Olimpo llegó a un acuerdo con la Sociedad Impacto Latino y recuperó parte de su patrimonio

Redacción de La Nueva.

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Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva.com

   Después de una ardua lucha, de charlas constantes y de reuniones que empezaban un día y terminaban al siguiente, la dirigencia de Olimpo consiguió destrabar el litigio judicial que pesaba sobre parte de su patrimonio, recuperando para uso privado, social y público el salón Bariloche y los salones del primer piso de su sede social.

   Para que se entienda, esos lugares, que podían contener actividades del club pero no con fines de lucro, habían sido concesionados a la Sociedad Impacto Latino durante la presidencia de Jorge Ledo, que los explotó (con un boliche en el salón Bariloche y un pub en la parte alta) hasta 2013, cuando la CD comandada por Alfredo Dagna decidió “sacar” del club a la firma liderada por la familia Catini.

   En ese momento, Impacto Latino inició una demanda en contra de Olimpo y el 16 de julio de 2014 la justicia civil de Bahía Blanca condenó al club Olimpo, exigiéndole a restituirle a la sociedad Impacto Latino tres bienes, entre los que figuraba el salón Bariloche.

   La decisión también alcanzaba a la tenencia del inmueble de calle Sarmiento Nº 46, donde Impacto explotaba las cocheras del Club Olimpo, y el Salón ubicado en el Primer Piso de la sede social sita en calle Sarmiento Nº 52. Sobre estos bienes pesaba un contrato de locación oportunamente suscripto, es decir, los días viernes, sábados y domingos entre las 21 y las 6 del día siguiente.

   En el marco de una polémica desatada entre el club y esa sociedad, el juez Pablo Federico Bostal consideró que Olimpo incurrió en el ejercicio de la “justicia por propia mano” y “en absoluta clandestinidad, violentando cerraduras y candados e impidiendo el acceso de cualquier persona vinculada a la entidad actora”.

   “Considero plenamente acreditada en autos la irrupción a los tres inmuebles por parte de personal del Club Olimpo de forma violenta y clandestina", sostuvo Bostal en el fallo y continuó: "Y es por ello que, sin perjuicio del derecho que pudiera haberle asistido a la demandada, los actos que unilateralmente ha realizado importaron un obrar antijurídico que -mediante vías de hecho- impidieron el ejercicio efectivo y directo de la tenencia que detentaba la actora".

   Después de eso, el juicio de Impacto Latino, el que todavía tenía dos años más de concesión para el uso de los sitios enumerados, sobre Olimpo siguió su curso y en estos días estaba por salir el fallo condenatorio.

   Desde la entidad aurinegra aseguran que si se llegaba a una sentencia, en caso de ser desfavorable, “había que cerrar la sede y hasta siempre...”.

   Aunque por insistencia del presidente Mauro Altieri, Olimpo consiguió destrabar el conflicto mediante una primera retribución en efectivo y un plan de pago en cuotas mensuales.

   De esta manera, se pone fin a un calvario para los directivos olimpienses, que ya sueñan con un salón Bariloche (el que es necesario remodelar y modernizar) con recitales, shows y distintos eventos que le permitan al club crecer financiera y económicamente.

   También “meterle mano” a la fachada de la sede, la que no se podía tocar ni remodelar porque era parte afectada a la querella judicial.

   La idea de los dirigentes es sacar, lo más rápido posible, a licitación el salón del primer piso (donde funcionaba Nativo Disco Pub) para la instalación de un gimnasio y la planta baja para un café temático.

   Además, se volverá a colocar el cartel de “Olimpo” en la pared del frente y comenzará a funcionar el local de marketing de la institución.

   No sólo eso, se está pensando seriamente en inaugurar una pantalla en el acceso principal a la sede. ¿Algo más? Si, parece que en octubre, cuando el club llegue a los 108 años de vida, la fiesta se hará en el Salón Bariloche con todos los “chiches”. Como corresponde...