Antonini Wilson aseguró que nunca le pidieron identificarse para ingresar a la Casa Rosada
El empresario venezolano Guido Antonini Wilson, protagonista del escándalo de la valija con 800 mil dólares, reveló que no le pidieron identificación para ingresar a la Casa Rosada en agosto de 2007, cuando participó de un agasajo al presidente Hugo Chávez, a pocos días de haber intentado ingresar el dinero de forma ilegal al país.
El empresario relató que salteó "el control sin que nadie le preguntara nada", e ingresó al acto que brindó en la Casa de Gobierno el entonces presidente Néstor Kirchner para agasajar a su par venezolano.
Así se pronunció Antonini Wilson en una entrevista con un matutino porteño, en momentos en que salió a la luz un video que prueba su presencia en la Casa Rosada, dos días después de que lo interceptaran con el maletín en el Aeroparque Jorge Newbery.
El empresario comentó que asistió al acto junto a Victoria Bereziuk, secretaria del por entonces titular del OCCOVI, Claudio Uberti, quien habría permitido que ingresara sin pasar por los controles ni acreditar su identidad.
"Entramos por un costado. Subimos a unas escaleras y llegamos a un lugar donde había unos detectores de metales iguales a los de los aeropuertos, pero nosotros pasamos por un costado Salteamos el control sin que nadie nos pregunte nada", afirmó Wilson.
Con estas declaraciones, el venezolano contradijo el argumento del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, que había asegurado que Wilson no estuvo en la Casa de Gobierno porque "no consta en ningún lado el ingreso".
Según Wilson, "había mucho control, muchos policías, incluso disfrazados de cosas especiales, pero nadie preguntó nada".
En este sentido, agregó: "Yo sabía que eso pasaba porque estaba junto a la gente del (ministro de Planificación, Julio) De Vido".
De hecho, el empresario aseguró que De Vido lo "saludó con una palmada en el hombro" y le "sonrió", aunque dijo no saber qué le "quiso decir con eso".
Además, Antonini comentó que luego del acto. Bereziuk trató de convencerlo de que el episodio del maletín en Aeroparque ya había concluido: "Me dijo que me quedara tranquilo, que los habíamos cagado, que no tenían mi nombre y que al otro día ya nadie se iba a acordar de esto". (NA)