Solsticio de Invierno: cómo influye este momento astronómico en la astrología

LucIA

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Este 21 de junio, el hemisferio sur entra oficialmente en invierno. Es el solsticio, el momento en que el Sol alcanza su punto más bajo en el cielo al mediodía, generando la noche más larga del año. A partir de ahora, aunque cueste notarlo, los días empiezan a alargarse nuevamente.

Pero más allá del dato astronómico, el solsticio tiene un peso simbólico muy fuerte para la astrología. Marca el ingreso del Sol en el signo de Cáncer, un signo cardinal de agua, vinculado a las emociones, la familia, la protección y la memoria. Cada vez que el Sol entra en un signo cardinal (Aries, Cáncer, Libra o Capricornio), se abre un nuevo ciclo estacional y también una etapa energética particular.

Un tiempo para volver hacia adentro

Mientras que la temporada de Géminis nos empuja hacia el afuera, el intercambio y el movimiento, el paso del Sol a Cáncer marca un cambio de frecuencia.

Empieza un tiempo más introspectivo y emocional, donde muchas personas sienten la necesidad de replegarse un poco, de priorizar los afectos cercanos, el hogar, los espacios seguros. En este sentido, el invierno no solo se vive en el cuerpo, sino también en el estado de ánimo: hay menos impulso, más recogimiento, más necesidad de contención.

También es una etapa para trabajar el autocuidado, procesar lo vivido en los últimos meses y sembrar intenciones internas, como si estuviéramos preparando la tierra para una transformación que todavía no se ve pero que ya empezó.

¿Quiénes sienten más el impacto?

• Cáncer, claramente, es el protagonista de esta etapa. El Sol en su signo trae mayor visibilidad, pero también más exposición emocional.

• Capricornio, su opuesto complementario, puede vivir este tránsito como una oportunidad para equilibrar lo emocional con lo estructural.

• Aries y Libra reciben esta energía en tensión, lo que puede generar incomodidad o necesidad de ajustes en temas vinculares.

• Escorpio y Piscis, como signos de agua, fluyen con esta vibración más fácilmente. Pueden aprovechar el momento para conectar con su mundo interior y profundizar vínculos.

¿Qué propone la astrología para este momento?

No se trata de “hacer más” ni de empujar. El solsticio invita a hacer espacio interno, a escuchar lo que pide el cuerpo y el corazón. Puede ser un buen momento para:

• Reorganizar el hogar o crear un ambiente más cálido y nutritivo

• Revisar viejos recuerdos o dinámicas familiares

• Trabajar en el cuidado emocional propio y de los demás

• Dar lugar al descanso y a los rituales íntimos

Y aunque el invierno apenas comienza, el hecho de que los días empiecen a alargarse poco a poco nos recuerda que la luz siempre vuelve, incluso en la noche más larga del año.