Martín Mackey: "En el fútbol formativo de Villa Mitre hubo un antes y un después"

Mikel Iñurrategui

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El fútbol formativo de Villa Mitre atraviesa el cuarto año de un proyecto innovador y ambicioso, que fue presentado en abril de 2022 y que tiene a Martín Mackey como cabeza del mismo.

Con el rosarino como asesor de la disciplina en la parte formativa, el tricolor comenzó a desandar un camino que transita un momento bisagra. O, al menos, un periodo en el que pretende dar un salto de calidad y de nuevo crecimiento, luego de haber superado las primeras etapas de irrupción y consolidación.

El proyecto, básicamente, se basa en tres pilares fundamentales, según le explicó Mackey a La Nueva. tiempo atrás: formación docente, capacitación técnica y conceptual, y formación integral.

El tiempo pasó y ese proyecto se echó a rodar, por eso, aprovechando una de las tres visitas anuales que suele hacer Martín a nuestra ciudad, dialogamos con él para conocer en qué etapa se encuentra este sistema de trabajo implementado por una institución que de un tiempo a esta parte nunca se detuvo y siempre va por más.

La charla, encima, se da en el contexto natural y dónde nace, crece y se planifica todo esto: el Complejo Deportivo "La Ciudad", donde ciento de pibes sueñan con ser y otros ya consagrados también se preparan para competir.

Desde lo numérico, a nivel local, en 2024 el tricolor fue campeón en tres categorías de Juveniles (cuarta, quinta y sexta), una en menores (séptima) y fue subcampeón en otra (octava). -ver más datos abajo-.

Pero para poder ver más allá de los resultados, La Nueva. dialogó por casi una hora con este preparador físico que irrumpió en nuestra ciudad en Bahía Basket y también trabajó en Newell's y la Unión Argentina de Rugby, entre otros lugares.

Este encuentro se dio luego de que la Villa se midiera en Sub 17, Sub 15 y Sub 13 ante Alvarado de Mar del Plata, por el Torneo Regional Juvenil.

"Que tengas la oportunidad de poder jugar contra equipos de otras ciudades, primero es una motivación especial para los chicos", abrió el juego Martín, al resumir lo visto durante sus dos días en Bahía.

"Y después -agregó-, te muestra si estás en competencia, si estás muy por debajo, o si estás por arriba de esos clubes. Me parece que esto es un acierto y en todo sentido te genera una mejora, porque si estuvieses muy lejos, te obliga a mejorar; si estás en competencia, quiere decir que estás bien; y si estás por arriba, mucho mejor".

-No pensaba arrancar la charla con este tema, pero ya que surgió: ¿qué rol ocupa la competencia en sí en toda esta formación?

-La competencia es siempre lo que te permite evolucionar. Es difícil pensar que puedas desarrollarte en cualquier deporte, entrenar, entrenar, entrenar y nunca competir. Creo que la competencia tiene que estar siempre puesta en el lugar de poder saber si lo que vos estás entrenando y haciendo en la semana, al momento de ir a competir, te permite hacerlo bien. Es una evaluación de tu proceso. Ahora, si vos ponés la competencia como una evaluación en la cual lo único que vos aceptás es ganar, distorsiona un poco el proceso formativo. Muchas veces en juveniles se dice que el resultado no es importante, pero yo creo que el resultado siempre es importante. El tema es entender que ese resultado y ese ganar tiene que venir como consecuencia de un tiempo determinado en el cual hemos hecho algo que nos permite ganar. Y ese exigir ganar también pone a los chicos en un lugar que no es real, porque les estás pidiendo que ganen y todavía no están preparados para hacerlo. Considero que la competencia es formativa siempre y cuando, desde la institución y los entrenadores, entendamos verdaderamente cuál es la función que tiene la competencia en sí.

-¿Esa es quizás la parte más difícil, o es más difícil trasladarlo para afuera, que el afuera entienda que aunque no se gane, se puede estar ganando de otra forma?

