Babasónicos no defraudó
Aunque se pueda caer en un lugar común: Babasónicos es un grupo que intenta algo distinto. Y quedó de manifiesto anoche cuando hizo su puesta en escena en el club Universitario de nuestra ciudad, ante más de 1.000 personas --un público conformado mayoritariamente por chicas adolescentes--.
Lo de puesta en escena se ajusta perfectamente al grupo nacido hace 13 años. ¿Pruebas? El ingreso de Adrián Dargelos --con el resto del grupo ya sobre el tablado-- fue la de una estrella de rock. Con saco claro y un pañuelo estilo tanguero se fue acercando al micrófono en "cámara lenta" cuando el reloj marcaba las 21.10. Después se dedicó a cantar y a bailar con el aliento del público como aliado.
Previamente había subido al escenario Luchi Camorra junto a tres Babasónicos --vestidos con otras ropas y con sus rostros cubiertos por caretas-- para interpretar entre 5 y 6 canciones como lo hace habitualmente en las giras de los actores principales de la cita de anoche.
Los primeros saltos llegaron después del saludo de Dargelos y con el rush de dos de las canciones más comerciales del grupo: Irresponsable y Los calientes (esa que una cerveza hizo popular con el pegadizo "cómanse a besos esta noche").
Después pasó La puntita, una melodía romántica que muchos se animaron a cantar y "esos ruidos" electrónicos de los cuales se vale este grupo --como dijo un antiguo integrante de uno de los grupos más exitosos de la ciudad presente ayer en el concierto-- para combinar con las guitarras de Diego Uma y Mariano Roger y cerrar un sonido diferente.
Luego de completar más de una hora sobre el escenario --la garganta de Dargelos que había postergado el recital por una semana no se notó deteriorada--, se fueron. Al rato volvieron para cerrar el show y dejar a todos conformes, aunque con ganas de más.