Murió Roberto Irigoyen, impulsor de los derechos del consumidor en la Constitución Nacional
El abogado y político bahiense fue el miembro informante durante la reforma de 1994. Además fue un destacado integrante del radicailismo en la vida institucional y política local, provincial y nacional.
A los 92 años, falleció hoy, 29 de agosto, el abogado y político bahiense Roberto Irigoyen.
El doctor Irigoyen había nacido el 31 de octubre de 1931 en Bahía Blanca, cursó estudios en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, donde se recibió de abogado. Durante su tiempo en la universidad, participó en el movimiento de Reforma Universitaria y fue presidente del centro de estudiantes de Derecho entre 1954 y 1955, además de ocupar otras funciones relevantes en el ámbito universitario.
De formas educadas, con la cortesía de los hombres de otra época, Irigoyen fue miembro de distintas instituciones bahienses, como el Club de Golf Palihue, del cual fue socio vitalicio hasta su fallecimiento.
Se afilió a la UCR en 1949, siendo secretario del Comité de la Provincia de Buenos Aires, coordinador de la campaña electoral en la 6ª Sección y delegado reorganizador de la Juventud del Distrito. Entre 1963 y 1966, fue Jefe de Asuntos Legales de la Municipalidad de Bahía Blanca durante la intendencia del doctor Federico Baeza. De 1973 a 1977, fue electo concejal por la UCR.
Luego, en 1983, fue director de Petroquímica Bahía Blanca en representación del Estado Nacional, que poseía el 51 % de las acciones de la empresa. Dos años más tarde, fue electo diputado nacional, mandato que finalizó en 1989, habiendo tenido la oportunidad de presidir la Honorable Cámara de Diputados de la Nación y de ser vicepresidente de la Comisión de Legislación General.
En 1994, fue electo convencional nacional constituyente para la reforma de la Constitución Nacional. Durante la misma, fue el miembro informante del artículo 42 de la Carta Magna, que incorporó los derechos del consumidor.
Más allá de la política, fue vicepresidente 2° y tesorero del Colegio de Abogados de Bahía Blanca, y secretario del Tribunal de Disciplina de dicho colegio.
Sus restos serán velados en Estomba 255, sala A, e inhumados mañana en el cementerio local.
Con su partida, Bahía Blanca pierde a uno de sus actores políticos e institucionales más representativos del siglo pasado.