-Es un poco de todo, también el deporte en general es muy exitista. Y yo creo que cuando vos trabajás en un proceso formativo, sobre todo en el fútbol, a veces tenemos que pensar que  a los que formamos son a los chicos. Y, en ese sentido, es muy importante formar a los padres también. Nosotros en Villa Mitre lo hemos hecho a través de reuniones. Una de las cosas que me sorprendió inicialmente acá, aunque ya lo había vivido, es que la mayoría de los partidos terminábamos con menos jugadores por la conducta dentro de la cancha o éramos los que teníamos más amarillas o rojas, y la conducta de los de afuera no era la mejor. A medida que fue pasando el tiempo, eso lo fuimos mejorando. Hoy, por ejemplo, vimos una jornada que terminó bien, sin tarjetas rojas, y con buena conducta por parte de los padres. Hemos trabajado mucho también en cómo debe ser la conducta y el modo de comunicación de los entrenadores hacia los chicos durante el desarrollo del partido, previo, en el entretiempo y en el postpartido. Si bien uno siempre piensa que en lo deportivo, en el fútbol, está formando a los chicos, es muy importante que el contexto también tenga la lógica de lo que vos estás tratando de hacer con los chicos. Porque si vos les pedís conducta a los chicos dentro de la cancha, pero permitís que los padres tengan mala disciplina o el entrenador se pelee con el árbitro, le estás pidiendo algo que el contexto no tiene. Cuando tenés coherencia en tratar de hacer eso, la formación en general hace que el chico, en definitiva, mejore, porque es lo que queremos. Además, se les da educación nutricional, gestión de emociones, y se les enseña a comprender el juego desde lo conceptual, no solo a hacer lo que hacen, sino a saber por qué lo hacen.

-¿Cómo te manejás con el "exitismo" dentro del proyecto?

-El exitismo tiene que estar en el día a día de las personas que trabajan. Hablo del éxito de ser mejor todos los días y de la exigencia que te pone alcanzar ese éxito. Y después, cuando hablamos del exitismo como resultado en sí, te podría decir que los resultados de la formativa de Villa Mitre han sido muy buenos en los últimos años, hemos sido no solamente competitivos, sino que hemos tenido resultados. Pero esos resultados se basan fundamentalmente en la exigencia de que nuestros formadores de jugadores tienen que ser mejores todos los días. El resultado futbolístico se va a dar como consecuencia de lo que nosotros vayamos haciendo todos los días. Cuando eso pasa y logramos tener personas que se exijan en ser exitosas cada día, bueno, el resultado va a venir. Por supuesto, si te digo que trabajamos en todo esto y no ganamos ninguna categoría, la gente diría que está muy bueno, pero no se ve en los números. Si los chicos tienen nutricionista, psicólogo para gestionar emociones (tanto ellos como los entrenadores), si hay un área de preparación física con gimnasio y profesores capacitados que registran su trabajo, y después se empieza a ganar, es como consecuencia de eso. Cuando pienso en el exitismo, digo, bueno, en el exitismo de haber sumado todo eso al club y hacerlo de manera correcta para que después nosotros podamos ganar. Creo que el exitismo no es una mala palabra porque todo lo que nosotros hacemos lo queremos hacer para tener éxito. Y lo que me alegra es que ese resultado, o éxito de haber ganado, tiene detrás algo que la gente puede que no lo vea en el día a día, pero quienes lo tienen que ver, que son los chicos, se dan cuenta que eso pasa, y ahí está el éxito.

-¿Qué viniste a ver específicamente en esta visita, y cómo lo describirías en el contexto de estos cuatro años?

-Mirá, este es el cuarto año que inicia este proyecto. Este era o es un desafío en este año porque Iván (Vigo), quien estuvo durante estos tres primeros años llevándolo adelante, ya no está. Vine a hacer una transición o este año será una transición entre los tres años que tuvimos y lo que queremos que crezca o hacia dónde queremos que siga el fútbol formativo de Villa Mitre. Vine especialmente a hablar con los dirigentes y a conversar personalmente con Maxi, Beto Boggio, y con Fede Mancinelli, que también se está sumando a este proyecto, y que su participación va a ser muy importante. Durante este año, vamos a trabajar bastante en que cada una de las personas que se están incorporando a este proceso comprendan cómo queremos trabajar, cómo queremos crecer, cuáles son sus roles y qué indicadores queremos establecer para que puedan ser evaluados. Lo que pretendemos a partir del 2026, luego de esta transición, hacer para que este proyecto siga creciendo, uno corre riesgo de si está mucho tiempo que se produzca una meseta o a través de esa meseta empezás a caer en cuanto a calidad. El desafío es que a partir del 2026 podamos dar el salto de calidad.

