamiento.
Aproximadamente, del 75 al 85 por ciento de las personas que se infectan por el virus de la hepatitis C desarrollan una infección "crónica" o de por vida.
La hepatitis C crónica es una enfermedad de largo plazo, que ocurre cuando el virus de la hepatitis C permanece en el cuerpo de la persona más allá de 6 meses.
Con el tiempo, en algunas personas (no todas) se puede desarrollar cirrosis y otras complicaciones.
3
¿Cómo se contagia la hepatitis C?
La hepatitis C, generalmente, se contagia cuando la sangre de una persona infectada por el virus de la hepatitis C entra en el cuerpo de alguien que no está infectado.
Antes de que se comenzara a extender el uso de pruebas de detección en los bancos de sangre, en 1992, la hepatitis C se contagiaba comúnmente a través de transfusiones de sangre y trasplantes de órganos.
Aunque han sido poco comunes, se han dado brotes de hepatitis C a causa de contaminación de la sangre en entornos médicos.
El virus no se contagia por contacto de persona a persona.
Por lo tanto, no se contagia por abrazar, besar, compartir un mate, toser o estornudar.
Se recomienda no compartir máquinas de afeitar y cepillos de dientes.
4
¿Se puede contagiar la hepatitis C a través de las relaciones sexuales?
La respuesta es que sí, aunque esto sucede con muy baja frecuencia.
La Asociación Argentina para el Estudio de Enfermedades Hepáticas (AAEEH) en sus guías de hepatitis C establece que la recomendación es la de informar el bajo riesgo de transmisión, no aconsejándose, específicamente, el uso de preservativo.
5
¿Cuáles son los síntomas de la hepatitis C?
Muchas personas con hepatitis C no tienen síntomas y no saben que están infectadas.
Aunque una persona no tenga síntomas, el virus igual puede ser detectado en su sangre.
Si se presentan síntomas con una infección aguda, estos pueden aparecer en un plazo de dos semanas a seis meses después de la exposición.
Los síntomas de la hepatitis C crónica pueden tardar hasta 30 años en desarrollarse.
El daño al hígado puede ocurrir de manera silenciosa durante este tiempo.
Cuando los síntomas aparecen, con frecuencia son un signo de enfermedad avanzada del hígado.
Los síntomas tanto de la hepatitis C aguda como de la crónica pueden incluir fiebre, cansancio, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, coloración amarillenta de los ojos, orina oscura, materia fecal color claro y dolor en las articulaciones.
6
¿Cómo se diagnostica la hepatitis C?
Los médicos pueden diagnosticar la hepatitis C mediante análisis de sangre específicos, que no son parte de los estudios de rutina.
Por lo general, la persona es sometida primero a una prueba de detección que busca "anticuerpos" contra el virus de la hepatitis C.
Los anticuerpos son sustancias que se liberan en el flujo sanguíneo cuando una persona se infecta.
Los anticuerpos permanecen en el flujo sanguíneo, incluso si la persona elimina el virus.
Si la prueba de detección resulta positiva para anticuerpos contra la hepatitis C, se deben hacer diferentes análisis de sangre, para determinar si la infección ha sido eliminada o se ha convertido en una infección crónica.
7
¿Cuántos clases de hepatitis C pueden existir?
Se utiliza mundialmente la Clasificación de Simmonds, que divide al virus de la hepatitis C en seis genotipos diferentes.
En la Argentina circulan los genotipos 1 a 4, siendo el 5 y el 6 muy poco frecuentes.
Su determinación tiene aplicación clínica, fundamentalmente, en pacientes que serán sometidos a terapia antiviral, ya que es un factor predictivo de respuesta al tratamiento y define parámetros del mismo.
Los pacientes con genotipos 1 y 4 en el contexto de una hepatitis crónica son tratados por un año, mientras que los genotipos 2 y 3, son tratados por seis meses.
8
¿Cómo se trata la hepatitis C?
Debido a que la hepatitis C aguda rara vez provoca síntomas, con frecuencia no es diagnosticada y, por lo tanto, tampoco es tratada.
Cuando es diagnosticada, los médicos recomiendan descanso, una nutrición adecuada y abundante ingesta de agua.
Esta forma de la hepatitis puede curarse sola.
Si la infección no resuelve en un período de 2 a 3 meses, luego del contagio, se indica un tratamiento antiviral que tiene éxito en el 95 por ciento de los casos, produciéndose la curación de la infección.
Las personas con hepatitis C crónica deben ser monitoreadas con regularidad, en busca de signos de enfermedad del hígado.
Aunque una persona no tenga síntomas o no se sienta enferma, el hígado igual podría resultar dañado.
Los medicamentos antivirales pueden utilizarse para tratar a algunas personas con hepatitis C crónica, pero no todos necesitan o pueden beneficiarse del tratamiento.
Para muchos, el tratamiento puede tener éxito y el resultado es que ya no se detecte el virus.
9
¿Cuál es el grado de prevalencia de la hepatitis C en la Argentina.
Oscila en el 2 por ciento. Es mayor en personas mayores de 65 años por los antecedentes de haber estado expuestos a elementos no estériles y transfusiones de sangre infectadas.
Producción: David Roldán
(en numeros grandes)
2
por ciento es la prevalencia de hepatitis C en la Argentina.
15-25
por ciento de las personas "eliminan" el virus sin tratamiento
75-85
por ciento de las personas que se infectan por el virus de la hepatitis C desarrollan una infección "crónica" o de por vida.
95
por ciento de los tratamientos antivirales tienen éxito, produciéndose la curación de la infección.