Cien años de lucha sin bajar los brazos
La localidad de Felipe Solá cumple hoy 100 años.
Se trata de una fecha en la que las generaciones presentes profundizan en la historia de quienes los precedieron y formaron parte de este centenario, ya sea como iniciadores de obras, impulsores de proyectos o simplemente como habitantes de este pueblo.
Acostumbrado a las "malas pasadas" que periódicamente suele jugar el factor climático por estar ubicado en una zona marginal del distrito de Puan y del sudoeste de la provincia de Buenos Aires, esta localidad tuvo la particularidad de no bajar nunca los brazos y mirar siempre hacia adelante, aún en medio de las continuas crisis.
Prueba de ello son las instituciones que nacieron dentro de la comunidad y fueron creciendo durante estos cien años, generando proyectos o iniciativas que hoy son una prometedora realidad.
Ejemplo de ello son la Escuela Nº 4, cuya existencia data de 1905; la Cooperativa Agrícola, fundada en 1919, hoy desaparecida, pero durante gran parte de estos cien años tuvo un importantísimo rol en la comunidad solense y el sector agropecuario y el Club 9 de Julio fundado en 1922, y que aún hoy sigue perdurando y participando activamente en la faz deportiva.
También la capilla San Felipe, cuya primera misa fue oficiada el 30 de julio de 1939; destacamento policial que data de 1945; unidad sanitaria, cuya creación data de 1953 y fue un ejemplo de labor comunitaria, destacándose entre otros nombres, el de quien fuera presidente en sus inicios, Nomi Greer.
Asimismo, se puede mencionar la Cooperativa Eléctrica, fundada en 1961 y generadora de muchos proyectos vitales para la localidad; el Instituto San Felipe, que inició su labor en 1970 y es hoy un referente en Felipe Solá; Jardín de Infantes Nº 905, que data de 1967 y el Centro de Jubilados y Pensionados, producto también del esfuerzo de un grupo de fundadores, en el año 1981.
También el complejo polideportivo, gestado en 1973 gracias al espíritu visionario del entonces Vera Rosas, y concretado unos años después por una comisión constituida al efecto, que construyó las instalaciones en terrenos cedidos por los Sres. Fermín y Marcelo Delgado, la construcción del edificio de la Sede Social de la Juventud Agraria, inaugurado en 1979.
Ya más cerca en el tiempo, la comunidad de Felipe Solá continuó trabajando por sus proyectos y es así que surgen la Asociación Bomberos Voluntarios, el 22 de abril de 1992 --un orgullo para la localidad y su radio de acción--; el Centro Tradicionalista Atahualpa Yupanqui, que data de 1992; la Asociación de Ganaderos y Agricultores, creada el 22 de febrero de 1997; el Centro de Apicultores, en 2001, y la Biblioteca Popular en 2007.
Obras.
El delegado local de la municipalidad de Puan, Enzo Martínez, enfrenta este festejo centenario con unas cuantas obras concretadas, como es el caso de la refacción total del salón social Bomberos Voluntarios, que fue cedido en comodato a la municipalidad, y en el que se construyó un escenario, vestuarios, sanitarios, todo con la iluminación respectiva.
Además, se incorporaron 70 mesas con sillas nuevas.
Dicho salón es utilizado para eventos y festivales por las instituciones locales.
Las instalaciones refaccionadas fueron inauguradas en el día de ayer.
También con vista al centenario, se realizaron trabajos de reparación interior y exterior de la unidad sanitaria local, cuyo director es desde hace 27 años el doctor Hugo Bustos.
Funciona como anexo a la misma el Hogar de Ancianos Basilio Balladares, denominado así en homenaje al primer interno que tuvo el hogar, y que falleció en 1995, con más de 100 años de edad, habiendo permanecido durante nueve años en el establecimiento.
Se realizó el pintado total de la entidad --interno y externo-- además del cerramiento de los paredones laterales.
El intendente de Puan, Horacio López, entregó una ambulancia 0 km. totalmente carrozada en el marco de la celebración de este centenario.
Se realizaron, además, seis cuadras de pavimento urbano en un sector de la localidad, y existe expectativa en la población por el próximo inicio del pavimento del tramo de 15 km. de ruta 76, obra que fue adjudicada en octubre de 2007.
Se concretó también la construcción de 37 viviendas del Plan Federal I, y están en construcción cinco viviendas del Plan Compartir.
Los orígenes de la localidad
El ferrocarril hizo su aparición en los umbrales del siglo XX, cumpliendo un rol fundamental en estas tierras: la colonización.
Es por eso que tierras desiertas y grandes latifundios del sur de la provincia de Buenos Aires verían pasar la imponente mole de hierro sin saber que con ella arribaba el progreso.
Alrededor de las incipientes estaciones de ferrocarril, idénticas y con un mismo fin, se fueron congregando los iniciadores del largo camino que hoy llega a los 100 años.
Si bien es cierto que la historia de los pueblos de nuestra región tienen similitudes entre sí, en todas está presente el ferrocarril como factor determinante del inicio.
En el caso de Felipe Solá, el asentamiento de colonos en la región y tomando como base la estación de trenes fue gestando el desarrollo de una pequeña sociedad.
Poco se conoce oficialmente de los orígenes.
Se sabe que los primeros habitantes eran en su mayoría colonos y changarines que trabajaban en "las bolsas", y la presencia de dos o tres comercios llamados de "ramos generales".
Las chacras en los comienzos eran pequeñas, oscilaban entre 50 y 100 hectáreas y las habitaban familias numerosas.
Los propietarios eran escasos y las chacras se agrupaban en colonias, que muchos años más tarde fueron expropiadas o vendidas a quienes las explotaban, citando como ejemplo la Colonia El Pilar, o La Manuela.
En un catálogo comercial editado en 1926, la localidad de Felipe Solá aparece identificada con el nombre de Glorialdo, en alusión, seguramente, a Glorialdo Fernández, propietario de la Colonia El Pilar.
Esto se debe a que, si bien en 1907 se hizo el trazado de los terrenos cedidos por la sucesión Felipe Solá, ya existía un asentamiento de familias y había comenzado a funcionar la Escuela Nº 4, en 1905, cubriendo seguramente una de las necesidades de aquella época.
El ferrocarril.
El ferrocarril ha sido decisivo en la historia de Felipe Solá y otros pueblos de la región, ya que durante muchos años fue el único medio de comunicación y transporte.
La localidad comenzó a conmemorar los aniversarios luego de cumplirse 78 años de su fundación.
Ello se debía a un total desconocimiento que se tenía de los antecedentes históricos del lugar.
La administración comunal de aquel momento y un grupo de jóvenes decidieron ahondar en la historia rescatando una serie de datos del Archivo Provincial, del Archivo General de la Nación y de la Dirección de Geodesia.
Se conoció así que el médico español don Felipe Solá adquiere, el 18 de diciembre de 1882, los lotes 56 y parte del 45 del distrito de Puan.
Posteriormente, el asiento de colonos en la región fue gestando el desarrollo de una pequeña sociedad.
Al fallecer el doctor Felipe Solá, hecho ocurrido el 6 de agosto de 1897, la propiedad fue adjudicada en condominio a su mujer e hijas.
La sucesión de Solá, en 1907, autorizó la fundación de un pueblo sobre la estación del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico, aprobándose su trazado definitivo por decreto del Poder Ejecutivo, el 20 de enero de 1908, fecha que actualmente se toma como oficial de fundación de la localidad.