"Si bien, el año pasado salimos campeones en cinco o seis categorías, y aunque el resultado es importante, si eso no fuera como consecuencia de un proceso que venimos desarrollando sólo quedaría el resultado. Ahora, lo que tenemos que hacer es que Villa Mitre sea un animador constante de la Liga del Sur y, con esta Liga Federal, poder medirnos y estar ahí. Y también, que en los próximos años, todo ese producto que se va desarrollando, los chicos que hemos ido formando en juveniles, tengan sus oportunidades o estén a la altura de poder conformar el plantel del Federal A u ojalá podamos ascender a la Nacional B y haya jugadores que estén a la altura de esa competencia. En resumen, mi presencia tiene que ver con alinear de nuevo lo que venimos haciendo entre la dirigencia y las personas a cargo de la gestión del proyecto".

-Tomando esa idea de "momento de quiebre" o transición, ¿qué balance hacÉs de los tres años anteriores?

-Es, te diría más que un momento de quiebre, entender que hay una transición porque cambiaron algunas personas. Lo que tenemos que consolidar es que, independientemente de las personas, el proceso haya trascendido a esas personas. Las nuevas incorporaciones, desde la individualidad, le agreguen valor al proceso que venimos haciendo, pero entendiendo que el plan trazado y el proceso que llevamos adelante se enriquece por las personas, pero que es más importante que las personas. En cuanto a hacer un análisis de los tres años, me parece que en el fútbol formativo de Villa Mitre hubo un antes y un después con respecto a la propuesta que se hizo. Tuvimos un primer año en el que instalamos lo que queríamos hacer, que fue cambiar el perfil de los entrenadores y proponerles procedimentalmente cómo queríamos entrenar y a qué queríamos jugar y por qué lo elegíamos. Los dos años siguientes de este proceso fueron de haber podido consolidar eso. Creo que realmente eso se logró y si uno ve jugar a las divisiones inferiores de Villa Mitre, va a ver una forma de jugar, una idea de formar, pero no solamente al respecto de jugar sino a cómo formar, a que el mensaje de quienes conducimos esté alineado con lo que les pedimos a los chicos. No es solo lo futbolístico, sino también un pensamiento en la formación integral de los chicos, a través de sus familias, pero también dándoles educación nutricional, gestión de emociones, y que comprendan el juego desde lo conceptual. Estoy muy contento con lo que se dio, y los dirigentes y las familias, que es importante escuchar su opinión, están muy agradecidos por lo que se ha hecho.

-Eso mirando para atrás, ¿y pensando futuro? Ese salto de calidad que mencionás, ¿cuánto influye en él que haya chicos de Villa Mitre en el Federal A o incluso en divisiones superiores? ¿Pasa por ahí el éxito?

-Eso va a ser importante, especialmente porque es algo de lo que vengo a hablar. Cuando vos decidís hacer un proyecto de esta envergadura, hay una inversión, y esa inversión significa dinero. Si vos estás dispuesto a hacer una inversión para desarrollar y formar a los chicos para que sean futbolistas, y esos chicos no llegan a constituir tu plantel principal, te preguntás para qué estamos invirtiendo todo lo que estamos invirtiendo. Porque, en cierto modo, lo que vos estás construyendo para una institución son "activos", y que se entienda bien lo que digo. Si categorías como la 2006, 2007, 2008, que tuvieron varios años de este proceso, no tienen a nadie que vaya a tu plantel superior…

-Claro, da la sensación que a ese proceso que puede ser buenísimo, le termina de faltar algo para cerrarlo…

