Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

¿Continuará en la ciudad la tendencia de inviernos benévolos respecto de los históricos?

“Si lo comparamos con los últimos cinco años se puede decir que volvió el frío, pero distinta es la historia respecto del promedio de las temperaturas de hace, al menos, cuatro décadas”, dijo el climatólogo Carlos Zotelo, del Cerzos (Conicet).

El invierno se siente en Bahía Blanca. / Fotos: Rodrigo García, Pablo Presti y Emmanuel Briane-La Nueva.

Guillermo D. Rueda /  grueda@lanueva.com

   Inviernos eran los de antes.

   Es lo más parecido a una predicción para el invierno 2021 que comenzó —este lunes 21— en nuestra ciudad.

   “Si lo comparamos con los años recientes, este va a ser más frío, pero porque veníamos de una bonanza meteorológica o térmica”, sostuvo Carlos Zotelo, del Centro de Recursos Naturales Renovables de la Zona Semiárida (Cerzos) del Conicet.

   “Ahora, si lo comparamos con los promedios históricos, que sería para el período 1981-2010, no va a ser uno de los más fríos. En los ochenta tuvimos valores muy fríos”, comentó.

Carlos Zotelo, del Centro de Recursos Naturales Renovables de la Zona Semiárida (Cerzos) del Conicet.

   La mínima histórica del mes de julio se produjo el 16 de julio de 1995, con --7,9 grados centígrados.

   “Hoy estamos lejos de esos números”, acotó Zotelo, en diálogo con La Nueva.

   “En el corto plazo venimos de una semana benévola, pero en el fin de semana habrá otro descenso de temperatura, con 1 o 2º para el domingo (por mañana). Luego comienzan a subir los valores”, aseguró.

   También dijo que, a partir de este jueves 1, los valores mínimos se acomodarán entre los 6 o 7º.

   “Habrá un cambio en la masa del aire y llegarán temperaturas por encima del valor promedio histórico de julio, que es de 3º”, describió.

   Zotelo recordó que, en el año 2016, el otoño en Bahía Blanca fue más frío que el invierno, con mayo más crudo que julio y agosto, que son los meses de temperaturas más bajas.

   “En los últimos años no venimos teniendo temperaturas bajo cero; de hecho, la marca de los últimos días, de —2,4º entre el 14 y 15 de este mes, fue el registro más bajo de los últimos dos años”, mencionó.

Proyecciones a cinco meses con las probables olas de frío y lluvia, para Bahía Blanca. / Fuente: Carlos Zotelo (Cerzos-Conicet)

   También recordó que Bahía Blanca promediaba temperaturas de entre 7 y 8º bajo cero, y durante varios días, pero que ahora son pulsos de sólo 24 o 48 horas.

   “La media mínima histórica de junio es de 3,2 º. Pero hoy estamos entre los 5 y los 6º”, detalló.

   —¿Qué dicen los modelos sobre los pulsos de aire frío?

   —Ya mencionamos uno bien marcado para este jueves 1. Otro que vemos es para el inicio de la segunda quincena de julio y, después, otro casi antes de cambiar a agosto. Será de uno o dos días, pero no sostenido. Luego tendremos uno en la primera quincena de septiembre, como una suerte de helada tardía.

   —¿No volveremos a los 8º bajo cero entonces?

   —Ya tenemos que ir a analizar los modelos de gran escala y ahí nos concentramos en otras variables, como las lluvias. O el viento, que era un clásico del mes de agosto en Bahía Blanca.

   “Lo que vemos es que ha bajado mucho la intensidad en la cual se presentaba en ese mes. Se está dispersando y septiembre aparece como un poco más activo hasta bien avanzados esos 30 días.

   “Tiene que ver con los sistemas de presión, porque depende de cómo se comporte el anticiclón del Atlántico, del que notamos algunos retrasos en sus movimientos de norte a sur.

   “También, siempre en los modelos de gran escala, influye la intensidad de la radiación solar. Hay que pensar que la modificación de sólo el 1 % de esta radicación nos puede llevar a un invierno crudo”.

   —¿Todos estos cambios son consecuencias de la variabilidad climática y no necesariamente del cambio climático?

   —El cambio climático ya no es el monstruo que creíamos. El clima cambia; es una discusión etimológica. A ver: si el clima cambia, el cambio del cambio debería ser una constante. Pero el clima no es constante; siempre cambió.

