Mariano Moreno: "Con Orsi, de chicos, éramos terribles malditos, dañinos..."
Fanático milrayitas, hizo casi toda su carrera en el club de Villa Rosas. Jugó un Argentino C, fue subcampeón liguista y tuvo un breve y exitoso paso por Huracán. Tiene 33 años y ganas de colgar los botines.
Por Javier Oscar Schwab / jschwab@lanueva
(Nota publicada en la edición impresa)
El club de los 300 es sólo para privilegiados. Superar esa cifra vistiendo la casaca de los colores amados no tiene precio. Y no es para cualquiera.
“Siento satisfacción, orgullo”, dijo Mariano Moreno, quien recibió una distinción de su querido Libertad -una camiseta con el número 300-, aunque el pasado domingo, ante Olimpo (victoria 3-1 en Villa Rosas) llegó a los 301 cotejos.
—Vos y (Mariano) Orsi se dieron el gusto de hacerlo en Libertad.
—Con Mariano somos los que más partidos tenemos en el club. Con él viví todas las inferiores, menos infantiles porque arranqué en Liniers. El “Cachorro” es '85 y yo '86; debutó un año antes. Nos conocemos de memoria, somos amigos.
—Cuántas travesuras juntos, ¿no?
—Con Orsi, de chicos, éramos terribles malditos, dañinos. Llegábamos a los partidos 2 o 3 horas antes y como éramos la última categoría (cuarta) en jugar nos íbamos a dar vueltas. En Punta Alta salíamos y volvíamos sobre la hora.
"¿Qué hacíamos? Nos escapábamos hasta la plaza y comprábamos sándwiches y gaseosas, porque no nos dejaban comer. Una vez nos descubrieron y alguien alcahueteó. Jorge Moschetti, el coordinador, nos juntó un lunes y se nos terminó la joda..."
—De grandes siguieron.
—Y..., hacíamos un poco de quilombo. Recuerdo un viaje a Senillosa (Neuquén), para enfrentar a Bicicross por el Argentino C. Era un acontecimiento jamás vivido. Estaba el fallecido Cristian Bérgamo y Lucas Costa Biondi, y cuando vimos el colectivo que nos iba a llevar nos caímos de c...; toda la vida anduvimos en micros de línea y esa mole... Lo disfrutamos mucho, no te podés cansar con tanta comodidad.
—Ese equipo los eliminó.
—Allá empatamos 2-2 y en la vuelta 0-0, pero perdimos por penales (5-4).
—¿De Senillosa volvieron juntos con Bella Vista?
—Sí. Ellos jugaban en Centenario, pero se les rompió el colectivo. Los trajimos y en medio de la nada chocamos contra un Falcon que nos quería pasar. El colectivo se cerró, nunca vio al auto.
"Cuando bajamos el dueño del auto se asustó, pensó que lo íbamos a linchar. Había una gomería perdida en la ruta y el gomero se cruzó para protegerlo. Los fuimos a ayudar (risas)".
—Te expulsaron 12 veces.
—Tuve una racha, con el "Negro" Bérgamo, de 3 o 4 rojas seguidas. En Cabildo, Comercial y La Armonía... Lo rajaban a él y a los 10 o 15 minutos me tocaba a mí. Entraba al vestuario, nos mirábamos y nos reíamos.
—Dos veces te expulsó Facundo Tello.
—Ufff... Contra Comercial, en un clásico, bien expulsado. Ese día echó a cuatro: el "Pato" Yaeger, Mieres, Bérgamo y yo. Insólito.
“La otra fue contra Pacífico en Cabildo. Le hice un foul al 'Topo' Angelini y quedamos sentados de espaldas. Me mordió el hombro, me di vuelta para darle un codazo y justo me ve Facu y me raja. Le mostré la mordida, terrible mordida. Pero el pícaro del 'Topo' se salvó y yo recaliente”.
—¿El gol más lindo?
—El primero, a La Armonía, en cancha de Libertad. Un golazo. Tiran un centro en el arco que da a la peatonal, rechaza la defensa y la empalmé como venía, casi de mitad de cancha. Entró al ángulo del arquero Walter Álvarez.
"También le hice uno lindo a Rosario. El arquero era Coronda. Me la pasa Rodrigo (Martínez) en un saque de arco, corrí 30 metros, la pelota quedó picando y le dí con todo. Entró por arriba de Marcos, que estaba adelantado".
—¿Al principio eras un poco temperamental?
—Era un animal. En 2008 llevaba como 9 amarillas y ahí me agarró Eduardo Báncora: “Si te sacan la décima no jugás más”. Lo tomé tan a pecho que después fui una seda. Diez partidos sin tarjetas.
—¿En qué puesto debutaste en Primera?
—De "3", en 2004, con Alejandro Ibarguen. No sé por qué en ese puesto. Jugué un tiempo en cancha de San Francisco. Con el correr de los partidos me pusieron de 8 y después, el "Polo" Calvismonte, de 4.
