Historia que se mueve entre lo onírico y lo real
El alemán Marc Forster (37 años) concretó el rodaje de este filme en 2003, pero demoró su edición por problemas de producción. El éxito de su posterior Descubriendo el país de Nunca Jamás le permitió concluirlo. Sin embargo, en Argentina fue lanzado en video sin pasar por las salas de cine.
"Los budistas lo tenían claro: todo es una ilusión", se escucha decir a uno de los personajes.
Aunque en este caso cabría hablar de ilusión esquizoide. Esta es una de las claves para interpretar este misterioso, perturbador y estilizado drama psicológico ambientado en Manhattan, que incursiona en la paranoia y plantea las dificultades para diferenciar lo onírico de lo real. El "umbral" del título.
El filme comienza y concluye con secuencias similares: un accidente sobre un puente, que deriva en el incendio de los automóviles involucrados, la muerte instantánea de dos personas y un tercero que permanece herido en el pavimento.
Uno de los ocasionales transeúntes que se acercan al lugar del accidente es el médico psiquiatra Sam Foster, quien procura auxiliar al herido. También llega una muchacha rubia que dice llamarse Lila y ser enfermera. Ambos permanecen junto al joven hasta que una ambulancia lo lleva a un hospital.
Es de noche y al concluir el operativo de auxilio, Sam invita a Lila a tomar un café en un bar, porque la tragedia de la que fue testigo no le va a permitir --dice-- conciliar el sueño y con seguridad le producirá pesadillas. Esta variante es la otra clave para entender esta historia "pesadillesca".
Al "día siguiente", Sam comienza a atender a un joven llamado Henry Letham. En realidad, se trata de un paciente de la doctora Beth y Sam la reemplaza mientras dura su licencia por enfermedad.
Henry tiene 20 años, es pintor abstracto y estudia Bellas Artes en un College. Afirma escuchar voces, pronostica una granizada no prevista por los meteorólogos que efectivamente ocurre y anuncia su inminente suicidio, el sábado a medianoche, justo cuando cumple 21 años. Su intención es emular a Tristan Reveur, un artista plástico que hizo lo mismo, a la misma edad. Porque según sostenía Reveur, "el suicidio elegante es la máxima obra de arte".
Un día después, Henry aparece con quemaduras de cigarrillo en su brazo izquierdo. Señala que está practicando para el infierno y no oculta su sentimiento de culpa por la muerte de sus padres.
Aunque luego cree reconoce a su padre en uno de los pacientes de Sam, que es ciego y en algún momento recobra "milagrosamente" la visión.
El anuncio de Henry de su suicidio impulsa a Sam a movilizarse para evitar que cumpla su trágica decisión. Consulta a colegas de un hospital para una eventual internación y comienza a investigar sobre la existencia de una supuesta novia de Henry, de nombre Athena, quien integra un grupo vocacional de teatro y está ensayando Hamlet, de Shakespeare.
En esta movilización, Sam pone en riesgo su propia estabilidad mental. Hay inclusive un momento en que el psiquiatra parece vivir un estado de delirio: las escenas se repiten, las imágenes se superponen y la noción de espacio y de tiempo parece quebrarse y perder sentido.
Sam convive con Lila, una pintora que también fue su paciente y lleva en su brazo las marcas de su intento de suicidio. Por la misma razón, ella conoce las alteraciones psicológicas y los dilemas que pueden llevar a una persona a intentar el suicidio.
Y esto es todo lo que se puede informar sobre esta historia, cuya complejidad se despeja después de la última secuencia que resulta similar a la primera.
El filme incluye un notable trabajo del iluminador Roberto Schaefer, habitual colaborador de Forster, mientras que la música electrónica de Massive Attack es muy funcional a la historia y suena bien.
También cabe destacar las actuaciones de Ewan McGregor --uno de los mejores de su generación-- como el perturbado Sam, y del promisorio Ryan Gosling, de convincente expresividad.
Agustín Neifert
NOVEDADES EN SINTESIS
Miami vice
Guión y dirección: Michael Mann
Elenco: Colin Farrell, Jamie Foxx, Li Gong
Origen: Estados Unidos-Alemania (2006)
Género: Policial
Para mayores de 13 años.
Con base en la serie de TV de los 80, tiene a dos detectives que investigan a un grupo criminal internacional, liderado por una bella mujer de origen cubano-chino.
Ambos trabajan infiltrados transportando droga hasta el sur de Florida, con el fin de desenmascarar a la banda responsable de tres asesinatos.
La intensidad del caso empuja a Crockett y a Tubbs a límites donde la verdadera y la falsa identidad se confunden, donde el policía y lo que finge ser son una misma persona.
El ratón Pérez
Dirección: Juan Pablo Buscarini
Elenco: Ana María Orozco, Fabián Mazzei, Joe Rígoli
Origen: Argentina-España (2006)
Género: Comedia infantil
Para todo público.
Inspirada en una antigua historia escrita en España, la adaptación presenta al mítico ratoncito que acompañó la dentición de generaciones enteras desde 1870 como un empresario bondadoso, quien cambia por monedas de oro los dientes de leche de los niños.
El conflicto se genera cuando una niña pierde accidentalmente un diente, pero en la mañana siguiente, tanto el canino como la moneda que Pérez debía dejarle a cambio, no están allí.
PARA VOLVER A VER
La vida de David Gale
(The life of David Gale)
Dirección: Alan Parker
Elenco: Kevin Spacey, Kate Winslet, Laura Linney
Origen: Estados Unidos (2003)
Género: Drama/suspenso
Para mayores de 16 años.
Alegato contra la pena de muerte. Luego de ser acusado de violación de una alumna e inculpado por el crimen de una militante a la que lo unía una estrecha amistad, el líder de un movimiento abolicionista es condenado a una inyección letal. Pero todavía cree que alguien puede ayudarlo a probar su inocencia y acepta ser entrevistado por una periodista, pero a cambio de 500 mil dólares.