Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Fermín Scoppa: “Recuperé mi nivel y tengo metas bien definidas”

El múltiple campeón argentino de BMX se entrena todos los días para dar el salto de calidad. Y cuenta con el respaldo de ATSA.

Fotos: Rodrigo García-La Nueva.

Por Javier Oscar Schwab / jschwab@lanueva.com

   Fermín Scoppa está con todas las pilas. Recargó energías luego de sufrir un accidente que lo marginó por un tiempo y, recuperado física y mentalmente, sigue proyectando su futuro en el profesionalismo del BMX.

   Con 17 años, y 14 en actividad en una disciplina del ciclismo que se practica con bicicletas cross -con ruedas de 20 pulgadas de diámetro-, Fermín se muestra entusiasmado con el nuevo formato de entrenamiento.

   “Existe un antes y un después del accidente que me cambió la cabeza y me fortaleció para correr. Con el apoyo de psicólogos y un nuevo entrenador (Ramiro Marino) recuperé mi nivel y tengo metas bien definidas”, dijo Fermín, el joven deportista que lleva ese nombre gracias al fanatismo de su papá Alejandro por una canción de Dante, el hijo del “Flaco” Luis Alberto Spinetta.

   --¿Qué cambió en tu rutina?

   --El entrenamiento es mucho más complejo, más adaptado a la evolución que muestra el BMX. Mi entrenador, Ramiro, era un gran corredor, a tal punto que tuvo la virtud de poder vivir de esto en Estados Unidos.

   --¿Cómo lo contactaste?

   --Por un amigo que había ido a entrenar con él. Nos conocimos y me dijo que si algún día necesitaba un entrenador me esperaba con los brazos abiertos.

   --¿En qué se hace hincapié?

   --El trabajo es mucho más técnico. Además, se va perfeccionando el físico con cargas máximas, a la vez que en la pista todo es más exigente.

   --¿Cómo programás una semana de entrenamiento?

   --Los martes voy al gimnasio (2 a 3 horas) y luego a la pista a hacer largadas o piques cortos (tiradas de 20 o 40 metros) y los miércoles entreno a los chiquitos porque soy “profe”.

   “Tengo buen feeling con todos los chicos, me quieren y me respetan. Me viene bárbaro para transmitir mis experiencias. Tengo entre 15 y 23 alumnos de 5 a 12 años”, apuntó.

   --¿Arrancar bien de abajo es lo ideal?

   --Si. Yo tenía 3. Llevo años arriba de la bicicleta, lo que me da una mayor sintonía.

   --¿Este deporte es tu cable a tierra?

      --Claro. Si tengo un mal día me descargo en la pista. La bici siempre es una buena excusa para sentirme bien; hago mandados o salgo a girar por ahí.

   --¿No te saturás?

   --No. Es mi pasión. Hay chicos de mi edad que están saturados. Pero yo lo veo como un juego y me resulta fácil trasladarlo al nivel profesional.

   “Antes ganaba las carreras desde la salida, pero corría con la cabeza trabada. El accidente (sufrió una fractura expuesta en la tibia izquierda y quemaduras por las raspaduras) me cambió, dejé de pensar en la estrategia y disfruto de la carrera.

   --¿Tu próxima meta?

   --Participar, a fines de septiembre, de la Copa Mundial del BMX SuperCross en Santiago del Estero con todo el grupo de elite. Sumaré experiencia, ya que mi meta está puesta en Mundial de Houston del año que viene.

   --¿Tenés respaldo?

   --Sólo del Sindicato de ATSA, que siempre se portaron diez puntos conmigo. Me ayudan a solventar los viajes, que son muy caros.

   --Encima, el tipo de cambio no te beneficia.

   --No. A las chicas que viajaron a Bélgica les costó 33.000 pesos el pasaje de ida. Yo llevo la bici en un bolso de golf, que es rígido y seguro.

Mamá Gilda siempre está pendiente 

   “Mi mamá (Gilda) siempre está pendiente de mí y de mi hermano (Valentín). Ella mueve todo cuando hay que conseguir plata. Se hacen cenas, fiestas con sorteos o un bono contribución. Le debo todo lo que soy", dijo Fermín.

   “Me gustaría seguir los pasos de mi actual entrenador, quien gracias al BMX pudo ir a vivir a California. Igual tengo en mente cursar medicina en la UNS o en la UBA. Podría ser en el área de psiquiatría, pero no lo tengo definido".

   "Mis campeonatos argentinos los obtuve en los años 2010/12/13/15/16 y 17. El físico para competir no es determinante ya que hubo un estadounidense campeón del mundo que medía 1.60 metros. Estoy perfeccionando la técnica, y saco mayor provecho de los choques. Lo importante es no perder el equilibrio. Estados Unidos no tiene piloto de punta pero si 3 o 4 que se meten en la final. Y hay un holandés de 23 años que es un animal".