Bahía Blanca | Sabado, 12 de julio

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“Se trabajó mucho este último tiempo y tenemos que seguir por el mismo camino”

Pablo Reynafé es el nuevo presidente Comercial, en reemplazo de Hugo Andreanelli, quien seguirá en la directiva.

Pablo Reynafé, presidente de Puerto Comercial. Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

   Por Mikel Iñurrategui / [email protected]
   (Nota publicada en la edición impresa)

 

   El Club Puerto Comercial renovó sus autoridades, aunque seguirá el mismo lineamento que traía bajo la conducción anterior.

   Pablo Reynafé asumió como presidente y reemplazará en el cargo a Hugo Andreanelli, quien igualmente continuará en la comisión directiva como secretario de organización.

   “Ya veníamos trabajando, esto es darle continuidad a lo que veníamos haciendo. El objetivo sigue siendo el mismo: intentar que la institución siga creciendo”, le contó Reynafé a La Nueva.

   “Con Hugo -agregó- teníamos un feeling bárbaro, charlábamos todo. Por eso insisto que el trabajo va a seguir siendo el mismo, quizás estaré un poco más expuesto pero básicamente es lo mismo”, agregó.

   Reynafé era el apoderado de la lista (no formaba parte de la comisión) y luego pasó a ser el apoderado del club.

   En esta nueva función Pablo estará al frente del club durante los próximos cuatro años, tras ser elegido por la asamblea correspondiente (de manera virtual) en la que también se aprobó la memoria y balance del 2012 a la fecha. 

Pablo dialoga en la cancha junto a Adrián De Giorgio (Secretario) y Martín Schamberger (padre del fútbol formativo).

 

   -¿En qué situación se encuentra el club?

   -El club hoy está con muchas cosas por delante y mucho trabajo. Los trabajos básicamente están en el fútbol que es lo que más demanda mantenimiento. 

   -¿En qué fue lo que más los afectó la pandemia?

   -Lo más duro es ver el club vacío, sin gente. Es lo más chocante. Íbamos a hacer tareas de mantenimiento y ver al club vacío, era lo más chocante de todo. Igual hicimos cosas, se arregló todo el salón y el fogón y se fueron haciendo muchas cosas. Porque tiene que haber un lunes que todo esto termine, que la pandemia sea cosa del pasado y el club vuelva a funcionar como antes. 

   -¿Cómo se trabaja en esa situación?

   -Se trató de mirar a futuro, qué íbamos a tener después de la pandemia. Se hizo el salón casi nuevo, solo faltan detalles; también se aprovechó que no hubo temporada de pileta y se sacó todo el arbolado, que estaba haciendo destrozos.

  Este último tiempo, el club enfocó decididamente su energía en un proyecto clave y por el cual viene trabajando hace tiempo.

  “Trabajamos fuertemente en el predio de las formativas (NdR: más de tres hectáreas), se trabajó en dos canchas, se les puso iluminación. Se laburó muchísimo ahí, se hizo una inversión muy grande. Eso lo logró una muy buena subcomisión de fútbol, con padres muy comprometidos y el apoyo de la comisión directiva”, contó Pablo.

   Este anhelo también fue posible gracias al apoyo de la comunidad whitense y sirvió, además, para acercar al club a las familias en una época tan difícil.

   “Hicimos algo que no se hacía hace muchos años: pusimos a la venta un bono y nos comprometimos a vender mil números. Los sábados salíamos por cuadrillas, con distanciamiento y barbijo, a vender. Queríamos que la gente vea al club en la calle, eso nos importaba mucho. Y que los chicos sientan en carne propia la obra y el trabajo que eso lleva, nos dio una felicidad bárbara. Cuando la pandemia lo permitía, los chicos estaban entrenando hasta las ocho de la noche. Años anteriores eso no pasaba y es algo clave. Necesitábamos imperiosamente el tema de luz, era algo básico, fue cumplir un sueño. Por eso te digo que se trabajó mucho este último tiempo y tenemos que seguir por le mismo camino.

Las luces, un sueño hecho realidad con el esfuerzo de todos.

 

   -¿Como afectó la pandemia desde lo económico?

   -Nosotros no pudimos hacer la Fiesta del Camarón y el Langostino, que a Comercial históricamente le corresponde la venta de la bebida, esa plata alcanza generalmente para ir tapando eso agujeritos de un socio que no puede pagar, o un chico que no puede pagar la actividad y para algunas otras cosas. Como el año pasado eso no lo tuvimos, con muy buen criterio, el Consorcio del Puerto creó una especie de fondo Covid para las instituciones que participábamos de la fiesta y nos dio una ayuda económica durante ocho mes. Con eso pudimos sobrellevar los costos de mantenimiento. 

   -¿Todo esto de la pandemia también sirvió para resignifcar un poco el rol social de los clubes?

   -Sí, creo que los clubes cumplen un rol sumamente importante dentro de la sociedad. Más allá de la contención de los chicos, porque terminan juntando al barrio como esto que te contaba de la iluminación, el club se puso en la calle y la gente se enganchó, colaboró y la obra se vio. A los 15 días estábamos prendiendo la luz de la cancha y la gente se engancha si ve compromiso, trabajo y que la administración es seria. El rol del club termina siendo la esperanza de que se pueden cambiar algunas cosas, se pueden transformar, con trabajo y dedicación. Venimos bastante detonados por la pandemia y eso te da un grado de alegría, porque si no hacíamos algo es como que te das por vencido y la pandemia se salió con la suya. Hay que darle pelea y seguir todos los días.

   -¿Cuál es la relación con el Puerto y que tan importante es para ustedes?

   -Termina siendo el gran padrino, aparte de las empresas locales. Yo siempre digo que gracias a Dios tenemos empresas locales, no internacionales, que nos dan una mano muy importante. El Consorcio es el único aliado grande que tenemos, que te puede dar una mano o sacar de un apuro. Y después, la colaboración de empresas locales. Yo siempre digo que el apoyo no tiene que ser nada mas que económico sino también a través de servicios.

   Al momento Comercial cuenta con más de 700 socios y con fútbol, básquetbol, boxeo y patín como principales actividades.

   -¿Qué te gustaría dejar tras tu paso como presidente?

   -Un predio de formativas a la altura y que eso le va a dar seguramente al club logros deportivos, familia, gente que se va a acercar, va a volver la gran familia whitense al club. Que el club vuelva a tener esa comunidad que supo tener. Que vuelva a estar el club lleno de pibes. Y me gustaría tener algo también para los adultos mayores en el club, ver que se puede hacer en ese sentido.