Embarques de cebollas y frutas para Europa
Cada buque portacontenedor que visita nuestro puerto es una chance para ganar nuevos mercados, saciando la demanda del exterior, aumentada tras la devaluación del peso.
Esto se evidenció, una vez más, en el embarque que se completó en la víspera, donde se cargaron 71 toneladas de cebollas. Las firmas responsables de la operación fueron Arbol, con siete contenedores de 40 pies (12 metros), y Flores Pirán, con dos contenedores de la misma longitud.
Ambas firmas son productoras del valle bonaerense del río Colorado, zona de CORFO.
El destino de este embarque, que deberá mantener la cadena de frío durante todo el trayecto, es Rotterdam (Holanda).
En la historia del puerto local, se han hecho embarques de cebolla, pero a granel.
"Es la respuesta de CORFO (principalmente, de productores de Pedro Luro) a todas las visitas que miembros del Consorcio han hecho a esa zona. Por ahora, son cantidades mínimas, pero se debe a un período de prueba que, esperamos, sea rentable", dijo Oscar Vecslir, vicepresidente del CGPBB.
Otra empresa frutera
A la firma exportadora de fruta Puerto Frío, ya instalada en el muelle local y que tiene en sus planes comercializar cebolla, se sumó, con peras y manzanas, la empresa Argenfrut, productora del valle medio rionegrino.
En la víspera, en el mismo buque que lleva cebollas, cargó un contenedor de 40 pies la firma Montever, perteneciente al grupo Argenfrut, con destino a Valencia, mientras que Puerto Frío, mediante Austrade, exportó dos contenedores de 40 pies, con destino a Génova.
"Los empresarios están observando cómo se comporta todo el sistema. Son cantidades menores, para verificar si la logística que hemos montado cubre sus expectativas. Nuestro servicio incluye desde la recepción del contenedor, su puesta en frío, el almacenado en puerto y la carga al barco, hasta el tiempo que tarda en llegar a destino. Si las condiciones y los números de la operación les cierran, seguro que vendrá más fruta", opinó Vecslir.
Que la prueba se lleve a cabo con peras y manzanas se debe a que son las frutas de mayor resistencia al traslado y permiten tener márgenes para absorber demoras.
La calidad de la mercadería en el puerto de destino es un tema de vital interés por parte del puerto local.
"La nueva actitud del Consorcio es salir a buscar la carga, lo que significa acompañarla desde el origen hasta el destino final, para que se cumplan todos los aspectos de la comercialización, en todos sus términos", dijo el presidente alterno del puerto.
Las empresas de frutas son compañías que estaban operando en los puertos de San Antonio, Río Negro y Buenos Aires.
"La idea es no afectar, mayormente, los despachos por el puerto de San Antonio, porque esas son cargas en bodegas, aunque también esa terminal presta el servicio de contenedores. Esto tiene que ver con las fechas, con los destinos, con las cargas; son una serie de factores que entran en la conversación y Bahía Blanca quiere ser una alternativa", opinó el funcionario.
"No queremos sensibilizar, más allá de lo lógico, al puerto de San Antonio, porque ellos se han armado para hacer ese trabajo. No queremos empezar una competencia, sólo darle una opción al productor. No debe verse al puerto de Bahía Blanca como un adversario, sino como un complemento portuario para poder operar el excedente de San Antonio", comentó.
Agregó que la terminal rionegrina es operada por una sola empresa que, en situaciones puntuales, no satisfizo a algunos productores.
"Hay sectores productivos que no están conformes con la operatoria. En nuestro puerto, tienen una alternativa en servicios y costos", dijo Vecslir.
Inquietud de los peladores
Integrantes de la cooperativa San Silverio, dedicada al pelado de camarones y fileteo de pescados, se reunieron, ayer, con ediles y un representante del Consorcio de Gestión del Puerto, en el Concejo Deliberante.
"Los miembros de la cooperativa están muy consternados por la falta de mercadería para procesar, por lo que solicitaron una reunión al presidente del cuerpo legislativo local, a fin de nuclear a los sectores involucrados y poder destrabar la llegada de lanchas de mediano porte al puerto local", comentó Vecslir.
Actualmente, estas lanchas pescan en nuestro frente marítimo, entre las millas 5 y 12, y la captura la descargan en el puerto de Mar del Plata, donde es procesada.
La intención de los cooperativistas es habilitarlas para que amarren en Ingeniero White y elaborar la mercadería localmente.
Las resistencia a este proyecto está dada por los pescadores artesanales de toda la región, quienes temen que el recurso ictícola sea depredado, debido a que, al acortarse los tiempos de viaje, las lanchas incrementarían notablemente su captura.
Incluso, no quieren asumir el riesgo de que pesquen durante su traslado hacia el puerto, atravesando la zona de pesca artesanal.
"El Consorcio del Puerto está en condiciones de controlar estas lanchas, con equipos de radares; ese es nuestro compromiso. En caso de aplicarles sanciones, no sólo recaerían sobre el titular de la lancha, sino, también, sobre el frigorífico con el que mantienen la relación comercial. Se busca que los trabajadores de la cooperativa tengan un buen volumen de mercadería para procesar durante la mayor parte del año, sin afectar la pesca artesanal ni el recurso pesquero", concluyó Vecslir.