Regresados
La película enfoca la traición a uno mismo y las segundas oportunidades. También se refiere a la gente que tiene cerca de 40 años y que aún está a tiempo de darle un giro a su vida.
BUENOS AIRES (Télam) -- Los cineastas Flavio Nardini y Cristian Bernard, autores de 76-89-03, terminarán mañana el rodaje de Regresados, una película nocturna que habla de segundas oportunidades y transita géneros como el terror, el romance y la comedia negra para mostrar el reencuentro, luego de 20 años, de un grupo de ex compañeros secundarios.
Mientras concluyen la filmación de Regresados, los realizadores piensan en buscar financiación para otra película, En las rocas, una historia que transcurre durante la guerra en las Islas Malvinas y que cerraría una trilogía iniciada por 76-89-03.
"El tema principal de Regresados es la traición a uno mismo y las segundas oportunidades", dijo Nardini acerca del largometraje, y explicó que habla de "gente que tiene cerca de 40 años, una edad en la que todavía estás a tiempo de darle un giro a tu vida".
Regresados empezó a mediados de junio, en un museo de la Capital Federal y tuvo como protagonistas a Diego Capusotto, Carlos Issa, Fabio Aste, Constanza Marino, Luis Sabatini, Marcelo Sein, Francisco Nepomuceno, Carlos Garric y Luciano Cazaux, además de la participación especial del cineasta y guionista José Martínez Suárez.
Regresados transcurre en Buenos Aires, en una sola noche de 2002, en plena crisis socioeconómica, y a partir de la reunión de estos ex compañeros narra tres historias: el romance entre dos ex novios, la historia de terror psicológico entre dos viejos enemigos y la conflictiva llegada de un exitoso argentino que vive en España.
El valor de la tenacidad. A pesar de la repercusión que tuvo en su momento 76-89-03, una película de seres miserables que también transcurría en una sola noche, a Nardini y Bernard les costó más de la cuenta sacar a flote este nuevo proyecto, hasta que consiguieron un crédito del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa).
"La amamos tanto que no podíamos hacer otra cosa. Es una película maravillosa y yo la quiero ver como espectador. Me muero de ganas de ver estas historias tan distintas pero tan llenas de emociones, nostalgia, miedo, suspenso", afirmó Nardini y aseguró que pasa de todo menos nada.
"Todos los personajes tienen cuentas pendientes, pero no se puede decir que sean perdedores o ganadores, malos o buenos. Son gente de carne y hueso que tienen su parte buena y mala. Lo cierto es que son mucho menos miserables que los de 76-89-03, porque tienen intención de cambiar las cosas y buscar una salida".
En ese sentido, Nardini acotó que esta película es más universal y melancólica, y no "tan punk ni políticamente incorrecta como 76-89-03". Además tiene un final muy duro, en el que no hay piedad para los personajes, ni condescendencia por lo que les pasa y cómo terminan".