Desde hoy, opera la nueva terminal de ómnibus
A partir de la 0.20 de hoy, comenzó a operar la nueva terminal de ómnibus, inaugurada formalmente el viernes último, con la salida de un servicio de la empresa "El Rápido", con destino a la ciudad de Mar del Plata, desde la plataforma 10.
El histórico momento contó con la presencia del intendente municipal Cristian Breitenstein, quien asistió acompañado por varios funcionarios del gabinete municipal.
"La gente va a tener, a partir de ahora, la posibilidad de apreciar y usar este lugar. Es una obra largamente demandada. Esto, en unos días, va a ser parte de una grata costumbre de los bahienses", señaló el jefe comunal, minutos antes de la partida del ómnibus.
Previo a la salida del colectivo, Breitenstein entregó medallas conmemorativas del hecho a cada uno de los 15 pasajeros que abordaron la unidad. Cada una tenía la leyenda: "El intendente municipal, en nombre propio y de la comunidad, a los primeros usuarios que disfrutan de la nueva terminal de ómnibus Bahía Blanca".
El momento de la habilitación ya lo había comunicado, de manera oficial, el subsecretario de Obras y Servicios Públicos, Rubén Lascano, quien, durante la mañana de ayer, recorrió las instalaciones, supervisando las últimas tareas, al tiempo de imponer a empresas y empleados la decisión de iniciar el traslado al nuevo edificio a partir de las 20.
"Tenemos estipulado para la hora cero del miércoles --por hoy-- tener la terminal en funcionamiento. Por eso, todo el personal municipal y de las empresas de servicios y de ómnibus trabajan en los últimos detalles", señaló, entonces, el funcionario.
La puesta en marcha del lugar carecerá, en los primeros meses, de locales comerciales (para los cuales están destinados 31 módulos), los cuales comenzarán a ser ocupados a partir de la concesión del complejo.
Respecto del personal para su funcionamiento, mientras la vieja terminal ocupaba a 60 personas, a partir de la fecha serán 200 los empleados responsables de las tareas de seguridad, mantenimiento y administrativas.
"Mantendremos el actual personal municipal y sumaremos gente de los planes sociales. La idea es dar a todos una formación adecuada, de manera que la futura concesionaria pueda ocuparlos de manera inmediata", explicó Lascano.
En cuanto a la distribución de las boleterías, la mayoría de las empresas ocupa un único box de 12 metros cuadrados, siendo unas pocas las que han alquilado dos espacios contiguos. En este tema, el secretario de Economía y Hacienda, contador Hugo Borelli, calificó como de "absolutamente inexactas" ciertas versiones que indicaban que había inconvenientes con los espacios asignados a cada compañía de ómnibus.
"Esa situación se resolvió hace tiempo, con consenso de las partes y con la intervención de la secretaría de Gobierno", señaló Borelli.
También aseguró que las compañías de ómnibus se encuentran al día con el pago del canon que les cobra el municipio, "salvo algunas excepciones".
Uno de los temas más delicados como obras faltantes que podrían eventualmente haber complicado la habilitación en tiempo y forma fue la conexión de las líneas telefónicas para proveer el servicio de Internet, ya que el mismo debía mantenerse en operatividad, incluso, mientras se realizaba el traslado de todo el personal de un edificio al otro.
El operativo, sin embargo, pudo ser llevado a buen término en tiempo y forma.
En relación al manejo del lugar, la terminal seguirá en manos municipales, hasta tanto se licite su concesión.
"Todos los ocupantes tienen firmado un contrato precario hasta que asuma el nuevo concesionario, con quien deberán arreglar las nuevas condiciones de uso, muchas de las cuales están igualmente estipuladas en el pliego de bases y condiciones", explicó Lascano.
La puesta en marcha de la nueva terminal se realizó con el único servicio que partía efectivamente de nuestra ciudad. Se trató de la unidad Nº 39 de la empresa "El Rápido", patente FJD 152, conducida por los choferes Miguel Angel Villar y Jorge Humaniuk, ambos nativos de Mar del Plata.
Los demás micros que, antes de esta partida, iban arribando a la ciudad desde distintos puntos del país, ingresaban en la vieja terminal, la cual operó de manera simultánea con la nueva hasta pasada la medianoche.
Exactamente en el momento en que comenzó el nuevo día, Susana Alvarez, quien presta servicios en la terminal desde hace 20 años, utilizó el micrófono de la torre de control anunciando la partida de la "unidad Nº 39".
La nueva terminal comenzaba así su camino. Coincidentemente, también a partir de la primera hora de hoy, la ex estación ferroviaria del ferrocarril Rosario-Puerto Belgrano terminó su foja de servicios de 29 años como terminal San Francisco de Asís.