-Y sí, entonces daría lo mismo hacerlo en Villa Mitre que en cualquier lado, porque la Primera está totalmente separada de tus formativas. Y lo cierto es que en ese caso tenés que pensar dos cosas: qué tipo de elecciones de jugadores estamos haciendo en Primera o qué tipo de jugadores estamos proyectando para Primera. Algunas de las dos cosas. Yo creo que la construcción a futuro tiene que ver con decir "hacemos un proyecto integral que esté alineado" y, a partir de eso, ver cómo está constituido tu plantel superior, qué tipo de jugadores podemos brindarte. Porque por supuesto que no te va a llegar una división entera a jugar el Federal, pero sí deberían llegar una determinada cantidad de jugadores que estén a la altura de la competencia en la que tu equipo principal está. Si no te llega ninguno, decís, "no hace falta invertir tanto en formativas” porque es muy figurativo, es muy lindo, formamos a los chicos como personas. Pero más allá de la formación como personas, tenemos la responsabilidad de nutrir al equipo de primera división con jugadores de Villa Mitre. Por otro lado, está la parte de cuántos chicos que fuimos formando son parte de las divisiones inferiores de River o de Newell's o de Boca o de Central.

-Obviamente. También lo que te empuja es tener a tu Primera bien posicionada para que el chico quiera quedarse...

-Nosotros somos un club que no exclusivamente forma, también tenemos un plantel de primera división al que tenemos que nutrir. Entonces, tenemos un "mix": debemos darle una determinada cantidad y calidad de jugadores para el Federal A, pero también puede ser que tengas jugadores que en proyección tengan una calidad superior y terminen en divisiones inferiores de equipos de AFA, y eso también es un logro para la institución. Probablemente esos chicos que son mucho mejores que para jugar en el Federal A, no se van a quedar, porque son mejores y está muy bien que se vayan, pero eso no quiere decir que esos son los únicos que vos formas. Está bien que los podamos evaluar y que, si tienen una oportunidad en clubes de AFA, lo hagan. Pero también hay un montón de chicos que se van a quedar acá, y esos chicos tienen que tener la calidad suficiente para poder integrar el plantel de primera división. Hoy que hemos consolidado lo que hacemos en nuestras formativas, tenemos que consolidar qué es lo que hacemos, a mí me gusta decir que cuando estás en juveniles es tu universidad. Al egresar de la universidad, ¿para qué estás? Uno pasa a ser un profesional, ya sea del Federal A o de primera división del fútbol argentino.

-Te tomo esa metáfora, ¿creés que en este momento de quiebre se tienen que empezar a ver esos "egresados"?

-Tienen. Sí, a lo mejor, vuelvo a decir, tal vez no sea en el año próximo. Yo estoy seguro que la calidad formativa de un chico que pasa 6 años en un proceso como el que está desarrollando Villa Mitre debería ser superadora con respecto al que pasó solamente 2 años en ese proceso. Entonces, uno apostaría o pensaría que si un chico que ya por lo menos pasó 4 o 5 años de este proceso debería tener la calidad suficiente como para poder jugar en el Federal A ahora. A lo mejor uno puede decir, bueno, puede que no se vea en el 2026 o haya menos en el 2027, pero si pensamos en un proyecto a futuro, obligatoriamente casi debería suceder. Entonces, digo, bueno, vamos hacia eso y es lo que estamos empezando a conversar este año para decir, bueno, hacia dónde queremos ir y qué es lo que queremos hacer.

-¿Qué lugar ocupa en todo esto el talento? Porque más allá de los procesos por lo que pase, también está el jugador, la persona y su contexto.

-El talento es la materia prima, obviamente, y eso pasa en cualquier profesión. En el deporte, si tenés a un chico con buenas cualidades físicas, motores y técnicas, y a la comprensión del juego y entra en un proceso y le suma esfuerzo, porque viene en horario, tiene conducta y aprovecha todos los recursos que vos le brindás, a ese talento de 6 puntos el proceso le aporta 2 puntos, va a llegar a 8. Y si parte de 8, va a llegar a 10. Siempre el talento es lo que te da el piso para desarrollar un buen proceso. La idea es que los chicos puedan ser lo mejor que puedan, después hay un montón de factores que hacen al crecimiento de un chico que hacen que llegará a dónde tenga que llegar, pero creo que hay que crearle el contexto ideal.