   “Entre los (años) 700 y 1200 tuvimos un calentamiento medieval, con ascenso de temperatura y donde no le podemos echar la culpa a la revolución industrial porque aún no había llegado. Es decir, la temperatura global por momentos asciende y, en otros, desciende.

   “¿Por qué surgió el cambio climático? Porque notamos una aceleración vertiginosa en los valores de ascenso de temperatura a finales de los ochenta y, principalmente, durante la década del 90 y de 2000; sin embargo, ese incremento se ha estancado en los últimos años. La tasa se retrajo.

   “Experimentamos, sobre todo en el hemisfero norte, olas polares extendidas que, en la década de 2000, eran menos frecuentes.

   “Ahora el enemigo es la variabilidad climática, ya no el cambio climático. Son los fenómenos extremos, como la nieve que cayó en La Meca (NdR: enero de 2016) o los 400 milímetros que precipitaron en pocas horas Comodoro Rivadavia (abril de 2017).

   “Esto sucede porque la atmósfera busca un equilibrio natural en estos ciclos de calor y frío, pero la aparición del hombre, y el desarrollo de sus actividades, modifica esos planes. Es decir, la atmósfera siempre está recalculando”.

El enemigo invisible

   —¿El cambio climático puede ser considerado un enemigo invisible?

   —Puede ser. El concepto es: el enemigo es el cambio climático y su mejor aliado es el dióxido de carbono. Sin embargo, cuando la humanidad se puso en serio a trabajar en algunos temas y dejó las diferencias políticas de lado se encontraron rápidos resultados.

   “Pero, por ejemplo, no hemos logrado un acuerdo para los gases de efecto invernadero. Hay países industrializados que tienen esta idea: ‘Nosotros nos industrializados hasta acá, tenemos una parte productiva muy grande y nos costaría pasar a tecnologías limpias. Es mejor que los países de Tercer Mundo se desarrollen directamente en esas tecnologías’. Claro, ¿quién las vende? Los países del Primer Mundo”.

   —¿Qué dicen quienes están en vías de desarrollo? 

   —Los más influyentes, como la India, Brasil o Sudáfrica, sostienen que tienen derecho a contaminar el planeta hasta el mismo nivel que los contaminaron los países centrales. Afirman: ‘Nos sale más barato industrializarnos, de la misma manera que ya lo hicieron los países centrales, que renovar la tecnologías. Que la cambien ellos, que tienen el dinero’.

   “En esa pelea, respecto de quién renueva las tecnologías, todavía estamos dando vueltas. Las cuestiones políticas viajan en carreta y las necesidades del ser humano van en avión”.

Más lluvias en enero y febrero

   —¿Qué pasará con las lluvias en la ciudad y en la región?

    –Van a ser deficitarias, sobre todo en agosto, con pocas precipitaciones o núcleos muy pequeños que, inclusive, uno las ve y a veces se forman, pero que al final no tienen la suficiente energía para traer agua. Sí vemos una rápida recuperación de lluvias a partir de la segunda quincena de septiembre.

   “Cuando ingresa la primavera, que es justo cuando se producen muchos vaivenes, o la variabilidad meteorológica en el sudoeste bonaerense es muy activa, pasamos de días de mucho calor a días lluviosos o de bajas temperaturas. Ahí, justamente, vamos a tener la presencia de precipitaciones en forma recurrente e importante.

   “Para el productor será un julio con algún episodio de precipitación mínima. Después habrá un período donde la lluvia estará ausente, o con muy poca acción, y todo se recupera a partir de la segunda quincena de septiembre.

   —¿Las lluvias también están disminuyendo en la primavera?

  —Eso estamos viendo. Los meses de más lluvias en Bahía Blanca son marzo y octubre y el fenómeno de menos agua se marca en octubre, principalmente, entre un 5 y un 10 %.

   “En contrapartida, están subiendo las precipitaciones a finales de enero e inicios de febrero. Es una compensación.

   “¿Si eso es muy importante? No, pero si el patrón se mantiene podría modificar las estrategias productivas, ya que estamos acostumbrados a un determinado régimen de lluvias. Una pequeña modificación puede conllevar una siembra tardía o adelantar ciclos de la misma siembra o cosecha”.