Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Lo que mata es el calor: ¿Por qué Bahía Blanca fue récord nacional?

La semana de altas temperaturas se inició este sábado 23. Ese día el termómetro marcó 38,9 grados C (SMN), para una térmica de 40,6ºC. Es determinante la convergencia única entre el continente y la zona del estuario.

Una escena obtenida en la plaza Rivadavia, este viernes, con una temperatura de 37,1ºC. / Fotos: Emmanuel Briane y Jano Rueda-La Nueva y Archivo LN.
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Audionota: Mariano Muñoz

Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva.com

   Para Carlos Zotelo, del Centro de Recursos Naturales Renovables de la Zona Semiárida (Cerzos) del CONICET, la forma en que se distribuyen las isotermas es clave para explicar por qué nuestra ciudad aparece, en casi todos los veranos, alguna vez al tope de las temperaturas máximas del país.

   “Lo que tiene en particular la región de Bahía Blanca es que, en muy pocos kilómetros, cerca de donde finaliza el estuario, convergen las isotermas, las isobaras y las isoyetas; (que son) las líneas de igual temperatura, las de semejante presión y las de igual cantidad de milímetros de lluvia”, dijo.

   “Con el aspecto térmico, la confluencia de la forma del estuario y la convergencia de todas esas variantes la convierte en una zona de características únicas en el país”, agregó.

Carlos Zotelo, licenciado en Ciencias de la Atmósfera e investigador del Cerzos-Conicet.

   “Cuando uno aprende a pronosticar existen tres tipos de regiones. Las que son afectadas por un oceáno, que tiene influencia sobre el clima, como Mar del Plata por ejemplo; las continentales, como Córdoba o Santiago del Estero, que se caracterizan por una mayor amplitud térmica y, finalmente, las zonas de montaña, con sus características de altura y demás”, describió.

   “Pero Bahía Blanca es particular”, aseguró Zotelo, en diálogo con La Nueva.

   “Algunas veces se comporta como marítima, porque está pegada al océano, pero no es igual a Mar del Plata, y a veces lo hace como si fuera Córdoba; bien continental. En realidad, es un juego complejo”, aseguró.

   De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), en nuestra ciudad este sábado 23 el termómetro marcó 38,9 grados centígrados, para una sensación térmica de 40,6ºC. San Juan y Mendoza se quedaron ahí nomás: 38,8ºC.

   Al día siguiente, domingo 24, la temperatura llegó a 37,2ºC (38,1ºC de sensación térmica) y esta vez Bahía Blanca quedó detrás de San Juan, con 40,4ºC y Mendoza, con 39,1ºC.

   Para el mes de enero, nuestra ciudad tiene un promedio histórico de 24ºC, con picos de 31ºC y de 17ºC.

   “Es una zona de transición pero, a diferencia de otras, se da en una escasa distribución espacial, sobre todo de este a oeste y con un cambio significativo, incluso, en cuanto a las lluvias”, sostuvo.

   “Así aparece un gradiente muy marcado de norte a sur, donde todo converge en Bahía Blanca. Es decir: en poco, es mucho el cambio”, amplió.

   “Siguiendo con el ejemplo de la lluvia, y por citar una localidad al oeste de Bahía Blanca, como Médanos, a 80 o 100 kilómetros de Bahía Blanca, pero del otro lado y aunque muy cerca, más de una vez llueve el doble. La fluctuación es muy fuerte de este a oeste, pero quizás no tanto de norte a sur”, comentó.

   “Con el cambio térmico sucede algo parecido”, admitió.

   “Toda la franja desde las localidades de Hilario Ascasubi (NdR: Villarino) hasta Chasicó (Tornquist), que serán poco más de 80 kilómetros, tiene un gradiente de temperatura muy marcado, porque convergen las líneas promedio del año”, sostuvo Zotelo, quien es licenciado en Ciencias de la Atmósfera.

   “A veces esas isobaras se corren y hay un clima templado, pero en otras ocasiones se mueven aún un poquito más hacia arriba y en invierno tenemos una estación más fría en Bahía Blanca que en todo el país. Por ejemplo, con 7 grados bajo cero, tal como ha sucedido alguna vez”, recordó.

   El Lic. Zotelo dijo que, a las citadas incidencias, hay que sumarle la variabilidad climática.

   “Desde finales de los ochenta, en los noventa y hasta en 2000 nos ocupábamos bastante sobre el cambio climático: si era de origen humano o qué medida podíamos tomar para mitigar sus efectos”, dijo.

