Un médico está acusado de asesinar a Martínez Martínez
BUENOS AIRES (DyN) -- Un médico fue detenido, acusado por el crimen del prestigioso cardiólogo José Martínez Martínez, asesinado de cuatro disparos, el último martes, en su consultorio del barrio Norte.
El sospechoso, identificado como Néstor Morelli, de 39 años, quien había trabajado con la víctima en el Hospital de Clínicas, se negó a declarar ante la justicia, pero igualmente clamó su inocencia.
Morelli fue arrestado a las 20 del jueves por personal de la división Homicidios y de la comisaría 19, de la Policía Federal, en su departamento de Rivadavia 4391, de esta capital, donde vivió hasta hace poco y en el que se secuestraron seis armas.
El detenido trabajó como colaborador de Martínez Martínez en el Hospital de Clínicas y había sido denunciado por la víctima por haberse ausentado de su trabajo, según fuentes de la investigación.
Morelli fue trasladado primero hasta la comisaría 19, en Charcas al 2800, y desde allí al Palacio de Tribunales, donde se negó a declarar ayer a la tarde ante la juez de Instrucción María Cristina Bértola.
El sospechoso será trasladado al penal de Ezeiza, señalaron fuentes judiciales.
Según el abogado Rubén Lombardi, defensor de Morelli, la negativa a prestar declaración obedeció a que no conocía las pruebas que existen en su contra.
Lombardi manifestó a la prensa que su cliente dijo ser inocente y que "no tiene nada que ver" con el crimen de Martínez Martínez, aunque por el momento no pudo acceder al expediente, ya que la magistrada decretó el secreto sumarial.
El abogado reconoció que Morelli afronta otra causa penal, desde hace un año y medio, por la denuncia de una médica, compañera de trabajo, que lo acusó por un supuesto "hurto o robo" en su domicilio, y que desde alrededor de esa fecha no veía al cardiólogo.
Contactos con el hampa. Morelli, quien había trabajado en los hospitales Tornú y de Clínicas, donde fue suspendido por supuestas irregularidades, es sospechado también de supuesta conexión con bandas de ladrones que asaltaban las casas de médicos de esos nosocomios cuando cumplían guardias, según revelaron autoridades de ambos establecimientos.
Al parecer, Martínez Martínez --presidente de la Fundación Cardiológica Argentina y jefe de la Unidad Cardiovascular del Hospital de Clínicas-- tenía fuertes sospechas sobre una supuesta relación del ahora detenido con la serie de robos que sufrían sus colegas.
Morelli --un hombre de mediana estatura, contextura física robusta y barba tipo candado--, fue conducido esposado al despacho de la magistrada. Tenía puesto un pantalón y un buzo de gimnasia.
Los investigadores estuvieron trabajando hasta varias horas después de la detención de Morelli en la búsqueda de nuevas pruebas, y no descartaron que pudiera haber más detenciones.
Una fuente judicial admitió que "se está trabajando sobre la posibilidad de que haya una segunda persona involucrada" en el crimen, pero se abstuvo de brindar mayores detalles.
En la vivienda del sospechoso los investigadores encontraron seis armas de fuego, algunas de ellas de puño y caza y una escopeta, que fueron enviadas a periciar, aunque los investigadores no establecieron si alguna de ellas era calibre 3.80, como la que se usó en el homicidio.
El abogado Lombardi recalcó que "todas (las armas secuestradas) están registradas" y que su defendido "es aficionado a la caza".
Según el letrado, Morelli "está muy mal; es un médico de prestigio, un hombre de familia y, obviamente, ha negado su participación en el hecho".
En tanto, el director del Hospital de Clínicas, Hermes Pérez, dijo que "Martínez Martínez nos había comentado que varios médicos de sus servicios habían sufrido robos en sus casas; ahora, no sabemos si tenía relación con el doctor Morelli".
A su vez, el director del Hospital Tornú, Alberto Demichelis, confió que Morelli "habría sido acusado de haber robado o mandado robar a casas de colegas", y confirmó que "fue desplazado" de esa institución "por ausencia prolongada y abandono de guardia".
Martínez Martínez fue encontrado asesinado de cuatro disparos, en su consultorio de Junín 1276. Tenía 57 años, estaba casado y era padre de tres hijos.