Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

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Las mujeres necesitan más tiempo de estimulación

   La respuesta de excitación sexual se produce más rápidamente en el varón que en las mujeres. El pene del varón se encuentra listo para la penetración en apenas unos minutos, en cambio las mujeres suelen necesitar más tiempo de estimulación para estar preparadas y recibir el pene placenteramente.

   Esto se debe a un proceso neuroendocrino ya que el cerebro es el encargado de enviar las señales a todo el cuerpo durante los estímulos. Por eso, estos son tan importantes y hay que dedicarles tiempo, ese tiempo a veces suele ser entre 20 o 30 minutos, según cada mujer.

   Una vagina húmeda no siempre es un indicador de excitación en la mujer, recordemos que la vagina de por sí es húmeda. Esta aclaración es importante que la tengas en cuenta, porque muchas veces interpretar que la humedad es sinónimo de excitación da lugar a penetraciones a destiempo provocando dolor o molestias.

   A las mujeres, en general, suelen resultarles muy excitantes la estimulación de los senos, ya sean caricias circulares o succión de los pezones, todo con muchísima suavidad y cuidado.

   La estimulación directa en la zona de los genitales no siempre suele ser de preferencia en un primer momento, al contrario, la estimulación será mejor recibida si es indirecta, lenta y muy sensual al principio, por ejemplo, el rozamiento con la ropa puesta.

   Las caricias en los brazos, espalda, nuca, la cara interna de los muslos, detrás de las rodillas, y ni hablar del cuello y las orejas, que son zonas erógenas casi de preferencia para muchas mujeres. Y fundamentalmente los besos. Los besos suaves, profundos, los besos que acarician, los besos intensos y todos los besos que te guste dar.

   Las señales externas de que la mujer esta excitada pueden ser, cambios en la respiración, sudoración, aumento del calor corporal, enrojecimiento de la piel, vasocongestión vulvar y lubricación vaginal.

   Cuando la excitación se va haciendo más intensa, el útero es empujado hacia atrás y hacia adelante dentro de la cavidad pélvica, expandiendo de esta manera el extremo superior de la vagina, preparándola para la penetración. Si no se le da el tiempo necesario a la mujer para excitarse y que se produzcan estos movimientos internos del útero, la penetración puede ser dolorosa o molesta y seguramente va a dificultar que se llegue al orgasmo.

   En cambio si la vagina se ha distendido y dilatado producto de un mayor fluido de sangre, la penetración será muy placentera y se incrementarán todos los cambios producidos en la fase de excitación. El climax ha sido alcanzado, con la estimulación adecuada y sin apuros. El o los orgasmos llegarán sin dificultad.

   Otro dato importante a tener en cuenta, es que, más allá de la vasta experiencia que un varón pueda tener con las mujeres, no todas las mujeres responden del mismo modo a los mismos estímulos.

   Por lo tanto, no hay fórmulas, ni reglas a seguir, será tu interés en aprender y descubrir que le gusta a tu pareja y no apurar sus tiempos de respuesta sexual.