   “Hoy el problema ya no es el cambio climático, porque sabemos que es un ciclo natural en el cual el hombre tiene un activo grado de participación, sino que, desde el año 2012, se acentúa la variabilidad climática”, sostuvo.

   “Se trata de procesos muy extremos”, afirmó.

   “Por ejemplo, 500 milímetros de lluvia en un solo día en determinado sitio. O nieve en La Meca (NdR: Arabia Saudita), donde nunca había pasado. También fenómenos de sequías prolongadas, u olas de frío como las de ahora en Europa, con Filomena”, afirmó.

   El Lic. Zotelo comentó que se trata de muestras de variabilidad porque la atmósfera no encuentra el equilibrio.

   También que al ciclo natural se le sobrepone la acción humana y que nunca termina de encontrarse en un punto.

El Paseo de las Esculturas. Sábado 23 de enero, a las 15, con 38,9ºC.

   “Hoy el tema pasa por cuantificar y pronosticar el margen de fluctuación que tiene la atmósfera”, sostuvo.

   “¿Si viene más calor para Bahía Blanca? La mayoría de los modelos prevén una semana entrante térmicamente tranquila, con máximas próximas a los 30ºC para martes (NdR: 9) y miércoles (10), pero algo más aceptable que los niveles de 34 o 35ºC que se evidenciaron semanas atrás, más allá de los casi 37ºC de este viernes (por el 5)”, pronosticó el Lic. Zotelo.

¿Por qué es difícil pronosticar el sistema de Ventania?

   Para el Lic. Zotelo, el sistema de Ventania es una limitante natural a la hora de pronosticar fenómenos climatológicos.

   “Tradicionalmente, las tormentas que se forman en Bahía Blanca vienen con viento del sector sudoeste, que es un aire un poco más frío y, de alguna manera, genera algunas precipitaciones”, dijo.

  “Pero, a ese mismo aire que ya viene de zonas más australes, en ocasiones se le acaba el impulso y queda retenido por el complejo de Ventania. Y, a veces, si el impulso de ese aire es débil no puede subir la montaña y tampoco llegar al centro de la provincia”, relató.

   “El fenómeno es mucho más frecuente en el sentido contrario, respecto de la Pampa Húmeda”, aclaró.

   “Porque la humedad que viene del océano ingresa a través del sur de Brasil, pasa por Paraguay, llega a la Pampa Húmeda muy cargada y, en la zona de Azul u Olavarría, ya no tiene mucha fuerza y no puede pasar la cadena montañosa”, afirmó.

   “Así entonces: queda la humedad del lado norte de la montaña del sur de la provincia de Buenos Aires, y semiárida del otro lado, ya sea en Coronel Suárez, Coronel Pringles, Bahía Blanca y demás”, comentó.

   “Todo esto representa una complejidad más a la hora de precisar por qué Bahía Blanca es tan seco y caluroso”, dijo Zotelo.

   También para el caso de nuestra ciudad, es habitual que alguna vez lidere el ránking de temperaturas más frías del país.

   “La gente asocia que en el norte hace calor y en el sur hace frío, lo cual es bastante acertado, pero no necesariamente eso sucede todo el tiempo”, señaló.

   “Hay muchas veces que la zona de Puerto Madryn y de Trelew, en el Chubut, está mucho más caliente que localidades como Córdoba o Santiago del Estero”, recordó.

   “En la Patagonia la incidencia de la radiación solar se siente en forma mucho más intensa que en otras regiones del país”, aseguró.

   “Por eso la combinación de centros de alta presión, cielos despejados y alta incidencia solar se traduce en temperaturas altas que pueden ser más extremas que las de la región norte del país”, sostuvo.

“Cuando nos referimos a la variabilidad, lo mismo sucede en Bahía Blanca, tanto para calor como para frío”, agregó.

   Zotelo recordó que, en nuestra ciudad, el lunes 26 de agosto de 2013 se produjo el récord de temperatura mínima de la historia para ese mes: —7,9Cº.

   También que, al jueves inmediato, 29, apareció el récord de temperatura máxima para ese mismo período de 31 días: 32,6ºC.

Al calor de las estadísticas

   Desde que se dispone de estadísticas del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), hubo 71 días en los cuales la temperatura máxima superó los 40 grados en la ciudad de Bahía Blanca.

   Los diez más calurosos han sido los siguientes:

Nota: La última vez que hubo una máxima superior a los 40 grados fue el 8 de enero de 2018, con 40,2ºC. Fuente: Archivo meteorológico de lluvias y de temperaturas del periodista Norman Fernández.