Una Eva y dos Adanes
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Hace 55 años, en el mes de septiembre de 1959, se estrenó en el Gran Cine Ocean la película Una Eva y dos Adanes, la que sería considerada por muchos como la actuación más destacada de la actriz Marilyn Monroe, llamada a convertirse en un mito dentro de la historia del cine.
Presentada como “la película más graciosa y atrevida que haya hecho Hollywood”, el filme era de carácter “picaresco y original”, acompañando a la Monroe los grandes comediantes Tony Curtis y Jack Lemmon.
Estos actores personifican a los músicos Joe (Curtis) y Jerry (Lemmon), quienes presencian la Matanza de San Valentín, en el Chicago de 1929, y amenazados por la mafia no tienen más alternativa que disfrazarse de mujeres e ingresar en una banda de música femenina, donde Joe se enamorará de la cantante (Marilyn).
Marilyn tenía entonces 33 años y le quedaban tres años de vida, en una muerte-suicidio que ayudaría a convertirla en un icono pop y un símbolo sexual del siglo XX.
Durante el rodaje de Una Eva... Monroe siempre llegaba tarde, pedía repetir las tomas y con mucha dificultad memorizaba sus líneas.
La filmación resultó ser angustiosa para la actriz porque allí quedó embarazada, supuestamente de Curtis, pero sufrió un aborto espontáneo.
La película tuvo un gran éxito de crítica y público; fue la más taquillera de ese año y consiguió cinco nominaciones a los premios Oscar. Por su actuación ganó el Globo de Oro a la mejor actriz de comedia o musical.
En nuestra ciudad compitió con Anna de Broklyn –cine Grand Splendid, con Guna Lollobrigida y Vittorio de Sica-, La revoltosa –Rossini, Carmen Sevilla-, Tierras bravas –Gloria, Peter Finch- y La bestia acorralada –Astral, con Jack Palance.