Explosión en Dow: para el fiscal no hubo delito y archivó la causa

Redacción de La Nueva.

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   A poco menos de un año de la explosión que sacudió a Bahía, la fiscalía decidió cerrar la investigación por la detonación en Dow, al considerar que no hubo delito.

   De esa manera, el fiscal Cristian Pablo Aguilar dispuso archivar las actuaciones que se habían iniciado por el incidente registrado el 28 de junio de 2019.

   "A esta altura del proceso se han realizado todas las medidas útiles y pertinentes para la investigación con el fin de determinar si existió o no un delito en el marco del incidente ocurrido en la planta petroquímica de propiedad de la empresa ´Dow´, ubicada en Avenida San Martín N° 1.881 de Ingeniero White", sostuvo Aguilar en la resolución.

   El caso se produjo cuando un sector de la planta -detenido por un corte de energía del día 23- comenzaba con las operaciones de puesta en servicio del sistema de purgas.

   "El recipiente sobrepasó la presión de trabajo de 4 Bar y a los 7 minutos de comenzada la operación de puesta en marcha ya se encontraba a 36 Bar de presión aproximadamente. La presión sigue elevándose hasta llegar a los 95 Bar donde se produce la explosión del recipiente a las 0:20 a.m. En conclusión el recipiente se encontraba en buen estado y la rotura se produjo a la presión predicha", se indicó en el escrito de la fiscalía.

   "Es de notar que la presión de rotura es más de 10 veces la presión máxima de operación", agregó, para mencionar que el equipo "estaba diseñado de manera correcta".

   "El hecho de haber alcanzado tal presión indica que el equipo no cuenta con una válvula de alivio de presión; que en este caso hubiese protegido la instalación y evitado que se produzcan fallas", amplió.

   Aguilar destacó, en ese sentido, distintas medidas que se tomaron, como la inspección del lugar del hecho con personal especializado, fotografías y filmaciones, una pericia de profesionales de la UNS e informes médicos a las personas que estaban de guardia en la planta en ese momento.

   "A modo de síntesis, del análisis de todo ello surge, por un lado, que ninguna persona resultó lesionada. Por otro lado, y más allá de la conmoción inicial debido al gran estruendo, tampoco existió un peligro común para los bienes o para las personas", dijo Aguilar.

   Agregó que "tampoco se liberaron gases tóxicos que pudieran causar peligro para la salud. Así fue determinado por los expertos de la UNS y de la Asesoría Pericial de esta ciudad que estudiaron lo ocurrido", sostuvo.

   El fiscal dijo que extremó las precauciones para determinar si se había ocasionado estrago alguno o si un operario había sufrido lesiones o si existió peligro común para bienes o personas, pero "la respuesta fue negativa. Ninguna de esas hipótesis se verificó".

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