Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

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Imparable: el bahiense Fernando Petracci superó por 6ª vez una de las carreras más difíciles del mundo

En los 36 años de historia de la ultramaratón Spartathlon, en Grecia, solo dos argentinos la finalizaron seis veces, y él es uno de ellos, junto a Pablo Barnes. Recorrió 246 K en menos de 36 horas, uniendo Atenas con Esparta.

Los dedos marcan seis, las veces que finalizó la competencia; su sonrisa, la satisfacción por la misión cumplida.

   Anahí González Pau
   agonzalez@lanueva.com    

   "Todo esto se logra con tres pilares: convicción, sacrificio y disciplina".

   El bahiense Fernando Petracci tiene más que claro que correr la Spartathlon de Grecia, uniendo Atenas con Esparta, a lo largo de 246K, en menos de 36 horas, no es para cualquiera, y menos con 45 años, como es su caso, y habiendo llegado sin lesiones, siendo que tuvo destacadas participaciones en competencias de gran relevancia. Por ejemplo, en 2015 hizo el récord argentino de 239K con 58M en 24 horas , en pista de atletismo, en Uruguay, Montevideo.

   Seguir, a pesar de cualquier obstáculo. Avanzar con decisión, sabiendo que a cada paso, le sucederá otro, y otro, y otro. Confiar en el corazón y en el trabajo previo. Diluir los dolores en metas claras. Barajar y dar de nuevo, cada vez. No aflojar.

   "Es lo que hago en todos los ámbitos de la vida, en el deporte y en la profesión", dijo el argentino que acaba de finalizar por sexta vez, una de las carreras más exigentes del mundo. Tanto que es uno de los dos argentinos --el otro es Pablo Barnes, radicado en Italia-- en lograrlo en los 36 años de historia de esta competencia. 

    "Para mí correr es un cable a tierra, un estilo de vida", dijo Petracci, respetado médico oncólogo, especialista en cáncer de mama, quien además de correr no deja de cosechar títulos y masters en su especialidad.

    "Lo que uno vive en el día a día de laburo en el consultorio, con los pacientes, con los familiares, hace que sea un cable a tierra. Y lo disfrutás 10 veces mas en una carrera", señaló.

   El deportista comentó que esta Spartathlon fue una de las tres más difíciles de las seis que corrió.

   "A mitad de la carrera, cuando llevaba unos 100/110 k, empezó la fatiga, dolor de garganta y congestión nasal", dijo.

   "Claro que uno sabe a qué viene, no es una carrera fácil, y le metí para adelante”, contó.

   

   Pasar del invierno al verano, de forma abrupta, no le sentó bien. Pero no bajó los brazos hasta el finisher, momento en el que los corredores besan los pies del rey Leónidas, símbolo de fortaleza y coraje para el pueblo griego.

   “Las expectativas eran superiores, quería hacer menos tiempo, pero en este tipo de carreras llegar en 28 horas o en 36, es lo mismo. Simplemente hay que terminar la carrera, por lo dura que es”, dijo.

   “Te puede tocar un día de mucho calor, con frío a la noche. Nos ha tocado correr en 2018 con el ciclón Zorba”, comentó.

   Uno de los mayores desafíos consiste en que es una carrera muy rápida: hasta los primeros 90k los corredores deben llegar en menos de 9 horas y media. Gran parte de ellos --entre un 40 y un 50%-- no logra superar esta etapa. Quedan descalificados o abandonan porque notan que no llegan con los tiempos.

   "La Spartathlon, ha presentado casi 80 corredores argentinos en su historia, pero solo con Pablo Barnes hemos llegado hasta acá, cabeza a cabeza, buscando los seis finisher consecutivos. Eso te infla el pecho", expresó.

   Fernando empezó a entrenar en Bahía a los 13 o 14 años. Fue triatleta y maratonista. A los 15 perdió a su papá Néstor y dos años más tarde viajó a La Plata para estudiar Medicina y vivió en una pensión. Su mamá, Gladys Monti, era profesora de Educación Física. Tiene dos hermanos: Pablo y Facundo.

   Está casado con la cordobesa María Eugenia Dutto, con quien tiene dos hijas: Lucía y Renata.

    "Con mi primera hija empecé a correr. Llegué a correr ultramaratón en 2008 después de correr 5 maratones en el año. A fin de año cancelaron la maratón de Mar del Plata y terminé corriendo una carrera de 6 horas en la pista del Parque Sarmiento. Metí 66 K, quedé segundo, y ahí me picó el bicho de correr ultramaratón", contó.

   Después fue adquiriendo más experiencia y a correr 24 horas, que es su especialidad.

   En 2015 participó de su primera Spartathlon en Grecia. Desde entonces fue todos los años.

   "Tengo la satisfacción de haber participado de la Selección Argentina de Ultramaratón, con quien viajé para competir en Las 24 horas de Turín, en 2015, y en 2017, fui a Belfast, Irlanda, al Mundial de 24 horas. En 2019 corrí en Brasil, también con la selección ", comentó.

¿Cuántas vidas entran en una vida?

   En paralelo a su pasión por correr, es médico de planta y coordinador docente del Instituto Alexander Fleming y dicta clases en la UBA. Tiene un Máster de oncología molecular  del Centro Nacional de Investigaciones de España y durante la pandemia terminó otro Máster, en la Universidad Tecnológica,  de Oncología de Precisión Genómica y Bigdata.

   En paralelo realiza el doctorado en Ciencias Biomédicas de la UCA.

   "Mis nenas están muy ligadas al deporte, juegan al hockey en Buenos Aires y me bancan mucho. Tanto mi esposa como mis hijas me aguantan si no, no podría hacer todo esto", aseguró.

  Al recibirse de Médico en La Plata, en el 2000, se mudó a Buenos Aires, donde hoy vive con la familia.

   Pasó por el Hospital de Clínicas en Medicina Interna y trabajó como médico en guardias. Después hizo la especialidad de oncología en el Instituto Alexander Fleming y terminó la residencia en su especialidad.

   En 2008 estuvo tres meses en Estados Unidos, en el Anderson Cancer Center, de Houston, Texas, para especializarse en cáncer de mama.

   "¿Uno de mis logros más importantes como ultramaratonista? Permanecer intacto a los 45 años, sin ningún tipo de lesión, motivado, mantenerme y estar competitivo año a año", destacó.

  "Poder estar estimulado, sin romperse y haciendo las cosas prolijas es lo que más orgullo me da. Lo bueno es estar listo para cualquier competencia", subrayó.

   Imparable; en 2017 corrió en el Ironman a 45 días de haber vuelto de Grecia. Además corrió 5 veces la Patagonia Run (carrera de montaña)

   "Me considero un multideporte", dijo.

   Con otra misión cumplida, ya está de regreso al país, para abrazar a su familia y celebrar un nuevo desafío superado.