Quedó aplastado por dos camiones y logró sobrevivir
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“Tardé bastante en entender lo que pasó. Lo concreto es que estoy acá de milagro”, dijo Ramiro Márquez (39), quien conducía ayer a la madrugada un automóvil y sobrevivió luego de quedar atrapado entre dos camiones, en el sector conocido como La Bajada de Grünbein.
El dramático suceso se registró alrededor de la 1.30 sobre el paso a nivel existente en el lugar, en circunstancias en que los tres vehículos circulaban en la misma dirección hacia la ruta nacional 3.
“Fue un instante y no me acuerdo mucho del momento. El camión que venía adelante lo hacía muy bien, despacio; veníamos tranquilos. Es que nadie puede pasar rápido por allí. Fue un golpe, hice así (moviendo la cabeza hacia atrás) y después me aplasté contra el airbag”, explicó Márquez a La Nueva.
El vehículo que originó la triple colisión fue un camión Volkswagen, dominio EYB 447, con acoplado, patente WJF 626, conducido por Alejandro Álvarez (43), oriundo de Trenque Lauquen, quien transportaba trigo al puerto de Ingeniero White, y resultó con una fractura en la pierna izquierda.
Una falla en los frenos impidió que Álvarez pudiera frenar el camión que embistió al Volkswagen Fox, de color negro, chapa OSA 206, a cargo de Márquez, quien al momento del impacto se encontraba cruzando el sector de vías ferroviarias.
Producto del impacto, el auto golpeó contra la parte trasera de un Scania, matrícula RWQ 677, con acoplado, patente DVV 037, guiado por Jorge Galdós (34), que lo antecedía a unos cinco metros de distancia, y también cargaba cereal.
Álvarez quedó atrapado en su camión debido a que sus piernas fueron aprisionadas, por lo que debió ser retirado por los bomberos voluntarios de Ingeniero White.
Márquez sufrió heridas en su pierna derecha y en la cabeza, y también fue auxiliado a salir de su rodado, totalmente destruido.
“Llegando a las vías me chocaron de atrás y me hicieron dar contra el camión de adelante. Recuerdo que me ayudó a salir el chico que manejaba ese camión. Lo concreto es que estoy acá de milagro”, admitió Márquez.
Dijo que cuando se bajó de su vehículo “simplemente me miré yo, porque no podía creer lo que había pasado. Ahora estoy bien, sólo tengo algunos raspones y un golpe en la pierna y en la cabeza”.
“Siento felicidad de poder estar vivo. A vos te hinchan para que tengas las cosas en regla y otro que no lo tiene te lleva por delante. Lo primero que pensé fue que se prendía fuego el auto, porque vi que salía humo y por eso quería salir”, mencionó.
Diego Nadal, director de Defensa Civil, reconoció que “fue un verdadero milagro”.
“Viendo como quedó el coche es increíble que solo haya sufrido golpes”, aclaró.