La tragedia del Puerto Elevador Nº 5
Han pasado 28 años desde que se inmolaron aquellas 22 vidas.
John Donne (1573-1631), poeta y clérigo inglés. Nació en Londres y estudió en las universidades de Cambridge y Oxford. Criado en la fe católica, se hizo después protestante.
Dijo hace 405 años lo siguiente: "Ningún hombre es en sí equiparable a una isla; todo hombre es un pedazo del continente, una parte de tierra firme; si el mar llevara lejos un terrón, Europa perdería como si fuera un promontorio... como si se llevaran una casa solariega de tus amigos o la tuya propia. La muerte de cualquier ser humano me disminuye, porque soy una parte de la Humanidad. Por eso no quieras saber nunca por quién doblan las campanas, ¡Están doblando por ti!".
Sentimos y recordamos hondamente a los compañeros y al mismo elevador de alta capacidad operativa, con un personal superior de significativa técnica.
En consecuencia, con el corazón dispuesto a contemplar el mundo, nos unimos con este sentido recogimiento, con los ojos del amor, a la espera de ese momento inefable e imprevisible en que pensar y sentir se convierten en una misma energía oradora y en que, juntos, adquieren el poder de abrirse paso en el arduo camino de la resignación cristiana.
Cuanto más el héroe linda con la tragedia, más se acerca al Olimpo de los inolvidables. Cuanto más unido te sentís en un sitio, con más fuerza te sentís a impulsarlo. Pero la memoria permanece con profundo sentimiento por los que se fueron en ese infortunio: ves venir las olas del mar, que murmuran permanentemente que no hay pena, que por intensa que sea puede serenarse por la esperanza y la fe. No existe ningún pesar que no pueda penetrar un rayo de luz que disipe todas las sombras. El amor es el arquitecto del alma.
Pascal expresó: "El corazón tiene razones que el cerebro ignora; ambos son necesarios, colaboran en la misma obra".
Si una vez...
Si una vez sintieras la sed de todo lo que te falta y la repugnancia de todo lo que te sobra...
Si una vez no sintieras horror ante la muerte, por amor al placer de la vida, o sintieras amor a la vida sin la necesidad del horror a la muerte...
Si pudieras cerrar los ojos sin encender en el alma la envidia, el deseo de la ambición, el egoísmo...
Dijo el Papa Karol Wojtyla: "Rezo por el eterno descanso de todos los muertos. El Señor seguirá dando fuerza y alivio a todos".
"La razón es la que ilumina al hombre, pero el sentimiento es quien la conduce".
Desde mi memoria, que tiene sentimiento, recuerdo desde el corazón.
Pascual Angel Pietracatella
Bahía Blanca