Se acordó de ganar

Redacción de La Nueva.

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 Tras 10 salidas sin conocer la victoria, Olimpo recuperó anoche la memoria ante Banfield, al que derrotó 1-0 en un juego que dominó desde lo estratégico, pero que terminó sufriendo por su falta de contundencia en ofensiva y por el adelanto masivo de su adversario.

 Precisamente, en esos momentos de incertidumbre, emergió la figura de Carlos Roa para evitar la conquista local y asegurarle un triunfo clave a los aurinegros en su lucha por evitar el descenso directo y la Promoción.

Primer tiempo

Defensa eficaz y ataque efectivo

 Omar Labruna decidió ubicar desde el arranque a Ismael Blanco en lugar de Alejandro Delorte, con la intención de darle mayor rapidez a su ofensiva. Y esa determinación fue decisiva en el desarrollo del cotejo.

 Sobre todo porque Olimpo, con Javier Páez y Matías Villavicencio como abanderados, se mostró impermeable para el ataque del "Taladro", a la vez que Martín Wagner, Gustavo Pinto y Jesús Méndez se las ingeniaron para entorpecer la zona creativa del dueño de casa.

 Y para que el sistema diera resultado, el ataque estaba obligado a ser veloz, algo que aportaron Maggiolo, el mencionado Blanco y el muy inteligente, aunque también discontinuo, Leandro Benítez.

 De esa forma, la escuadra bahiense, aún sin tener tanto la pelota, manejó los ritmos y logró confundir a Banfield.

 Los albiverdes encontraron algunas facilidades por la punta de Jorge Martínez en el arranque del partido (Dátolo se le filtró dos veces a su espalda), aunque una vez superado ese déficit, el trámite se trabó en el sector central, donde ninguno de los dos logró prevalecer.

 En la paridad, los visitantes mostraron su peligrosidad en la réplica a los 20, cuando Pinto abrió para Martínez y éste lanzó un centro que Blanco definió mordido.

 Cuando Banfield presionaba en pos del desnivel, Olimpo golpeó de contraataque. Benítez dominó el esférico en el medio y lo metió al área para Blanco, quien giró ante la marca de Galarza, ganó la raya y sacó un centro corto atrás para el ingreso de Maggiolo. El "18" la empujó pese al asedio de Sanguinetti y enmudeció el estadio.

Segundo tiempo

Manejó los nervios del rival

 Era más que obvio que Banfield adelantaría sus líneas en la fracción complementaria, pero Olimpo supo controlar la situación.

 Con el ingreso de Sebastián Romero por Jesús Dátolo, el entrenador Carlos Leeb intentó que su equipo llegara por los costados, aunque Labruna ordenó que Juan Fernández y Jorge Martínez desistieran de pasar al ataque y el problema inicial quedó solucionado.

 Por ello, inmediatamente, el orientador local gastó todos sus cambios con los ingresos de Christian Galeazzi (punta por afuera) y Santana (carrilero izquierdo), aunque tampoco con esas variantes pudo corregir el rumbo del trámite.

 Afirmado en el mediocampo y cada vez más confiada la dupla central, Banfield no encontró huecos por donde filtrarse, a la vez que se expuso a las réplicas encabezadas por Leandro Benítez, a quien, en una de ellas, le anularon el 2-0.

 En realidad, el ex Estudiantes y Quilmes picó habilitado, pero Blanco (en offside) intentó involucrarse en la maniobra, por lo que Abraham Serrano levantó su banderín y Lunati dejó sin efecto el tanto.

 A los 20 lo tuvo Blanco, tras otra muy buena asistencia de Maggiolo, aunque su definición ante el achique de Lucchetti se fue por arriba del travesaño.

 Banfield intentó con los remates de afuera, como uno de Maidana que exigió una excelente intervención de Roa para desviarlo al córner.

 Totalmente jugado, el local ubicó mucha gente cerca del área de Olimpo para forzar el error y el error se produjo, aunque Roa logró subsanar el de Wagner en la salida en el mano a mano con Mendoza.

 Y en tiempo de descuento tuvo el empate en la cabeza de Galeazzi (en offside ignorado por el juez de línea Omar Costa Pisani), pero Roa emergió nuevamente y aseguró el triunfo.

Conclusión

 Olimpo consiguió tres puntos realmente importantes en su lucha por evitar el descenso directo. El de ayer, pensado en el vestuario y ejecutado con claridad dentro del campo de juego, le permitió a los aurinegros recuperar las unidades perdidas ante Newell's en el Roberto Carminatti y revivir cuando muchos pensaban que llegaba la debacle...

Pablo Andrés Alvarez/Enviado especial