Un 0800 para denunciar explotación de niños
Se procura identificar, localizar y erradicar en cada lugar del país las prácticas concretas de trabajo infantil.
Elocuente
120 millones de niños y adolescentes sufren pobreza, según recientes datos de las Naciones Unidas.
La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación habilitó una línea telefónica para recabar información y denuncias sobre niños explotados laboral y sexualmente. Se trata de la 0800-666-6006 y una página Web de consulta (www.consulta182.jus.gov.ar), cuyo objetivo es identificar, localizar y erradicar en cada lugar del país las prácticas concretas de trabajo infantil.
La línea estará habilitada hasta el 7 de abril próximo y de acuerdo con la Secretaría de Derechos Humanos fue impulsada en cumplimiento del Convenio 182 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ratificado por el Estado argentino.
El Convenio 182 exige a las naciones firmantes tomar medidas inmediatas y eficaces para la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, con carácter de urgencia.
La OIT rubrica como peores formas a la esclavitud, el reclutamiento u oferta de niños para la prostitución y la utilización de chicos para la realización de actividades ilícitas, en particular, la producción y el tráfico de drogas.
Víctimas.
Hubo un tiempo en que el niño era considerado un adulto pequeño y se desconocía su propio y particular proceso de desarrollo; las consideraciones actuales lo ubican en un marco ideológico y cultural que le promete protección y derechos, aunque la realidad parece quebrar la letra de esos tratados.
Así fue como la Asamblea de las Naciones Unidas aprobó, en 1989, la Convención sobre los Derechos del Niño, donde se plantea el resguardo de la niñez y la responsabilidad de los Estados y de los padres en la defensa de la vida y el bienestar de los niños.
No obstante, la realidad parece quebrar la letra de los tratados, convenciones y leyes universales, al revelar que los niños son las principales víctimas de la pobreza, la exclusión y el sufrimiento.
Lo muestran las cifras y las imágenes que circulan de la niñez, sobre todo de los países periféricos o que atraviesan crisis profundas, que se constituyen en una muestra extrema de la barbarie humana.
Lo muestra la realidad latinoamericana con sus casi 120 millones de niños y adolescentes pobres, según los datos de UNICEF (el órgano de las Naciones Unidas para la niñez), con regiones que llegan a tener el 80 por ciento de la población infantil urbana en situación de pobreza como en Honduras o Ecuador.
Es la misma región a la que pertenece Argentina, donde los datos revelan que la franja más pobre del país es la de 6 a 14 años, que alcanza al 73 por ciento de los niños de esas edades, según cifras elaboradas por UNICEF en base a datos del año pasado del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.
Situaciones de pobreza, hambre, desnutrición, distintas formas de explotación y maltrato infantil, muertes evitables, chicos en la calle y abandonados, configura una situación que olvidó el histórico lema "los únicos privilegiados son los niños".