Un paredón que no fue
Uno de los elementos que llaman la atención en el amplio espacio interior del nuevo edificio es la presencia de 22 columnas de hormigón armado, de 2,10 metros de altura, separadas unos 5 metros entre sí, alineadas a lo largo de toda la obra, entre las cuales se han ubicado, en algunos de sus tramos, grupos de sillas. Su existencia es parte de una obra inconclusa, por cuanto el proyecto original indicaba levantar entre ellas una pared separando la zona de espera de la de preembarque, cuando aún se planteaba que la terminal funcionara según los lineamientos de un aeropuerto.
En medio del proyecto, se modificó esa decisión y la pared jamás se construyó, como tampoco se demolieron las columnas.
"Es una obra que afecta las visuales del lugar y que, en su momento, hubiera sido simple demolerlas, pero decidieron dejarlas por si en el futuro son necesarias", resumió el ingeniero Marcelo Di Buo, representante técnico de la empresa Beltrán Ingeniería, contratista principal de la obra.
La ausencia de ese muro favoreció, sin embargo, a los 15 locales comerciales que tendrán su frente hacia la zona de las dársenas.
Las empresas de colectivos pagarán $1.700 de alquiler
1.700 pesos: eso es lo que cada empresa de colectivos pagará en concepto de alquiler de oficina de ventas y expensas de la nueva terminal; es decir, entre 1.000 y 1.200 más de lo que se abonaba en el viejo edificio.
Lo confirmó, ayer, quien dijo ser el propietario de la única compañía del rubro con origen y asiento en Bahía Blanca, el dueño de Ñandú del Sur, Alejandro Caruso, mientras hacía las conexiones eléctricas necesarias para inaugurar su local, un espacio de alrededor de tres por cuatro metros que le fue adjudicado por sorteo y cuya ubicación corre, igual que la del resto, sobre Drago al 1.900.
"El municipio cobra por box, expensas y por cada colectivo que entra a la terminal. No creo que repercuta en el pasaje, pero en el viejo edificio era mucho más económico. Hasta que venga un concesionario, a este elefante lo vamos a mantener nosotros", comentó.
El monto de los alquileres fue confirmado por el subsecretario de Obras y Servicios Públicos, Rubén Lascano, quien aclaró que el futuro concesionario de la terminal no podrá exceder los 1.700 pesos, porque así lo estipula el pliego de licitación.
"Esto nos agarró de apuro y no tenemos tiempo de acondicionar todo en tan pocas horas", agregó Caruso.
Es que, según le habían dicho minutos antes, a la medianoche no sólo comenzaría la operatoria en la nueva terminal, sino que se interrumpirían los servicios de luz y teléfono en la vieja.
Dudas sobre el final
Antes de que se confirmara que a la hora cero se concretaría el traslado, el empleado que atendía el quiosco del antiguo edificio no sabía cómo ni en qué nuevo lugar se iba a ubicar.
"Hay que ser mago, para saber cuándo nos vamos --decía, cerca del mediodía--. Sé que hay un espacio asignado, pero no sé cuál es".
Igual panorama comentaba quien se encargaba del viejo sector Informes. "Todo es incierto, aunque las empresas ya se están trasladando. No tenemos ninguna información, sólo la que salió en "La Nueva Provincia"".
En la empresa Plusmar, lo mismo: "Estamos a medias --aseguraba una empleada--. No sabemos cuándo nos trasladamos. Sé que se paga un alquiler, pero no sé de cuánto, aunque calculo que ahora va a aumentar".
24 policías, 16 cámaras y $ 6 la botellita de gaseosa
La nueva terminal de ómnibus multiplicará varias veces las medidas de seguridad de su antecesora: la custodiarán 24 policías, divididos en cuatro turnos, y 16 cámaras de vigilancia, según el jefe del Servicio de Policía Adicional, Víctor Vargas.
La distribución del personal, dijo, será con seis efectivos por la mañana, 12 por la tarde y otros seis por la noche.
"¿Cómo nos pagarán? Con horas adicionales, extras, de todo...", según estimaron dos policías que circulaban ayer por los nuevos andenes.
Se prestará especial atención en los perímetros de la terminal, "por las villas que están alrededor", y a la entrada y salida de gente.
"Creemos que todo estará funcionando dentro de 15 días", agregaron.
Mientras tanto y aunque con muy pocos clientes, el bar "La Terminal" funciona desde el día del acto de inauguración, el viernes último.
Pertenece al mismo empresario de la cantina de la vieja terminal y ayer estaba como para atender en un día de circulación normal.
Algunos precios:
* Botella de gaseosa de medio litro: Seis pesos.
* Botellita de yogur bebible: cuatro pesos.
* Desayuno con café con leche y tres medialunas: 11,50 pesos.