Casa Escasany (O'Higgins 81), a toda hora
Un comercio que se mantiene vigente en la memoria colectiva.
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Hace 75 años, en agosto de 1946, inauguró su nueva sucursal en calle O’Higgins 81, la Casa Escasany, tradicional relojería y joyería de la ciudad.
Hacía un año que el comercio se había mudado a un local de Brown y Donado, para permitir la completa renovación de las instalaciones que ocupaba en la Gran Vía del Sur Argentino.
La sucursal bahiense se desempeñaba en un local que había quedado reducido y carente de comodidades para desenvolverse sin tropiezos, de acuerdo al ritmo progresivo impuesto por el directorio de la firma.
Fue así que se construyó un nuevo edificio, de suntuosas líneas arquitectónicas, dividido en dos plantas, construidas en diferentes tipos y con material de primera calidad.
En la planta baja estaba el salón exposición y ventas, exhibiendo el frente exterior de la casa una serie de relojes colocados en una misma línea que indican la hora oficial de varios países de América y Europa. En el centro se colocó uno más grande con la hora argentina, exacta. Los restantes relojes señalaban las horas de Londres, Montevideo, París, Roma, Berlín, Río de Janeiro, Asunción, Santiago de Chile y La Paz. El resto del interior se veía realzado con un notable moblaje y lujosas vitrinas.
La historia de este comercio comenzó con los hermanos Ramón y Manuel Escasany en un modesto taller en la Capital Federal. En poco tiempo fueron progresando, trayendo relojes y otras mercaderías de Europa, y siendo los primeros en colocar el precio junto a cada artículo exhibido.
En nuestra ciudad, la sucursal fue inaugurada en 1918 en O'Higgins 81, con un frente vidriado repleto de relojes, pulseras, alhajas, fantasías, novedades, platería y regalos. Cerró sus puertas en la década del 70. Aquel frente plagado de relojes es parte de la memoria colectiva de la ciudad.