-Por ser vos la cabeza de este proyecto y por este momento de quiebre del que hablábamos, imagino que lo que pase a futuro va a jugar un poco en vos ¿qué tan importante es para vos eso, o confías en que van por buen camino y no pensás tanto en lo que pueda llegar a pasar?

-Yo no he sido una persona que me he quedado en algún lugar por el simple hecho de quedarme. Cuando hablamos con Juanjo (Larocca) la primera vez, hablamos de que primero había que instalar esto y, después, consolidarlo. Si vamos a invertir en esto, es porque realmente queremos ir hacia algo superador, siempre y cuando eso suceda voy a quedarme. Acá siempre me han tratado muy bien, cada vez que vengo me muestran su aprecio, las ganas de que yo esté y las propuestas que yo hago hacen todo lo posible para que puedan cumplirse. Siempre voy pidiéndole porque veo el potencial que tiene Villa Mitre. Mi continuidad en el proyecto va a tener que ver con que verdaderamente tenga sentido lo que se está invirtiendo para que algo pase, porque sino pierde mucho sentido y no va a tener mucho sentido ni para Villa Mitre ni para mí, ni para nadie. Mientras podamos seguir dando los pasos para que Villa Mitre siga creciendo, seguiré siendo parte.

-En este recorrido del proyecto, ¿qué etapa ha sido la más difícil: la instalación, la consolidación, o lo que viene?

-No, siempre los "startups" de cualquier proyecto lo que más tienen es una alta carga energética, porque hay como una "rispidez" y una resistencia y una lucha para poder implementar algo nuevo. Hay gente que no pudo adaptarse o vino y tampoco. Hoy, si en la ciudad preguntás qué hace Villa Mitre en la parte de fútbol, cualquier persona que se incorpore, por lo menos, ya conoce de qué se trata. Creo que todos los momentos de un proceso son difíciles, pero siempre la presentación de algo nuevo es compleja. Ahora, también es muy demandante poder sostener un estándar de trabajo. Todas las etapas tienen sus particularidades y dificultades. Una porque la tenés que instalar, otra porque la tenés que mantener y otra porque ya te pusiste la vara un poco más alta y tenés que tratar de mantenerla. Cada una requiere una atención pero, en general, cualquier persona que esté en el fútbol, viene a Villa Mitre hoy sabe que viene a algo determinado, y eso requiere capacitarlo y que comprenda la cultura deportiva del club. Ojalá en el tiempo tengamos cada vez más cantidad de jugadores que estén a la altura de jugar un Federal A, un Nacional B o, por qué no, algún día en primera división.

-¿Qué te puede aportar Fede Mancinelli en todo esto, puede ser un nexo entre el plantel superior y las juveniles?

-Fede tiene mucho para aportar, por lo que representa para la ciudad y para el club. Y, además, tiene dos cualidades que para mí son fundamentales: que es la voluntad de aprender y las ganas de poder ser parte de este proyecto. Hablo bastante con él y su voluntad, su humildad de poder escuchar, de preguntar más que dar una respuesta inmediata, independientemente de que podría hacerlo. Está abriéndose un camino nuevo y creo que tiene una potencialidad enorme para poder tener una tarea de gestión. Ojalá pueda hacerlo por mucho tiempo en Villa Mitre, porque sería un valor agregado muy bueno para club.

-Por último, después de esta visita a Bahía, ¿qué te llevás y qué considerás haber dejado?

-Siempre me llevo el venir y construir. Me llevo buenísimas charlas que puedo tener con Juanjo, Titi, los dirigentes, Beto, Fede, Santi Ruiz, Julián o Maxi. Y me llevo que estamos alineados, que tenemos una idea común, no es que yo estoy pensando algo y la gente piensa que es una locura. Ya estamos alineados en lo que queremos hacer. Lo que me llevo, fundamentalmente, es que esto va a continuar, que lo que estamos haciendo ya tiene un estándar de calidad aprobado. Desde lo laboral, me llevo eso, y después, cada vez que vengo, me llevo un gran respeto y afecto por parte de las personas con las que trabajo. Hay una mirada de progreso que antes no había, y ya hay una mirada de algo más allá que al principio parecía imposible, pero que está cada vez más alineada y más cerca de un nuevo crecimiento. Es como que vamos dando pequeños pasos de progreso. Empezó como una idea muy loca de Juanjo hace 4 años, y hoy es una realidad, así que eso a mí me pone muy contento.

