Gardel, ahora, marchó preso

Redacción de La Nueva.

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 Le robaron el sombrero. Le cortaron una oreja. Se lo quisieron llevar de cuerpo entero. Y ahora, como si fuera poco, terminó en un oscuro pasillo de la comisaría Primera, sentado en un banquito.

 Eso sí: a pesar del particular escenario, el 'Mudo' no perdió su sonrisa ni resignó prestancia. Nos referimos, claro está, a la figura de Carlos Gardel sentada en un banco, la cual fue colocada el pasado 24 de junio en la vereda del hotel Muñiz, en la primera cuadra de O'Higgins.

 En las últimas horas del domingo, personal policial detectó que la estatua había perdido estabilidad, inclinándose sobre la parte libre del banco que ocupa. No se sabe si fue consecuencia del choque de un auto, si se la quisieron llevar o si simplemente cedió ante la enorme cantidad de personas que cada día lo abraza y toca.

 "La estatua se despegó, estaba suelta. Por eso, para evitar un acto de vandalismo, decidimos cargarla al móvil y llevarla a la comisaría", explicó uno de los agentes que participó del operativo.

 Ningún detalle adicional brindó el policía sobre el lugar que ocupó El Zorzal en el patrullero, ni la particular impresión que causó su llegada al edificio de Beruti 650.

 "Lo sentamos en un banco, le colocamos el sombrero y llamamos al municipio, para que lo vengan a retirar", agregó el agente.

 Sobre mediodía de ayer, el comisario mayor Héctor Abel Maggi, jefe de la policía regional, dio orden de trasladar la escultura a un taller de la calle Donado, donde un artesano, especialista en el modelado de fibra de vidrio y resina, procederá a realizar los arreglos necesarios, pensando en su reubicarlo en el sitio original.

"Dura lucha".

 "Va a ser una dura lucha". Así definió José Valle su postura ante esta nueva contingencia que afectó la figura de Gardel. El hombre --empresario de música-- fue el responsable de donar la obra a la ciudad, en ocasión de cumplirse el aniversario de la muerte del cantor y como un reconocimiento --señaló entonces-- a la "capital provincial del tango", según definió a Bahía Blanca.

 "Con esto de la estatua no me van a vencer, si la sacan 50 veces la vamos a colocar otras tantas", explicó ayer a este diario.

 Valle también mandó construir una caja de acrílico que servirá para proteger a la obra, luego de que unos jovenes le robaran su sombrero y, pocas horas después, desconocidos le cortaran la oreja derecha.

 "Son casos aislados. Tengo más de dos mil correos agradeciendo el trabajo y manifestando su pena por lo ocurrido. Estoy muy contento con los bahienses", agregó.

 Valle estimó que la estatua volverá a O'Higgins la semana entrante, cuando el parpadeo de sus luces marque el esperado retorno.



Se viene Di Sarli. El venidero 30 de septiembre se inaugurará en la plaza del Tango --vecina a la estación Sud-- un monumento al músico bahiense Carlos Di Sarli, también donada por el empresario José Valle. Se trata de una obra hecha en madera -- de 90 centímetros de ancho por 120 de alto-- por el artista local Celso Biondo. Su habilitación se realizará en el marco del primer festival de tango local, centrado, precisamente, en homenajear al creador del tema Bahía Blanca.