El actor Cuba Gooding Jr. admitió ante la Justicia un abuso sexual simple
Confesó haber besado por la fuerza a una camarera. No irá a la cárcel pero deberá hacer una terapia para la adicción al alcohol.
El actor Cuba Gooding Jr. admitió ante un tribunal de Nueva York que besó a una mujer por la fuerza. Esta declaración evitó que vaya a la cárcel, solo pagará una fianza, y deberá hacer un tratamiento contra su adicción al alcohol.
El ganador de un Oscar por su rol en "Jerry Maguire" había sido acusado por más de 20 mujeres de manoseos y tocamientos no deseados durante décadas, y se había enfrentado a cargos penales derivados de las denuncias de tres de ellas.
El abogado de Gooding, Frank Rothman, dijo a la agencia AFP que su cliente se había declarado culpable de un delito menor.
"Admitió un cargo de haber besado a una camarera sin su consentimiento", dijo Rothman, y agregó que "todos los demás cargos han sido desestimados".
"En seis meses, si se mantiene sin problemas, ese cargo será retirado y no tendrá antecedentes penales al final de esto".
La Justicia dispuso que Gooding deberá hacer un tratamiento médico por el abuso de alcohol, que le permitiría seguir trabajando. Si cumple con todo el proceso durante seis meses, todo se reducirá a una simple infracción “no penal”.
Gloria Allred, abogada de la mujer anónima que lo denunció, dijo que las solicitudes para que otras presuntas víctimas puedan testificar en el caso -basándose en que fueron objeto de una conducta similar- fueron denegadas por el juez.
"Mi bufete de abogados y la abogada de Nueva York, Casey Wolnowski, continuarán litigando nuestro caso civil contra Cuba Gooding, Jr. en el tribunal federal de Nueva York en nombre de nuestra valiente cliente que alega en su demanda que Cuba Gooding, Jr. cometió un acto de violencia de género contra ella", dijo Allred.
"Esperamos lograr un resultado justo en esta demanda", agregó.
Gooding, de 54 años, es la última figura del mundo del espectáculo que se enfrenta a un ajuste de cuentas público sobre las insinuaciones sexuales no deseadas en la ola #MeToo, que comenzó con el procesamiento del productor Harvey Weinstein por décadas de abusos.