El miedo de una joven víctima de maltrato

Redacción de La Nueva.

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“Estoy mejor y por ahora, como está detenido, no tengo miedo, pero no sé hasta cuando. Mientras lo llevaban a la comisaría me amenazó y me dijo que cuando saliera de ahí me iba a matar”, afirmó ayer Natali Posiaga, la joven de 19 años que fue rescatada por una amiga de la vivienda de Leopoldo Marechal 2877, adonde su exnovio la golpeó e intentó ahorcar.

La víctima relató a La Nueva. detalles de su padecer y explicó que volvió a la casa de su expareja, de donde se había ido el jueves pasado, porque “estaba amenazando a mi amiga (Estefanía Bravo) y a su hijo. Me separé de él porque me dijo que me vaya, ya lo había hecho varias veces y después me iba a buscar”.

“Realmente estaba cansada de las amenazas y por eso fui a su casa para que dejara de molestarme. Cuando llegué me empezó a decir que mi amiga lo iba a matar. Abrió la puerta, me agarró del brazo, me metió para adentro y cerró la puerta con llave. Me decía que lo estaba dejando mal parado siendo que era un buen pibe. Él aparenta ser otra cosa delante de la gente”, detalló la muchacha.

“Cuando fui para el lado de la pieza, me tiró sobre la cama, me agarró del cuello y me decía que me iba a matar. Ahí fue cuando me quitó el aire y me desmayé. Al despertar tenía la cara llena de sangre, un par de chichones en la cabeza y cortada adentro la boca”, recordó.

“Empecé a pedir ayuda, sin saber que había gente afuera. Por suerte mi amiga me escuchó, ya que yo me volví a desmayar, porque siguió ahorcándole. Él quería matarme”, agregó.

Aclaró que “no pienso hablar más con él, pero tengo miedo. Los médicos me limpiaron la sangre, pero nada más, nunca me llevaron a un hospital, fui directo a la Comisaría de la Mujer y la Familia”, en calle Berutti 664.

Y sobre Fernández acotó que “parentaba ser otra cosa, pese a que la exmujer me había dicho que era golpeador. No le creí, pensé que lo decía por celos. Siempre fue de gritarme o agarrarme”.