Volvió el "Peco" y en Rosario hay como 100 motivos para ilusionarse

Redacción de La Nueva.

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Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva,com

   Si en algún momento se pone en marcha el torneo Oficial de la Liga del Sur, ¿Rosario Puerto Belgrano irá en búsqueda de su noveno título liguista, justo en el año de su centenario?

   Esa es la pregunta.

   Al menos volvió a hacerse cargo del primer equipo el entrenador con el que el francés consiguió el Clausura 2018: Federico Gómez Peña, el único privilegiado de la institución rosarina que se pudo coronar campeón como jugador y como técnico.

   --”Peco”, ¿cómo estás?

   --Bien, enjaulado. Ya no sé que hacer, esto es terrible; imaginate que yo, entre mi trabajo (es jefe del Departamento de Contralor Impositivo de la Municipalidad de Coronel Rosales) y el fútbol estoy todo el día fuera de mi casa. En casi dos meses de cuarentena corté el pasto mil veces y ordené placares y vestidores, algo que en condiciones normales y durante el año es imposible que haga. También jugué a lo que se te ocurra junto a mis hijos Sarina (10 años) y Genaro (4).

    Hablando de Genaro, justo cuando había empezado la escuelita en el tricolor puntaltense, se decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio y, por consiguiente, el cese inmediato de las actividades en las distintas entidades deportivas..

   “Casi ni alcanzó a ir; estaba muy entusiasmado. Como tenía una `moto' bárbara, fui al club a buscar uno de los arcos chicos que se utilizan en fútbol reducido para poner en el patio de casa. Al menos Genaro se saca las ganas pateando todos los días”, detalló el DT, quien tiene algunas concesiones permitidas en la institución de sus amores.

   Los jugadores del plantel francés fueron licenciados el 15 de abril, y desde ese día cumplen con un plan de trabajo que es monitoreado por el “Profe” José Piedrabuena.

   “Muchos de los chicos se llevaron barras y pesas para combinar ejercicios físicos con potencia, aunque nunca creíamos que la cuarentena se iba a extender tanto. Todo lo que se pueda hacer ahora en forma virtual ya no tiene sentido”, esgrimió el ex defensor del “Rosa”, bastión y referente de aquel equipo que dio la vuelta olímpica en 2001.

    Como en Punta Alta no se registraron infectados por el Covid-19, se escucharon rumores sobre la posibilidad de que tanto Rosario como Sporting vuelvan antes a los entrenamientos, en grupos pequeños y a distintos horarios.

   “Lo dije antes y lo reitero ahora: cada día que pasa debemos ser más estrictos en el cuidado personal, extremando las medidas de prevención para que la ciudad siga sin casos positivos. Si por no tener contagios liberamos las zonas y salimos a hacer vida normal, estaremos en problemas. Al menos yo soy muy respetuoso de las decisiones políticas que se toman y cumplo el aislamiento al pie de la letra por el bien de todos.

   Si Gómez Peña volvió a hacerse cargo del primer equipo de Rosario es por algo, ¿no le parece?

   --Es el año del centenario, ¿tienen o sienten la obligación de salir campeones?

   --No hay nada impuesto y no es algo que indefectiblemente deba suceder. Se armó un plantel competitivo, con refuerzos de jerarquía, de nivel, que le darán un toque de distinción al equipo.

   Esos jugadores "distintos" a los  que se refiere el DT son: Mauro Genovesse (defensor central proveniente de la Tercera división de Racing), Gastón Pinedo (volante mixto con contrato profesional en Quilmes) y Joel González (volante ofensivo o enganche que viene de jugar en Cosecha Mundial de Olavarría).

  “Peco” también puso el ojo en el ámbito local, y fue cuestión de que la dirigencia pueda concretar esas incorporaciones que resultaban primordiales para el entrenador: Lucas Esperón (Tiro Federal), Matías Salgado (estaba libre tras desvincularse de Bella Vista) y Leandro García (volvió al club tras su paso por Huracán de Ingeniero White).

   Aunque el orientador también cuenta como potencial “refuerzo” a Agustín Trotta, el goleador histórico de la entidad, recuperado totalmente de la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha (hoy se cumplen 308 días de la intervenición quirúrgica).

   Y al mirar hacia abajo, pone las fichas en un volante central de 23 años que llegó la temporada pasada pero que, por distintas lesiones, no logró tener continuidad.

   “Este tiene que ser el año de Gianfranco Gullaci, lo noto pleno y metido en el fútbol. Es un 5 aplicado, tanto en lo técnico como en lo táctico. Lo conozco cuando dirigí en las formativas de Villa Mitre y me gusta el estilo que tiene. Le falta meter más, no ser tan buenito”.

   Al momento de la interrupción de los entrenamientos, en Rosario venían cumpliendo tareas 33 jugadores, entre ellos 4 arqueros.

   “La exigente pretemporada que llevamos a cabo en los primeros meses del año está perdida”, señaló Gómez Peña, quien aseguró que si en algún momento arranca el certamen, su equipo necesitará un mes de preparación.

   "Alejandro Kohan, un Profe que tuve en las menores de Ferro, decía que para recuperar el tiempo perdido vas a precisar entrenar la misma cantidad de días que estuviste parado, ¿se entiende? Eso para estar bien desde los físico, aunque se vienen meses donde habrá que hacer hincapié en lo psicológico y lo anímico", destacó.

