"Me llamó la atención el efecto de la cuarentena y la alta tasa de letalidad"

Redacción de La Nueva.

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   El doctor Pedro Silberman, Director Nacional de Talento Humano y Conocimiento del Ministerio de Salud de la Nación, habló con La Nueva. sobre la situación actual del país en el marco de la pandemia de coronavirus.

   En comparación con los comienzos de la cuarentena, destacó que ahora conocen mejor el comportamiento del virus, que los sistemas de salud están más acomodados y que sus profesionales entienden más sobre los procesos que implican la atención a pacientes con COVID-19.

   —Al principio esperábamos un pico alto para la primera quincena de abril por lo que elaboramos distintas estrategias de contención. Estamos satisfechos porque la curva se aplanó y el pico se postergó para fines de mayo, principios de junio.

   Silberman aseguró que no faltan insumos en los hospitales y que los trabajadores están siendo entrenados para su utilización y descarte. Si bien reconoció que no hay un tratamiento único y efectivo, indicó que el Ministerio de Salud en conjunto con investigadores de la Universidad de Córdoba están poniendo el foco en estudios sobre el plasma de pacientes recuperados para poder utilizarlo en nuevos contagiados. También señaló que se está comprobando cierta eficacia en algunos antivirales.

    Dijo que Argentina tiene un alto índice de trabajadores de la salud infectados (14 %) debido a que la tasa de contagio es muy alta: “Por cada persona infectada se contagian de 3,5 a 5; cuando en el caso de la gripe de uno se contagian 1,2”.

   —Hay que entender que va a haber infección en los hospitales porque es altamente contagioso y hay que seguir los protocolos para disminuir las posibilidades de contagio. Creo que en algunas instituciones han subestimado el impacto que podía tener y no han sido sumamente insistentes con las medidas de bioseguridad.

   De todas maneras, hizo hincapié en que no hay que culpar al personal de salud por los contagios: opinó que lo ocurrido en el Hospital de la Asociación Médica (HAM) fue un evento desafortunado que se podría haber dado en cualquier otra institución, que hoy está ayudando a que se ajusten los mecanismos de control en los hospitales.

  —Hay que destacar que el personal de salud va a trabajar a un lugar donde las chances de contagiarse y contagiar a sus familiares son muy altas; y aun así van: hay un 17 % de posibilidad de que los trabajadores de salud infectados contagien a sus familias.

   El profesional también sostuvo que, tal como demuestran los países con gran cantidad de contagios, entre el 60 y el 70 % de la población argentina se va a infectar y que (sabiendo eso) el Gobierno debe evaluar quiénes, cuándo y cómo se van a contagiar para determinar los pasos a seguir hasta salir finalmente de la cuarentena, poniendo siempre el énfasis en que los más vulnerables son los mayores de 60 y quienes presentan factores de riesgo.

   —Ginés (González García, ministro de Salud) plantea que la salida de la cuarentena debe ser administrada, entendiendo que eso va a hacer que aumenten los casos, pero lo importante es que sea de una manera paulatina que no colapse el sistema de salud

   Sobre los aspectos que más le llamaron la atención desde la llegada de la pandemia, Silberman nombró el efecto positivo de la cuarentena en nuestro país que es reconocido a nivel mundial y, paradójicamente, la alta tasa de letalidad que tiene Argentina (todavía se desconoce el porqué), donde un 5 % de los que enferman mueren cuando en otros países con cifras de contagios más elevadas el porcentaje es entre el 3 y el 4 %. 

  —El ministro de Salud dice que es sorprendente cómo la gente ha madurado y se ha puesto la cuarentena al hombro, siendo solidaria y responsable. Su frase es que esto se pudo lograr porque este país está lleno de argentinos.

   También señaló como novedad que actualmente se ven distintas formas de manifestación de la enfermedad: al comienzo se tenía en cuenta la fiebre y el dolor de garganta; ahora se suman otras manifestaciones como síntomas gastrointestinales, neurológicos, en la piel, olfatorios, entre otros. Además, hay un gran porcentaje que son asintomáticos: “De los que se enferman, el 80 % tendrá formas leves, el 15 requerirán internación y un 5 % terapia intensiva”.

    Finalmente, Silberman se refirió a los testeos PCR (Reacción en Cadena de la Polimersa) que se utilizan para el diagnóstico y explicó que es suficiente la cantidad que se realizan dado que el nivel de positividad es menor al 10 % en nuestro país, y así lo establecen las recomendaciones internacionales.