*En números, datos y vueltas olímpicas

El año pasado, Villa Mitre fue campeón en tres categorías de Juveniles (cuarta, quinta y sexta), una en Menores (séptima) y subcampeón en otra (octava).

A continuación, un detalle de las camadas campeonas, con los datos y las imágenes proporcionados por gentileza de Eduardo "Cocho" López.

-Cuarta (2006), campeona

Villa Mitre se coronó en El Fortín, tras vencer a Olimpo –ganador del Cuadrangular Campeonato- por 2 a 0, con goles de Santiago Gómez que había marcado en la Promoción ante Rosario y Juan Acosta, quien había anotado la final extra del Torneo.

Disputó 31 partidos a lo largo del año con 20 victorias, 5 empates y 6 derrotas. Anotó 81 goles y recibió 38. Fueron sus técnicos Rubén Carrizo, Nicolás Rubio, Lucas Iglesias y cerró la campaña Guillermo Cufré.

-Quinta (2007), campeona

Villa Mitre se consagró como visitante, al vencer a Liniers en el Doctor Alejandro Pérez por 5 a 0 con dobletes de Gino Barrio y Santiago Ortiz y uno de Axel Haupt.

Tras quedarse con la etapa inicial, en el cuadrangular final el tricolor sumo 7 puntos, seguido por Bella Vista (5), Olimpo (3) y Liniers “A” (1). 

La Villa disputó 30 cotejos con 22 victorias, 4 empates y 4 derrotas, y fue dirigido por Matías Zeballos, quien logró su cuarto título en formativas.

El tricolor no ganaba el torneo de Quinta desde 2021 con Néstor Comino como DT de la categoría 2004.

-Sexta (2008), campeona

Villa Mitre había terminado tercera en la Etapa Clasificatorio y se coronó en El Fortín al vencer a Liniers “A” por 3 a 0,. con goles de Agustín Lucero, Emanuel Diez Paz y Leonel Diaz.

El equipo lo comenzó dirigiendo Diego Vaquero y cerró la campaña Juan José Stalloca.

El tricolor se consagró tricampeón, ya que había ganado con Matías Zeballos en 2022 y Rubén Carrizo 2023.

La Villa se adjudicó el Cuadrangular Campeonato con 3 victorias, en la última fecha 2-1 a Liniers “A” que si ganaba era el campeón. Santino Schamberger y Emanuel Diez Paz anotaron los tantos del triunfo aquel día.

El elenco tricampeón en 2024, disputó 31 partidos con 17 victorias, 8 empates y 6 derrotas, convirtió 65 goles y recibió 32. Santino Julián Schamberger fue el goleador con 19 festejos.

-Séptima (2009), campeona

Villa Mitre dio la vuelta olímpica por anticipado al vencer a Olimpo por 6 a 1 y aprovechar el empate de Liniers “A” y La Armonía 3 a 3. En la goleada tricolor marcaron Matías Maya, Paul Rearte, Juan Ignacio Manino -de penal-, Uriel Picchi, Agustín Marsala y Bautista López.

La Villa llegó a seis puntos contra tres de Olimpo, por lo que teniendo en cuenta los resultados entre si el tricolor garantizo el título.

Este equipo fue la base del seleccionado Sub 15 de la Liga del Sur, que llegó a la definición de la Etapa Semifinal del Torneo Nacional.

En total, los pibes disputaron 30 partidos con 22 victorias, 6 empates y solo 2 caídas. Anotaron 102 goles y recibieron 16.

Como destacado, cabe marcar que le ganaron a Rosario por 11 a 0, con cinco goles de Uriel Picchi.

La última derrota fue en la decimocuarta fecha de la etapa inicial, cuando perdió con Olimpo 1-0 gol de Ramiro Torres. Llegó a 16 sin perder con 14 victorias y 2 empates.

*Bonus track

Además de los títulos mencionados, Villa Mitre fue subcampeón en la Octava (categoría 2010) y la Novena quedó en manos de Liniers "A".

-Categoría 2012

-Categoría 2013

-Categoría 2014