    En las retinas y en los paladares del mundo rosarino permanecen intactos los placeres ofrecidos por aquel equipo que obtuvo inobjetablemente el Clausura 2018 tras una campaña envidiable: 12 triunfos, 5 empates y una derrota 

    "Aquel Rosario generaba espectáculo y daba gusto verlo jugar. Ahora armamos un equipo competitivo, equilibrado y con variantes. Siempre pregoné que un plantel debe tener competencia interna, con jugadores que se puedan adaptar a más de un puesto y que puedan cumplir más de una función. Va a ser una formación elástica, con futbolistas de buen pie en cada una de las líneas. Pinedo es un volante mixto que puede arrancar de tres cuartos o de más atrás, Salgado puede ir de punta o de enganche y también puedo apostar por un doble 9 o dos delanteros de distintas características: uno de área y otro que vaya por afuera. Por suerte manejo un montón de opciones y eso es lo que me mantiene entusiasmado", indicó "Peco". 

    Y como buen estratega que es, me hizo entrar en el "jueguito" de imaginar ciertos dibujos tácticos y posibles esquemas de juego que, seguramente, él ya analizó, estudió, repasó y aprendió de memoria.

    "Este equipo puede jugar con cuatro volantes, no sé. Lo primero que busca un entrenador es que ciertos jugadores puedan actuar en dos o tres puestos para después no sufrir contratiempos, y en Rosario hay posiciones cubiertas hasta con tres futbolistas del mismo nivel y características. Estamos bien, hay que recordar que esto se paró 4 días antes de que arranque el campeonato. Estábamos listos para el inicio, afilados y con la expectativa de pelear lo más arriba posible".

   --Me imagino un 4-3-1-2, con enganche definido.

   --Es probable. Siempre me gustó un 5 "limpiaparabrisas" ubicado delante de la línea defensiva, como Damián Fernández en el equipo de 2018. Sería un 4-1-3-2, un dibujo que me encanta, porque ese volante le tiene que dar seguridad a los tres de adelante para que se suelten y arriesguen. En el Rosario campeón, Damián era el talón de Aquiles del tridente que conformaban Machain, Martorano y Navarro.

   "Creo tener las variantes necesarias como para probar el dibujo táctico que más se amolde al grupo. Puede ser un enganche y dos delanteros definidos; la propuesta será siempre atacar y lastimar".

   --¿No vas a extrañar a Brian Scalco?

   --Uhhh, ¿quien no lo extrañaría? Un crack. Brian tuvo momentos de excelente nivel en Sansinena, Huracán y en el Olimpo campeón 2009, aunque en Rosario mostró un rendimiento supremo al de cualquier jugador de la Liga. Además de ser goleador y figura en casi todos los partidos, mostró arrestos individuales dignos de un jugador de Federal A o B Nacional. 

    "El equipo jugaba para él y él se sentía a gusto. Lo vi muy metido, desenvuelto; creo que fue el mejor momento de Brian en el último tiempo, al menos desde que yo lo veo en el fútbol de la Liga".

    Con respecto a los pibes que piden pista en el plantel superior, Gómez Peña nombró a tres que ya venían siendo parte de las plantillas de Primera: Agustín Carrizo (volante mixto, categoría '98), Tomás Franchi (defensor o volante , '97) y Mateo Mussini (enlace, '99).

    "También volvieron dos chicos del club que estaban en All Boys. Son categoría 2001: Leo López (volante que se adapta a ambos perfiles) y Santiago Dos Santos (arquero). Jugaron en menores de AFA y este año, por problemas de alojamiento y porque tenían que buscar casa para vivir y costearse los gastos, decidieron regresar para entrenar con nosotros".

   --¿Habrá fútbol este año?

   --Tendría que haber, un plantel no puede estar un año sin competencia, es mucho. La mayoría de los jugadores de nuestro medio tienen una actividad paralela al fútbol, aunque tanto tiempo de inactividad te liquida la cabeza. Estar sin jugar puede dispersar a varios, a ocupar el tiempo de entrenamiento en otras cuestiones. Y no ir al club puede desviar a los pibes hacia otros rumbos no aconsejables.

  "Se podría armar un torneo de 2 o 3 meses, con el protocolo que se establezca y las medidas sanitarias que sean necesarias; un certamen de corto aliento que sirva de preparación para lo que vendrá en 2021".

   --De a poco, paulatinamente, se está levantando la cuarentena y la gente empieza a salir del encierro, quien dice que por ahí en julio o agosto la pelota salga a la luz...

   “Depende de muchos factores, si es con público o a puertas cerradas"

   --¿Cuál es la postura de Rosario?

   --Si es sin público, los dirigentes no están dispuestos a arrancar; sería una locura porque no podrían solventar los gastos. En los clubes no hay ingresos y la economía no te permite arriesgar; no es sencillo decidir afrontar una competencia sin tener un peso ahorrado.

  "Rosario interrumpió los pagos de los salarios cuando se desató la pandemia, aunque se comprometió a abonar los 15 días de marzo y se hará cargo de los sueldos otra vez cuando los jugadores se reintegren a las prácticas, que no tenemos ni idea cuando será".

   Pese a que el plantel sufrió 13 bajas, Gómez Peña no se lamenta.

    "El grupo actual se armó con jugadores que yo pedí y a mi gusto. Quedó una buena base del año anterior y se trajeron refuerzos activos y listos para saltar a la cancha. Por el momento cuento con el mismo plantel, por lo que volverían todos cuando se reanuden los entrenamientos", se sinceró.

     Se alejaron de la entidad 13 futbolistas (que habían arrancado el 2019 con Muricio Del Cero de DT y cerraron el año con Marcelo Katz al frente del equipo): Matías Medina, Maxi Brunelli, Julio Arias, Jonathan Romero, Ignacio Pierce, Franco Madarieta, Enrique Blanco, David Lopez, Ezequiel Dindart, Agustín Lezcano, Gianfranco Zaupa, Adrián Mora y Nicolás Ovando.