"Mi mejor versión fue en Huracán, con Gustavo Echaniz de DT. Línea de 3 atrás, yo jugaba por derecha y (Leonel) Navarro por izquierda en el medio. Ese equipo era un violín".
—¿Te costó ir a Huracán?
—Siiii. Me llevaron Luis Díaz y Calvismonte. Me costó porque era un rival donde toda la vida hubo pica. Me puteaba con "Fede" Iglesias y "Agüita" Alonso, nos odiábamos.
"Cuando llegué pensé que me iban a tratar mal porque yo hacía cosas en la cancha que no tenía que hacer, pero fue todo lo contrario. La gente también me trató bárbaro y hoy me siguen respetando".
"Salimos campeones. Los miraba disfrutar a Ezequiel y Fede y pensaba: 'Qué lindo sería que me pasara en Libertad'".
—Estuviste cerca.
—Perdimos en la final ante Tiro en cancha de Olimpo. No me puedo olvidar, porque fue un año excelente con "Fito" (Cuello). El equipo estaba aceitado, éramos ordenados y nos hicieron pocos goles. Jugábamos para Darío (Gigena) y sabíamos que una iba a meter.
"En esa final nos perjudicó el árbitro (Gustavo Altuna) porque no nos dio dos penales. Los vi por televisión y fueron penales; todavía me da bronca".
—Dejaron todo.
—La vida. Erico acalambrado, Darío desgarrado. Pero no le quito méritos a Tiro porque entró octavo al playoff y nos sacó la ventaja. Tenían mucho recambio; nosotros estábamos muy ajustados.
Mariano con sus dos soles: Zoe, la mayor, y Alma.
—¿Todavía soñás con ser campeón?
—Soñar sueño, pero... Tengo 33 años y las ganas intactas, aunque hay cosas que tiran mucho.
—¿Cuáles?
—Perderme los partidos y los viajes de mis hijas. Zoe, la más grande, juega en el seleccionado Sub 14 de Hockey de Bahía y Alma salió segunda en un Provincial de gimnasia artística. Están en Villa Mitre.
"Muy prendidas con el deporte. Mi señora (Daiana) las acompaña siempre; falto yo, por eso no creo que siga mucho tiempo más en el fútbol".
—Se te hacen hinchas de Villa Mitre.
—(Piensa) Lamentablemente sí. Juegan ahí y están las amigas.
—¿Tus padres eran de seguirte?
—Siempre. Marisa y José, desde infantiles hasta el día de hoy. Pero ahora van a ver a mis nenas, eso me pone celoso (risas).
"También mis abuelos, el fallecido José ‘Piter’ Risueño, que era de Comercial, y los que están presentes: José Aníbal (Moreno), que me sigue más por los medios, y la abuela Luisa.
—¿La abuela sabe de fútbol?
—¿Cómo? Una vez fue al negocio de Báncora (La Banderita) y le dijo a Eduardo: "Cuando vos lo veas a Mariano con las orejas coloradas, sacalo. ¡Sacalo porque lo echan...!". Y tenía razón, era una señal.
—¿Te agarraste a trompadas con alguien?
—No. Pero casi me mata Darío (Gigena). Perdimos con Huracán en su cancha en 2012. Le pegamos un baile terrible, pero erramos goles y al final perdí una pelota y nos vacunó Fede Iglesias.
"Subimos al cole, empecé a boquear: 'Los delanteros que tenemos no le hacen un gol a nadie'. Darío se dio vuelta: '¡A quién le decís, pendejo...!' Se vino del primer asiento, no lo podían frenar. Abrí la ventana para saltar del micro".
"Tenía a cinco colgados de la espalda y en ese momento subió alguien y lo calmó".
—¿Y después?
—Llegamos a Villa Rosas, nos teníamos que bañar. No quería entrar al vestuario, pero necesitaba pedirle perdón. Cuando entró a ducharse me mandé, me desvestí rápido y me puse al lado, pero ni me miraba. Le dije: "Disculpá, Darío.." Para qué, arrancó otra vez. Dios me ayudó, seguro por el chorro de agua que lo tranquilizó un poco. Nunca más abrí la boca (risas).
Familia, trabajo y la trayectoria
-Tío y ahijado. “Es Lisandro Santamaría, una gloria del club. Los nenes de él, Juan Manuel y Juan Cruz juegan conmigo. Y el que siempre está presente: mi ahijado Valentino”.
-El trabajo. “En el depósito de la Coope, en Luiggi al 1000. Estoy en control y logísitca desde hace 12 años. Ahí me bancaron siempre mis encargados: Néstor Suárez, Mauro Hernández , Federico Vampamellen y Emanuel Carrari”.
-Los datos de Cocho. Jugó 301 partidos en Libertad, con 16 goles (7 a La Armonía, 2 a Pacífico de Cabildo y uno a Rosario, Pacífico de Bahía, Huracán, Comercial, San Francisco y Sporting) y 27 en Huracán, donde fue campeón del Clausura 2015. Ascendió con Libertad (2012). ¿Debut? Promocional 2014, el 17/7/04, en San Francisco 0, Libertad 0.